Daniel Ricciardo sigue soñando con poder lograr una victoria que se le resiste desde el Gran Premio de Bélgica de 2014. Pudo haberla logrado en España y en Mónaco, pero una mala estrategia, primero, y una parada lenta en boxes después, le impidieron repetir éxito. Dos años son demasiados sin ganar para el piloto de la eterna sonrisa y es, sin duda, su gran objetivo para esta temporada.
Para ello, y vista la inmensa superioridad de los Mercedes en pista, es fundamental que las circunstancias de carrera sean cambiantes: “Si todo está limpio, ellos son los primeros, pero, si llueve o pasa algo, podemos reducir la distancia. Con la lluvia, se abren oportunidades para el piloto para marcar diferencias. Es fácil cometer errores, aunque sean más rápidos en mojado es más probable que cometan errores”. Las condiciones en Montmeló y en Monte Carlo así lo fueron, aunque señala que “estaría bien poder ganarles con ellos en la pista”.
De los circuitos que quedan de campeonato, el que mejor ve Daniel Ricciardo para las características de Red Bull es el de Singapur: “Es un circuito fuerte para nosotros y el año pasado fue una debilidad para Mercedes. Si pasa lo mismo, podremos conseguir algo. Si no, nuestra oportunidad real es en las carreras que llueva”. En la temporada 2015, Singapur fue uno de los dos circuitos donde Mercedes no subió al podio, mientras que Daniel Ricciardo terminó en segundo lugar, sólo superado por Sebastian Vettel.
Cuestionado acerca de la nueva reglamentación del año 2017, Daniel cree que “los coches van a ser más rápidos. Será un poco más físico en las curvas de alta velocidad. Sé que nuestro coche es bueno en eso. Con más carga aerodinámica, veríamos unas carreras muy divertidas. ¿Cuánto va a cambiar? No lo sé, yo estoy disfrutando mucho ahora. Si sólo se mejora un poco, será positivo”.