Ashley Young ha ampliado su contrato con el Manchester United un año más, lo que mantendrá al inglés ligado al club de Old Trafford hasta el verano de 2019. En esta temporada, el jugador se ha asentado como titular en el lateral izquierdo y ha disputado 23 encuentros en Premier League en los que ha conseguido dos goles y tres asistencias. Estos dos goles los anotó frente al Watford en un encuentro que el Manchester United acabó venciendo por 2-4. En Champions League ha jugado en cuatro partidos dando una asistencia y en FA Cup ha disputado dos partidos con una asistencia y podrá agrandar sus números en esta competición ya que el pasado fin de semana el Manchester United consiguió el pase a las semifinales.

El jugador llegó al los red devils en el verano de 2011 para reforzar la posición de extremo, pero la gran competencia en esas posición y las lesiones en el lateral izquierdo hicieron que Young pasara a disputar partidos en esa posición. Con el paso de los partidos, el inglés se fue haciendo un hueco en ese puesto hasta llegar a ser el titular en el lateral izquierdo, pese a que hay jugadores en la plantilla que esa es su posición natural como Blind, quien empezó la temporada como titular. Sus buenas actuaciones han hecho que Southgate le convoque para los próximos amistosos de Inglaterra contra Holanda e Italia.

Pese a estar disputando muchos partidos y rindiendo a buen nivel, el 'pero' de Young en esa posición es su debilidad defensiva en algunas ocasiones en las que los atacantes le cogen la espalda o le driblan con facilidad pero poco a poco el inglés está mejorando en esa faceta. Por otro lado, una de sus mayores aportaciones al equipo son sus incorporaciones al ataque y su gran golpeo de balón.