El Gran Premio de Brasil se vio eclipsado por las escasas formas de afrontar la carrera desde la dirección ya que, a pesar de que la pista estaba en mejores condiciones que en año 2008 o en Nurburgring el año 2007, decidieron que la salida se realizara detrás del coche de seguridad. Tras ello, los accidentes de Marcus Ericsson y Felipe Massa en la subida del tercer sector y el de Kimi Räikkönen en plena recta de meta frente al muro de ingenieros, todos ellos debido al aquaplanning, crean el interrogante de si este tipo de neumáticos de lluvia extrema son los adecuados para afrontar las condiciones producidas en el trazado carioca, ya que sólo era capaz de evacuar 65 litros de agua por segundo.
Además, estas dudas también se generan de cara al año que viene. Aunque ya se han realizado pruebas en los circuitos de Paul Ricard o Abu Dhabi en situaciones de mojado, como lo hizo Pierre Gasly hace unos días donde se disputará la cita de clausura dentro de unos días.
Max Verstappen ha declarado que esperan poder “mejorar las gomas el próximo año”, ya que lo de esta temporada es una combinación de tener “más caballos de potencia y menos carga aerodinámica”, pero cree que en 2017 los monoplazas serán más fáciles de pilotar en condiciones como las de Interlagos porque habrá “más carga aerodinámica”.
El holandés también fue de lo más destacado del Gran Premio ya que fue el que ofreció más espectáculo durante toda la carrera; incluso, en las últimas 15 giros fue capaz de adelantar a 13 pilotos para terminar en el podio junto con Lewis Hamilton y Max Verstappen.
"Construyó el puente imposible entre el pasado y el presente"
Gerhard Berger ha alabado el talento que tiene el de Red Bull y que le ha recordado a pilotos de décadas anteriores: “El verdadero héroe del día fue Verstappen, que pasó un domingo como los que solía tener Senna. A la edad de 19 años, construyó el puente imposible entre el pasado y el presente con su valentía y arrogancia, puso a todos sus rivales bajo presión”.
El antiguo piloto de Mclaren y Ferrari, entre otros, le viene a la memoria la figura de Ayrton Senna. Admite que es la primera ocasión en la que comenta “algo así” ya que piensa que tiene un parecido en “su personalidad, pilotaje, resultados y preparación”, incluso evita hacer comparaciones pero es que “con Max es difícil no hacerlo”.
"Los ingenieros de otros equipos les decían a sus pilotos que le imitara"
Para terminar, el austríaco ha comentado para Corriere della Sera que la actuación de Max Verstappen fue magnífica debido a sus constantes cambios de trayectoria en la mojada pista de Interlagos a pesar de su temprana edad: “Siempre intentaba nuevas trazadas, incluso detrás del coche de seguridad estudiaba el circuito. Los ingenieros de otros equipos les decían a sus pilotos que le imitara. Sabía exactamente qué hacer y es impresionante a esa edad. Buscó y encontró líneas imposibles, hacía a los otros parecer niños de escuela. Su control del coche, como vimos en el incidente en la recta, fue una locura”.