Felipe Massa afrontó la temporada de 2016 como su última temporada en la categoría reina del automovilismo. El Gran Premio de Brasil fue especialmente emotivo para el brasileño. Aficionados y equipos ovacionaron a Massa en su camino al box, en una de las escenas más emotivas que se recuerdan en la historia de la Fórmula 1 más reciente.
Sin embargo, el brasileño no estuvo mucho tiempo en el retiro. Felipe Massa aceptó la oferta de Claire Williams para volver al equipo después del fichaje de Valtteri Bottas por Mercedes. Williams no se podía permitir tener dos rookies en su alineación en un año tan crucial como será este, con la introducción de la nueva reglamentación.
Massa ha reconocido que estaba preocupado por el coche que se iba a encontrar esta temporada: “Tras 2016 y cómo fue este para Williams, tenía una gran preocupación sobre cómo estaríamos en 2017, especialmente con los grandes cambios en la normativa. No estaba seguro al 100%, especialmente porque decidí en septiembre que dejaría de correr y no estaba muy interesado en cómo sería el coche este año”, ha comentado el brasileño al medio brasileño Globo.
Los test dejaron un muy buen sabor de boca al brasileño. Las preocupaciones de Massa no llegaron a más y Williams demostró en Barcelona tener un coche rápido y fiable. Incluso el primer día de la segunda semana de test el brasileño fue el piloto más rápido del día.
Massa sabe que Williams no está a la altura de Mercedes, Ferrari y Red Bull, pero cree que pueden llegar a pelear por podios esta temporada e incluso apunta a un tercer lugar en el campeonato de constructores: “Barcelona me ayudó a tener una idea de que tendría un coche competitivo. No somos el mejor equipo, pero podemos luchar por ser el tercer mejor equipo en el Campeonato y pelear por podios”, ha concluido Massa.