El templo de la velocidad, una de las catedrales del automovilismo... El circuito de Monza ha recibido diferentes sobrenombres con el paso de los años, pero todos guardan un elemento común: el circuito italiano es uno de los elementos sin el cual no se entendería una temporada de Fórmula 1. Presente desde la disputa del primer Mundial, allá por 1950, el trazado transalpino ha sido testigo de carreras espectaculares y hechos históricos, envueltos siempre por una afición inmejorable, que ruge a la par de los motores y que año tras año deja esa espectacular imagen de la pista en la ceremonia del podio.

Otro apelativo atribudo al Autodromo Nazionale di Monza es el de la 'casa de Ferrari'. Los tifosi italianos inundan las gradas de rojo esperanzados en ver una victoria de la escudería del 'cavallino rampante', algo que no se produce desde 2010, cuando Fernando Alonso llevó el delirio al circuito italiano logrando una de sus primeras victorias con el equipo de Maranello. Sin embargo, Ferrari ya no reina ni en casa ni en la Fórmula 1. El trono lo ocupa ahora la escudería Mercedes, que acumula tres temporadas en la primera posición de ambos campeonatos, aumento su dominio año tras año en la máxima categoría del automovilismo.

El alemán lideró la carrera desde la primera curva

Desde 2014, Lewis Hamilton y Nico Rosberg son los únicos contendientes al título mundial, con un balance claramente favorable al británico, que parece tener mayor voracidad que su compañero de equipo. El alemán está ofreciendo mejores sensaciones este año y, tras dominar la clasificación durante la primera parte de la temporada y ver cómo su máximo rival revertía la situación, se encuentra únicamente a siete puntos del tricampeón mundial, lo que augura máxima emoción hasta el final, una condición indispensable para que la Fórmula 1 vuelva paulatinamente a conseguir los índices de popularidad que registraba hace tan sólo diez años, cuando la igualdad se apoderaba de cada carrera del campeonato.

Nico Rosberg se sitúa a dos puntos de su compañero de equipo | Foto: zimbio.com
Nico Rosberg se sitúa a dos puntos de su compañero de equipo | Foto: zimbio.com

Y fue precisamente en Italia, un terreno dominado por Hamilton durante las dos últimas temporadas, donde Nico Rosberg salió victorioso y recortó la diferencia de su compañero de equipo. El alemán aprovechó una mala salida del británico, que 24 horas antes había conquistado la 'pole position', para imponer un excelente ritmo de carrera sin rivales que adelantar, mientras que el actual líder del campeonato cedía tiempo envuelto en varias batallas por escalar hacia el podio. Cuando logró deshacerse de los Ferrari y tener como único objetivo el Mercedes del piloto teutón, éste se encontraba ya por encima de los diez segundos, una distancia irrecuperable tanto por el ritmo de ambos como por la distancia a recorrer.

Nadie apostaba por Rosberg como el ganador en el Gran Premio de Italia 2016 y, sin embargo, el alemán logró un triunfo que además supone un duro golpe moral para su máximo rival en la lucha por el campeonato del mundo. Y es que un año antes, en el circuito de Monza, Lewis Hamilton dominó con autoridad durante todo el fin de semana. El piloto de Mercedes marcó el mejor tiempo en las tres sesiones de entrenamientos libres, en la clasificación y en la carrera, un triunfo contundente que, sumado al abandono de Nico Rosberg en la cuarta vuelta por un problema en el motor, aumentaba la ventaja del piloto británico al frente de la clasificación mundial.

Así, la lucha en Mercedes continúa en su punto más álgido, gracias en parte a la gran actuación de Rosberg, criticado en multitud de ocasiones por no ser agresivo sobre la pista y que demostró en el Gran Premio de Italia que tiene condiciones para ganar el Mundial, y quien sabe si no lo conseguirá en 2016. 

Tiempo para la diversión

Durante una carrera de Fórmula 1, la tensión es máxima en cada punto del circuito. Boxes, pit-lane, monoplazas... todas las personas que componen la máxima categoría del automovilismo mantienen la concentración al máximo durante los 120 minutos que suele durar, como máximo, un gran premio. Sin embargo, en algunas ocasiones aparece algún gesto o factor con el humor como ingrediente principal, hecho que merece ser destacado únicamente por su rareza.

El español logró la 22ª vuelta rápida de su carrera

En Italia se produjo uno de esos escasos momentos de humor que se viven durante una temporada en la Fórmula 1. Los protagonistas fueron Fernando Alonso y Mark Temple, ingeniero de pista del piloto español. En el tramo final de la carrera, el británico envió un mensaje de radio diciéndole al bicampeón del mundo que aumentase su ritmo para poder dar caza a Romain Grosjean. Alonso respondió así: ¡Jajajajaja!.

Fernando Alonso llegó a rodar en novena posición | Foto: zimbio.com
Fernando Alonso llegó a rodar en novena posición | Foto: zimbio.com

Tras el momento divertido de la carrera, el piloto asturiano también protagonizó las últimas vueltas por otro motivo. A falta de dos giros para el final, Fernando Alonso realizó un nuevo 'pit-stop' y colocó un juego nuevo de  neumáticos superblandos, logrando posteriormente la vuelta rápida de la carrera, un logro que no sucedía desde el Gran Premio de Abu Dhabi 2013. Una pequeña alegría que no sirve para enmascarar los problemas de McLaren-Honda, que apunta a Singapur como una de las carreras marcadas en rojo en el calendario esta temporada.