Ferrari ha terminado el ciclo de circuitos aerodinámicos y de chasis, como era la sucesión de Singapur, Sepang, Suzuka y Austin con unas actuaciones no muy buenas. Con falta de velocidad y con un monoplaza que no terminaba de entrar bien en curva, han ido viendo cómo el equipo Red Bull se alejaba de ellos hasta el punto de estar situados a más de 50 puntos en el Campeonato de Constructores. Esta diferencia de puntos hace muy complicado el objetivo de los de Maranello de terminar en la segunda posición final.

Pero a su favor jugará el hecho de que ahora los circuitos serán mucho más basados en el motor y en sistema de propulsión, un área en la que Ferrari está por delante de Red Bull, por lo que aún no ha terminado la pelea por el subcampeonato. Con este escenario, los esfuerzos de desarrollo en el equipo italiano ya están centrados en el monoplaza de la próxima temporada.

Sebastian Vetten en Austin | Imagen: Scuderia Ferrari
Sebastian Vetten en Austin | Imagen: Scuderia Ferrari

Como indica Maurizio Arrivabene, director de la Scuderia Ferrari, no hay mucho más por hacer en 2016 y el objetivo básico es tener una buena base para 2017. "Sabíamos que Austin no sería favorable para nosotros, pero tienes que ver la situación completa, si quieres solucionar un problema este año estás perdiendo tiempo del coche del próximo. Por ello es por lo que hemos estado concentrados en los circuitos de alto rendimiento como Suzuka, y en este caso coges partes que te dan datos para el próximo año, a estas alturas del campeonato cualquier otra cosa no tiene sentido", explicó el italiano.

El director de la escudería italiana añadió que la última parada de Sebastian Vettel en las últimas vueltas del Gran Premio de Estados Unidos se debía a un trozo de goma que había pegada en el alerón trasero del SF16-H del alemán. Esto hacía que perdiera ritmo y estabilidad en el coche.