La gran expectación que levantó el primer Gran Premio del año y la primera victoria cosechada por Nico Rosberg en su camino hacia el título mundial fue ensombrecida por el escalofriante accidente que sufrió Fernando Alonso y del que salió con varias lesiones y magulladuras en su cuerpo. Un neumotórax asociado a una fractura de costilla que impidieron al asturiano competir en la siguiente carrera celebrada en Bahrein. Una carrera en la que Carlos Sainz igualó el registro de su debut en Fórmula 1 y en la que pudieron terminar más coches que el año pasado, además de verse sorpresas un tanto inesperadas.

El primer fin de semana de Fórmula 1 del año estuvo marcado también por el debut de una nueva escudería, Haas, que de la mano de Romain Grosjean obtuvo sus primeros puntos en su debut en la competición, nada más y nada menos que un sexto puesto, el segundo mejor registro de una nueva escudería después de Brawn en 2009. La sesión de clasificación no deparó demasiadas sorpresas con respecto al año anterior. En el primer corte clasificatorio, los dos pilotos de la escudería debutante Romain Grosjean y Esteban Gutiérrez, los pilotos de Manor Rio Haryanto y Esteban Ocon, los pilotos de Sauber Marcus Ericsson y Felipe Nasr junto con Kvyat se quedaban fuera de la lucha por entrar a la Q2.

Si la primera sorpresa de la jornada del sábado la deparaba Daniil Kvyat con su Red Bull quedándose fuera del primer corte, en el segundo hacía lo propio Valtteri Bottas. El finlandés, junto con los dos pilotos de Renault, Palmer y Magnussen, se quedaban a las puertas de la Q3, al igual que ocurrió con Fernando Alonso y Jenson Button. McLaren, que prometía mejorar los ridículos resultados del regreso de Honda a la competición con promesas ilusas, volvía a caer al hoyo en el segundo corte. Lejos quedaron los problemas mecánicos que acusaron a comienzos de 2015, pero el rendimiento sobre la pista estaba muy lejos de lo que se exige a la escudería de la flecha plateada.

En cuanto a la lucha por la pole position, no hubo discusión alguna. Mercedes volvía a monopolizar los dos primeros puestos, seguidos de los dos pilotos de Ferrari. Lewis Hamilton fue el primer poleman del año, seguido de Nico Rosberg y Sebastian Vettel. Soprendente fue el rendimiento mostrado por Max Verstappen y Carlos Sainz con Toro Rosso, con un quinto y un séptimo lugar respectivamente, clasificando por delante de su rival más directo, Force India, y por delante inclusive del Red Bull de Daniel Ricciardo.

Foto de la parrilla de pilotos de la temporada 2016. Fuente: Zimbio
Foto de la parrilla de pilotos de la temporada 2016. Fuente: Zimbio

La jornada del domingo comenzó con la protocolaria foto de los pilotos de todas las escuderías en la parrilla de salida y con dos vueltas de formación previas a la carrera ante los problemas de embrague del monoplaza de Kvyat. La carrera no pudo comenzar peor para Mercedes, fallando de nuevo en su punto débil y perdiendo las dos primeras posiciones en detrimento de Sebastian Vettel y Kimi Räikkönen, desbocados desde el inicio ante los problemas de Rosberg y Hamilton por aguantar el tipo, traccionar de la mejor manera desde el comienzo y sacar ventaja al resto de pilotos, a lo que nos tenían acostumbrados normalmente. Por la zona media, Carlos Sainz aguantaba el tipo con Daniel Ricciardo mientras que por las últimas posiciones Magnussen se veía obligado a parar en boxes por un pinchazo en su rueda trasera.

La salida lastró gran parte de los problemas de Hamilton. Durante las primeras vueltas, relegado a la sexta posición, se mostró impotente para adelantar a Verstappen en pista. Nico Rosberg, con los mismos tiempos, realizó un undercut sobre Kimi Raikkonen que le permitió ganar una posición, mientras que por detrás, hizo lo propio Carlos Sainz colocando neumáticos medios al igual que los pilotos de delante. Se quitó de encima a Massa y adelantó posiciones hasta colocarse en novena posición, que aguantaría hasta el final.

