En las declaraciones que ha hecho Fernando Alonso para el periódico alemán Auto Bild, no deja claro que 2018 sea el año en el que correrá Las 24 Horas de Le Mans. La opción está ahí, la prueba no coincide con ningún Gran Premio de Fórmula 1, algo que McLaren puso como condición para renovar, y tras este test todo hace pensar que sea el año próximo: “Un coche así no sólo es rápido, también muy consistente. En algún momento quiero competir. Quería probar un coche como este desde hace mucho tiempo, lo he hecho y estoy contento. Tenemos tiempo suficiente para pensar en el futuro”, dijo Alonso. El coche está cerca de los tiempos de un F1 en el circuito de Baréin.

Casualidad o no, Toyota confirmaba durante la entrega de premios del WEC, que también tuvo lugar durante el domingo, que iba a estar presente en la categoría hasta 2019. Una buena noticia para la competición, por la salía de Audi y Porsche. El jefe de equipo Pascal Vasselon habló sobre la actuación de Alonso a los mandos del LMP1: “Después de cuatro vueltas ya estaba bastante bien. Ha sido una adaptación rápida. No se ha quejado, no ha causado ningún problema ni ha criticado nada. Fernando ha hecho pruebas de neumáticos para completar el trabajo que Mike estaba haciendo en el otro coche. Ha sido un buen día. Creo que Fernando ha hecho más de 100 vueltas, que son más que las de un fin de semana de Fórmula 1".

Sí, fueron más de 100 vueltas, más de 600 kilómetros en un circuito que conoce, ya que la F1 pasa por allí todos los años. La sesión se dividió en dos partes; Alonso dio 37 vueltas por la mañana, con un mejor tiempo de 1:43.709. Mientras que por la tarde dio 76 vueltas repartidas en nueve tandas, la más larga de ocho giros cronometrados, la mejor vuelta 1:43.013: “No hemos hecho simulaciones de clasificación, sino que hemos trabajado tanto como hemos podido. No nos hemos encontrado ningún problema ni hemos estado encerrados en boxes mucho tiempo, así que hemos corrido tanto como hemos podido”, finalizaba Vasselon.