Fernando Alonso se mostraba cauto tras los Libres 2 en los que terminó en una sorprendente séptima posición con un tiempo de 1:24.259. Sólo fue superado por los tres grandes equipos de la parrilla actual: Mercedes, Ferrari y Red Bull. Sin embargo, la sesión no empezó bien para el piloto español debido a problemas con la caja de cambios y el embrague, que retrasaron su salida a pista durante varios minutos.
Sobre sus expectativas para el resto del gran premio, el piloto anunció que será un fin de semana difícil y la Q3 sería una sorpresa, no tenemos unas expectativas claras para mañana. “Son solo entrenamientos y ya veremos mañana, ya que solemos perder algunas posiciones pero ha sido un buen viernes probando bastantes cosas y ahora tendremos que poner las cartas sobre la mesa y escoger lo que queremos llevar mañana”, afirmó.
El asturiano señaló que se ha divertido en su regreso a la Pista Mágica y no ha dudado en mostrar su afecto a este trazado. “El circuito siempre es un reto porque es muy único con velocidades muy altas, con muy poca carga aerodinámica y donde todos los pilotos disfrutamos”, ha comentado el asturiano.
Además, también hizo balance sobre el viernes y su monoplaza: Aparte
de un pequeño problema mecánico en la primera sesión y un pequeño susto con el embrague en la segunda, ha sido un día bastante productivo y de cara a mañana, vamos un poco mejor de lo que esperábamos y mantenemos total tranquilidad”.
Por último, Alonso también se mostró un poco preocupado sobre la falta de fiabilidad de su Mclaren aunque posteriormente les restó importancia al no tratarse de problemas graves: “Siempre es peligroso no tener buena fiabilidad, y siempre hay que aprender de las cosas que pasan porque solo tenemos problemas de mala suerte, por lo que no es nada grave o algo que nos obligue a rediseñar el coche”. Alonso concluyó alegando que son solo pequeños infortunios y que deben aprender de todo ello para que no les pase cuando estén en posición de luchar por cosas importantes.