Todo piloto cuando está en categorías inferiores o en karts, se marca como reto llegar a la Fórmula Uno. Después, hace todo lo posible para lograr su primera pole o victoria y finalmente, conquistar la corona para entrar en la prestigiosa lista de campeones, como lo hizo Nico Rosberg en el pasado 2016 en Abu Dhabi. Ese es el objetivo de Carlos Sainz tras dos temporadas en la categoría reina del automovilismo, donde su mejor posición ha sido quedar en tres ocasiones sexto en los Grandes Premios de España, Estados Unidos y Brasil.

"Si hago una temporada buena, me puedo llegar a ver en un equipo grande"

El español ha declarado para Onda Cero que su finalidad al término de este mundial es acabar en un equipo que le permita luchar por un campeonato: "Me veo en un equipo grande. Creo que si hago una temporada buena, me puedo llegar a ver en un equipo grande. Pero ahora es una época del año en la que es muy difícil de decir. Sé que lo voy a dar todo, voy a dejarme la piel. Mi objetivo es ser campeón del mundo algún día y eso pasa por hacer un buen 2017 para ponerme en la posición de estar disponible".

El de Toro Rosso está más que convencido de que va a lograrlo y que va “a darlo todo”, porque de hacerlo a conseguirlo “hay un paso”, pero es consciente de que todo depende de “una máquina y una serie de circunstancias”. Además, añade que si el monoplaza “no es el primero o segundo más rápido” es imposible alcanzarlo, ya que en el hipotético caso de estar a igualdad de condiciones “habría una diferencia máxima de medio segundo” entre el primero y el último.

Carlos Sainz durante el GP de Japón | Fuente: Getty Images
Carlos Sainz durante el GP de Japón | Fuente: Getty Images

Carlos Sainz ha destacado que la consistencia durante todo el año es lo que marca la disparidad entre un piloto y otro, pero durante la carrera, no durante la jornada de los sábados: "A una vuelta sí, luego ya entra el factor carrera, la salida, el trato de neumáticos... Ahí es donde a lo largo de un campeonato de veinte carreras ya se va destacando el mejor, ya se van abriendo las diferencias. Pero a una vuelta, quizá dos o tres décimas. No creo que haya más que eso".

Recordatorio de que los pilotos son deportistas

La Fórmula Uno siempre ha requerido una gran preparación física, pero pilotos como Fernando Alonso ya han comentado en más de una ocasión que en años pasados el entrenamiento era mayor debido a las exigencias de los monoplazas, algo que con el paso de los años y principalmente con la entrada de los nuevos motores y la facilidad a priori de manejar los coches, han ido decreciendo.

"En Mónaco pisas el freno cada cinco segundos, y cada vez que lo aprietas son 150 kilos de presión"

El de Toro Rosso incide en que no es fácil conducir un Fórmula Uno, haciendo un breve análisis de la fuerza de presión que se debe realizar, por ejemplo, en el circuito de Montecarlo: "Al final la gente se olvida de que un piloto de Fórmula 1 es un deportista de élite y es un atleta. Una persona cualquiera no puede llevar un F1, no por talento sino por las fuerzas que se pueden generar en el paso por curva. En un circuito como Mónaco pisas el freno cada cinco segundos, y cada vez que lo aprietas son 150 kilos de presión. Multiplícalo por 15 para una vuelta, y multiplica eso por 70 y tienes una hora y media de ir todas las vueltas a 150 kilos de presión en el freno".

Carlos Sainz durante el GP de Japón | Fuente: Getty Images
Carlos Sainz durante el GP de España | Fuente: Getty Images

Si a eso se le suma “la tensión y la adrenalina” termina provocando un ascenso en las pulsaciones más las famosas fuerzas G. Además añade que un piloto quema las mismas calorías que un maratoniano en una carrera, lo cual habría que multiplicarlo por veinte agregando también los horarios y los distintos climas. Con lo cual, todo ese desgaste el cuerpo “lo va notando y va habiendo un desgaste durante todo el año”, lo que hace que la preparación durante este periodo sea vital para evitar tanto cansancio durante el mundial.