Sergio Pérez juega en casa este fin de semana. El mexicano, que viene de protagonizar la mayor remontada del Gran Premio de Estados Unidos vuelve al Autódromo Hermanos Rodríguez como piloto de Fórmula 1 para competir por segunda vez en su tierra natal.
El de Force India vuelve a Ciudad de México habiendo quedado octavo en Austin y con dos podios en la presente temporada, palmarés que espera seguir ampliando este fin de semana: "Espero poder dar una buena carrera, una buena actuación. Siempre se dice que correr en casa es un extra", admite el mexicano que llegó el martes a su tierra donde asegura no ha parado ni un momento y donde le esperan unos días lleno de eventos.


Pérez ha sido preguntado por la salida de su compañero Niko Hükenberg del equipo a final de temporada pero no muestra para nada su intención de seguir los pasos del finandés. Asegura que "los mejores equipos próximos no tienen ninguna vacante" y sus movimientos posibles eran "hacia los lados o hacia atrás", por lo que prefiere quedarse donde está valorando la "estabilidad": "Mi mejor futuro es el permanecer donde estoy, conocer a la gente con la que estoy trabajando".

Pérez ha destacado que Force India ha hecho tanto por su carrera que quiere ser "fiel a ellos". El mexicano asegura que tener a alguien en el nivel de Nico va a ser "difícil" por lo que quiere un piloto que llegue "con la actitud correcta para ayudar al equipo, que le de una buena retroalimentación y entienda lo que está pasando con el coche". "Una gran parte del éxito que ha tenido el equipo ha sido porque Nico y yo hemos estado empujando uno al otro muy duro", añade el piloto de Force India.


Respecto a las declaraciones de Bernie Ecclestone sobre construir muros de 40cm en las curvas de los circuitos Checo opina que "hay muchas más áreas donde se puede mejorar el deporte antes de comenzar a poner en riesgo la seguridad", pero apuesta por "hacer que los circuitos sean un poco más difíciles para los pilotos obligando a los conductores a no cometer ningún error".

Checo, que llega a la recta final del campeonato séptimo en la clasificación, ha dicho que no teme nada aunque el circuito de México "tiene una de las rectas más largas del calendario, no es uno de los más difíciles". Aun así reconoce que será "bastante exigente la carrera allí". La renovada pista del Autódromo que se estrenó en 2015 después de que no hubiera acogido la Fórmula 1 desde 1992 "permitirá ver diferentes estrategias", según Sergio, ahora que cuentan con un compuesto más suave que "podría ayudar a la degradación", en referencia al neumático supersoft": "Creo que el año pasado mucha gente fue a una parada y ahora, probablemente, que no va a ser tan fácil ir a una parada".


Sergio Pérez regresa a la carrera por la que ha estado "esperando toda la temporada" con ganas ya que opina que "la Fórmula Uno es cada vez más grande, está creciendo" lo cual le "llena de orgullo" y está ya en Ciudad de México con ganas de dar a su pueblo "mucha alegría el domingo".