Vettel defiende la posición ante Rosberg y Hamilton. Fuente: Zimbio
Vettel defiende la posición ante Rosberg y Hamilton. Fuente: Zimbio

Por otra parte, La decisión de sacrificar en el primer stint a Räikkönen fue acerdada ya que Vettel salió por delante del alemán de Mercedes, rondando en un ritmo óptimo y con mejores tiempos que los de su paisano. Sin embargo, todos los planes de Ferrari se fueron al traste en la vuelta 18. Fernando Alonso, en plena lucha con Esteban Gutiérrez, chocó violentamente con el Haas del mexicano y a la postre con el muro previo a la curva tres del circuito de Albert Park, lo que provocó que el asturiano diese una doble vuelta de campana que dejó el McLaren-Honda hecho pedazos.

A pesar del aparatoso y dantesco accidente, Alonso salió del monoplaza con una leve cojera aunque en buen estado para fortuna de todos, dirigido posteriormente al hospital del circuito para pasar el chequeo habitual.  Dirección de carrera decidió sacar bandera roja debido al grave accidente producido. Cambió todo el panorama de la carrera y los pilotos salieron desde el pit lane acompañados del coche de seguridad.

Foto del monoplaza de Fernando Alonso hecho añicos. Fuente: Zimbio
Foto del monoplaza de Fernando Alonso hecho añicos. Fuente: Zimbio

Relanzada la carrera después de más de media hora parada la sesion, Kimi Räikkönen se vio obligado a abandonar por un problema eléctrico del motor de su monoplaza. Desde el abandono del finés, poca actividad se registró en pista durante el ecuador de la sesión. Nico Rosberg se mostraba incapaz en un primer momento de engancharse al ritmo de Sebastian Vettel con unos neumáticos con mejores prestaciones. Max Verstappen y Carlos Sainz ocupaban sorprendentemente la cuarta y quinta plaza hasta que no pudieron contener a Lewis Hamilton, mientras que el debutante Haas de la mano de Romain Grosjean buscaba hacerse un hueco en la zona de puntos, luchando codo con codo con Hulkenberg y Bottas.

La diferencia de ritmo de Nico Rosberg con neumático medio con respecto al superblando usado por Sebastian Vettel permitió al piloto germano de Mercedes recuperar terreno con el tetracampeón hasta el punto de adelantarlo a falta de 20 vueltas para el final. Una carrera arruinada para Seb por dos motivos: uno, el safety car de la vuelta 18; y dos, un pésimo segundo stint en el que sus ingenieros no actuaron con la rapidez suficiente para dar caza a Rosberg.

Decididas las primeras posiciones, la batalla más interesante se vislumbraba en las últimas posiciones de la zona de puntos. Sainz y Verstappen, que copaban los dos últimos puestos del top ten, luchaban por deshacerse de Bottas y alcanzar la octava posición sin éxito. La falta de velocidad punta y el tapón ejercido por el finlandés de Williams imposibilitaron que los dos pilotos de Toro Rosso sumasen más puntos en el comienzo de la temporada.

Mercedes celebrando su primer 'doblete' del año. Fuente: Zimbio
Mercedes celebrando su primer 'doblete' del año. Fuente: Zimbio

Nico Rosberg se llevó finalmente el gato al agua en una carrera extraña marcada por el espectacular y escalofriante accidente de Alonso. Lewis Hamilton, que fue a remolque durante toda la sesión ante su irrisoria salida, finalizó en segunda posición, mientras que Sebastian Vettel completaba el podio en el tercer puesto – quien sabe si no hubiese sido por ese fallo de sus ingenieros en el pit stop hubiera finalizado segundo – en una carrera que podría haberse llevado. Grosjean sumó los primeros puntos de Haas en su debut, mientras que Carlos Sainz igualó el registro de su debut en 2015 con un noveno puesto.