La espera ya se ha acabado. Tras más de tres meses sin competición, la Fórmula 1 vuelve a encender los motores para empezar la sexagésimo séptima temporada de su historia. Como ya es tradición, la categoría reina del automovilismo celebra su primer gran premio del año en la ciudad australiana de Melbourne.
El circuito semiurbano de Albert Park ya está listo para acoger la primera carrera de esta nueva etapa en la Fórmula 1. La categoría estrella del mundo del automovilismo ha sufrido uno de sus cambios más importantes en los últimos años y todos los equipos empiezan a ciegas. El 26 de marzo se apagarán las luces del semáforo y empezará una temporada repleta de incertidumbre, emoción y seguro que muchas sorpresas.
La pretemporada de las sorpresas
Sin embargo, este fin de semana no va a ser el primero que los coches pisen el asfalto. Del 27 al 2 de marzo y del 7 al 10 los equipos tuvieron la oportunidad de probar sus coches en el Circuit de Barcelona-Catalunya. Con un cambio de normativa tan drástico como el que se ha experimentado este año, era normal que durante la pretemporada surgieran sorpresas.
El primer día de pruebas en el trazado de Montmeló, los coches de 2017 ya batieron los récords establecidos en el Gran Premio de España de 2016. Este dato daba muchas esperanzas y aseguraba que la promesa de que los coches serían entre 3-5 segundos más rápidos se cumpliría.
Ferrari acabó los test como el equipo más rápido, justo detrás de los vigentes campeones, Mercedes. Williams sacó pecho durante la segunda semana de test y demostraron que, aunque a priori su coche no parecía tan innovador, es rápido y fiable. Red Bull pasó las pruebas jugando al escondite, mientras que en McLaren seguramente hubieran preferido ser invisibles.
Melbourne nunca aburre
A excepción de 2010, Melbourne ha acogido la primera carrera de la temporada durante los últimos años. Seguramente es uno de los grandes premios que los espectadores esperan con más emoción, ya que, tras un invierno sin carreras, la espera se puede hacer muy larga. La carrera inaugural de la temporada nunca suele defraudar.
El año pasado Albert Park brindó una carrera repleta de acción, incertidumbre y miedo. Los pilotos de Ferrari protagonizaron una excelente salida que pilló a los de las flechas plateadas desprevenidos. Desde el box Maurizio Arribavene gritaba emocionado, mientras que Lewis Hamilton maldecía por radio al no poder adelantar a Max Vertappen.
El corazón de todos los aficionados al deporte se paró al ver a Fernando Alonso dar 3 vueltas de campana con su McLaren destrozado. Afortunadamente, el español salió por su propio pie del monoplaza, demostrando, una vez más, lo que se ha avanzado en materia de seguridad en el deporte. La victoria se la llevó Nico Rosberg, que entonces no se podía ni imaginar lo que sucedería en Abu Dabi meses después.
El circuito de Albert Park
En Australia ya se han disputado 33 grandes premios de Fórmula 1, pero no fue hasta 1996 cuando el circuito de Albert Park acogió la primera carrera del Gran Circo. El circuito de Melbourne es semiurbano y está situado dentro de un parque natural.
El domingo los pilotos darán 58 vueltas al trazado de 5.303 metros. Los 20 pilotos que correrán este año las 16 curvas del circuito de Melbourne con unos coches mucho más rápidos y anchos. Los pilotos van a fondo durante el 64% de la vuelta, en un circuito de exigencia alta para los frenos con 8 zonas de frenada. Los coches pueden llegar a los 318 kilómetros hora y tiene dos zonas de DRS situadas en la recta principal y entre la curva 2 y 3.
El récord de vuelta más rápida en carrera lo consiguió Michael Schumacher en 2004 con Ferrari, cuando marcó un 1:24.125. Schumacher también es el piloto con más victorias en este trazado. Es otro alemán el que ostenta el récord de vuelta más rápida en clasificación. Sebastian Vettel marcó un 1:23.529 con Red Bull en 2011. Es muy probable que este año se batan estos dos récords y se baje del 1:20. El año pasado Lewis Hamilton se llevó la pole con un 1:23.837, pero fue su compañero, Nico Rosberg, quien consiguió la victoria.
Neumáticos
Este año la cosa va de novedades y también las hay en el campo de los neumáticos, que son uno de los elementos que más ha cambiado. Los nuevos compuestos de Pirelli son mucho más duros que los de temporadas pasadas, lo que provoca que tarden más en degradarse.
Para este año, Pirelli ha cambiado los compuestos del Gran Premio de Australia, escogiendo la opción más blanda del fabricante australiano. El ultrablando, el sueperblando y el blando serán los protagonistas del fin de semana. Durante las primeras carreras de esta temporada, todos los pilotos tendrán el mismo número de neumáticos. El superblando y el blando son obligatorios para la carrera y el ultrablando para la Q3.
Meteorología
Melbourne es conocida por sus bruscos cambios de tiempo y a principio de semana recibió a los equipos y periodistas bajo la lluvia. Para el fin de semana las nubes han preferido esconderse para no aguar el espectáculo.
El viernes se espera un día soleado con 26 grados y un 60% de humedad. El fin de semana seguirá la misma tónica que el primer día de entrenamientos libres. Para el sábado hay un 30% de probabilidades de lluvia, pero aun así se espera una temperatura máxima de 27 grados. El domingo será el día de más calor, con 28 grados y un día soleado.
Horarios
Entrenamientos libres 1: madrugada del viernes a las 2h.
Entrenamientos libres 2: madrugada del viernes a las 6h.
Entrenamientos libres 3: madrugada del sábado a las 4h.
Clasificación: sábado a las 7h.
Carrera: domingo 7h.
Durante la madrugada del sábado al domingo se cambia la hora y a las 2h serán las 3h. Recuerden cambiar sus relojes si no quieren perderse la primera salida de la temporada de Fórmula 1 2017.