Llega el final de año en el circuito de Abu Dhabi. La noche y los fuegos artificiales darán la traca final a un año espléndido para Max Verstappen con una victoria y siete podios avalan dicho rendimiento, además de romper los récord de precocidad en subir a lo más alto del podio y de quedar entre los tres primeros. Sólo le queda batir el de la pole que, visto lo visto, no tiene pinta de que sea muy tarde para poder sumarse otra insignia.
"Un pequeño error durante una de las secuencias de giros puede arruinar una vuelta"
El holandés ha realizado un breve análisis del trazado árabe, principalmente la última zona, que es vital en cuanto a las gomas: “El diseño de la pista de Abu Dhabi es bastante diferente, hay muchas curvas de baja velocidad y combinaciones. La superficie única significa que es un reto, un pequeño error durante una de las secuencias de giros puede arruinar una vuelta. También es importante tener un coche sólido en el último sector para mantener los neumáticos vivos”.
El piloto de Red Bull cree que Yas Marina tiene algunas características que “las destacan de otras carreras”, el hecho de que el hotel esté encima del circuito declara que “es bastante especial”. Además destaca a ver pasado un tiempo en la ciudad que “siempre es divertido”.
"Hay mucho trabajo que hacer para el próximo año"
Para terminar, Max Verstappen añade que pueden quedarse satisfechos con el año que ha realizado Red Bull que se ha consolidado como segunda fuerza en la parrilla tras superar a Ferrari en el Gran Premio de Alemania. Una vez finalizado el fin de semana, toca comenzar a centrarse en 2017: “Por supuesto que es la última carrera de la temporada, creo que podemos mirar atrás y estar contentos con 2016. Hay mucho trabajo que hacer para el próximo año, con los cambios en la normativa y creo que a todo el mundo le emociona ver los coches nuevos, tengo ganas de empezar”.