Una nueva temporada de Fórmula Uno está a punto de comenzar y los equipos ya han hecho todo su trabajo, con el objetivo de que tanto esfuerzo se vea reflejado este próximo fin de semana en Australia. De entre todos los equipos, hay uno que ha destacado sobre el resto negativamente, como es McLaren Honda. Los de Woking han acusado durante toda la pretemporada los múltiples fallos que les ha causado el motor de su monoplaza. Los nipones no han hecho el trabajo que se les pedía, por lo que todo apunta a que en este comienzo de temporada sufrirán más que cualquier otro equipo.

Sobre ello ha hablado el jefe del equipo, Eric Boullier, quien ha confesado a la página Autosport que en la escudería británica no están nada satisfechos con el rendimiento de la nueva unidad de potencia. El francés le ha achacado a Honda falta productividad y coordinación a la hora de trabajar: "Sólo necesitan una cosa, que es entender e integrar la cultura de carreras de la F1. Lo que quiero decir con esto es que la manera en la que nos comportamos en las carreras y que la Formula Uno se mueve mediante un calendario, con objetivos y fechas fijas y mejoras de tiempo. Siempre intentamos buscar la mejor solución tan pronto como sea posible. Cuando un fabricante está con un proyecto, puedes tener algunas semanas de retraso y no cambia el producto, ni cambia el modelo de negocio", explicaba.

Además, también ha querido aclarar que la filosofía no es la misma para Honda, ya que  en McLaren valoran más el tiempo al trabajo: "En las carreras, si no traes tu actualización para la primera carrera, no estarás en ningún lado. Esa es la mentalidad de las carreras. Se trata de ir a los fabricantes y asegurarse de que hacen algo en un mes, de que la próxima vez lo hagan en tres semanas y de tres semanas, pasen a hacerlo en dos. Valoramos más el tiempo ganado que el dinero invertido. Es un enfoque diferente al del resto del mundo", comentaba.

Por último, el francés también ha querido explicar que el tener la fábrica en Japón ralentiza el trabajo, y esa es la razón de peso que explicaría la falta de competitividad de la marca japonesa: "Por eso la sede de Mercedes está en Inglaterra, supongo que se benefician de la cadena de suministro, de gente con experiencia en F1. Nuestros proveedores, quizás nos cuestan el doble que a Honda, pero son tres, cuatro o cinco veces más rápidos. De algún modo, te puedes dar cuenta de que la influencia corporativa no ayuda a ser eficiente. Si te comportas como una compañía corporativa, con procesos heredados de una compañía corporativa, serás más lento y menos ágil, lo que no se adapta a la cultura de las carreras", finalizó.