Ferrari ya ha presentado el SF71H, el monoplaza con el que aspiran a ganar el mundial de pilotos y constructores en 2018. Este año se cumplirán 11 años desde que los de Maranello consiguieron su último título de pilotos, con Kimi Räikkönen, y aunque no siempre les ha sido fácil, cada año trabajan con dedicación en cada parte del coche. Así lo ha explicado el jefe de equipo, Maurizio Arrivabene en la presentación del coche en Maranello.

Para la familia de Ferrari y para Arrivabene hoy ha sido un día muy especial: “Cuando vas a ver un nuevo Ferrari siempre es un día especial para todos. Es algo muy especial para mí también. Cuando veo al coche veo como todo el mundo aquí tiene respeto por la marca y por la empresa. Me acuerdo ahora en el trabajo de todo el mundo de la fábrica y cómo han construido pieza a pieza este coche", ha contado el italiano durante la presentación.

 Empezamos a trabajar antes de acabar la temporada pasada

En 2017, Ferrari tuvo posibilidades reales de llegar a ser campeones del mundo con Sebastian Vettel y, durante meses, han trabajado para que eso vuelva a suceder esta temporada: “No hemos tenido pretemporada. Empezamos a trabajar en este coche antes de acabar la temporada de 2017, meses antes de que acabase la temporada. Durante el invierno y hasta hace un par de horas todo el mundo ha estado trabajando muy duro para construir cada detalle de este coche, para intentar hacerlo lo mejor posible”, ha seguido contando Arrivabene.

Ferrari ha cuidado cada detalle del SF71H, introduciendo novedades que, hasta ahora, no se han visto en los otros coches presentados, como el conducto S-Duct en los retrovisores: “Hemos trabajado con pasión y mucho esfuerzo. Se han preocupado de cada detalle del coche, y eso es algo que hace que el trabajo de la gente de Maranello sea especial. Es especial porque esta pieza de excelencia está hecha en Italia. Me gustaría agradecer a todo el mundo que trabaja aquí”, ha concluido Arrivabene.

Mario Binotto y la evolución para 2018

El director técnico de los de Maranello también ha hablado durante la presentación y ha contado que el SF71H es una evolución del coche de 2017: “El nuevo coche representa una evolución del coche de 2017, que ya era un muy buen proyecto. Hemos mantenido sus partes fuertes como el concepto y la agresividad. Pero también sabíamos que debíamos desarrollar partes nuevas en cuanto a la aerodinámica, como que sea fuerte en circuitos de alta velocidad y también en cuanto a la fiabilidad”, ha contado el italiano.

Binotto ha entrado un poco más en detalle con los cambios en el coche, recalcando las partes más agresivas: “El coche es más largo en relación al del año pasado, los sidepods y los radiadores son más agresivos que en 2017 también. El equipo entero ha hecho un gran trabajo para que sea tan estrecho también. La parte más visible es el halo. Afecta al peso del coche, al centro de gravedad y el aire que pasa a la parte trasera, así que hemos trabajado mucho en ello”, ha concluido Binotto.