La vieja generación empieza a dar paso a la nueva, a la que ya se nombra generación de los videojuegos. El pasado gran premio fue el anuncio de dos cambios en las alineaciones de Williams y Mclaren de cara al año que viene. Massa se retira, y Button da un paso al lado y deja su puesto al joven Stoffel Vandoorne, piloto que ya ha debutado con la escudería de Woking. Fue en Bahréin este mismo año, sustituyendo a Fernando Alonso, quien no recibió el alta médica tras su aparatoso accidente en la primera carrera del año.
Lo de Button pero, es una situación diferente a la de Felipe Massa. Jenson no se retira de la F1, de hecho será el piloto probador de Mclaren la siguiente temporada, ha decidido tomarse un año sabático para después tener la opción de poder volver. Una decisión un poco peculiar, teniendo en cuenta que el rendimiento de su Mclaren-Honda empieza a ser competitivo justo ahora, y con esperanzas de situarse más arriba en 2017.
Quizás en busca de nuevo retos, de nuevas motivaciones como el campeonato mundial de resistencia, Jenson deja de ser piloto oficial de la escudería británica después de siete temporadas.
Cargo mixto en Woking
La nostalgia de esos tiempos en los que Mclaren-Honda dominaba el mundial de F1, esos tiempos que quieren volver a ser una realidad en la actualidad, en el futuro. Quizás sea ese uno de los motivos por los cuáles se retira, pero no lo hace por completo. Button lo deja, por el momento. De hecho no tan sólo será el piloto probador de la escudería y el encargado de desarrollar el coche de la mejor manera posible, será el embajador de Mclaren.
Un movimiento que Mclaren ha definido como “una estrategia innovadora de tres pilotos”, y con mucho sentido. Vandoorne pedía paso a gritos. Calidad, juventud, y resultados. Lo demostró en Bahrain, donde cosechó el primer punto de la temporada para los británicos. Hará tándem con el que es uno de los mejores, o el mejor piloto que actualmente conforma la parrilla de F1, Fernando Alonso, experiencia y magia en las manos. Una mezcla explosiva que puede llevar de nuevo a lo más alto a Mclaren-Honda.
No solo eso, el papel de Button puede ser fundamental en el apartado de desarrollo del coche. ¿Quién mejor que él? Conoce a la perfección la casa, siete años pilotando en la escudería lo contrastan, y además, lleva pilotando el Mclaren-Honda desde hace dos años, conociendo así los defectos y las virtudes tanto del chasis como del punto débil más claro, el motor. Button puede tener la llave del éxito y si la encuentra, no hay duda que en 2018 será él quien de nuevo lleve las riendas del coche de Woking.
Button coge el rol de piloto probador y embajador
Que no extrañe a nadie si el rendimiento del coche el año que viene es bueno, Button cambie el simulador por la realidad de nuevo. De hecho él ya lo avisó: “Trabajaré duro para el desarrollo del coche y estoy seguro de que tomaré el volante en algún momento”, aseguró Jenson.
Mclaren, su casa desde 2010
Llegó a Woking después de ganar el Mundial de F1 del año 2009 con Brawn, con un coche muy superior al resto. En una decisión que fue muy criticada pero que despues resultó acertada, Button se fue de Brawn, que en 2010 se convirtió en Mercedes, para dar el salto a Mclaren. Su compañero fue nada más y nada menos que Lewis Hamilton. La escudería británica conseguía así, una dupla británica también de pilotos, hecho que podía facilitar en gran medida la faena.
Button llegó a Mclaren como campeón del mundo
En su primera temporada cosechó dos victorias, siete podios y quedó quinto en el Mundial de pilotos, cosechando 214 puntos. Pero su mejor temporada fue la del año 2011 donde se proclamó subcampeón del mundo. Consiguió una victoria más que en 2010, tres, pero realizó casi el doble de podio, trece. Lo más importante de todo, quedó por delante de su compañero de equipo, acallando las críticas que decían que no podría batir nunca a un piloto como Lewis Hamilton.
Volvió a ser quinto en 2012, ganando de nuevo tres carreras pero a partir de 2013, el rendimiento de Mclaren empezó a caer. Vivió el cambió de motor a Honda, la llegada de Alonso como compañero, dupla con la cual Mclaren quería volver a la cima en un plazo de tres años. Van por el buen camino tras un año 2015 desastroso.
No hay que olvidar que Button ya trabajó con Honda en el pasado. Desde 2003 hasta el año 2008 estuvo primero en la escudería BAR-Honda que después pasó a ser Honda y que en estas dos etapas su coche llevaba propulsor de la marca japonesa. Esto no deja de ser conocimientos que podrá aplicar a su nuevo rol, a su nueva vida en la F1, donde en total ha conseguido 15 victorias y 50 podios, además de tener el honor de ser llamado como campeón del mundo, cosa de la que pocos pilotos pueden presumir.
Button-Vandoorne-Alonso. Tres pilotos de primera categoría que pueden hacer una tripleta temible si el coche les acompaña. Para ello, el embajador y desarrollador del coche, Jenson Button, deberá trabajar duro, aportando toda la información recopilada en estos últimos dos años para dar, al fin, el salto de calidad que el motor necesita y volver a ganar carreras. Mclaren te sigue necesitando, Jenson.