Benfica entró con buen pie en la máxima competición europea tras ganar a un Anderlecht que se quedó sin reacción tras el buen inicio de los locales, que llegó a cerrar el partido en apenas 30 minutos.
 
Jorge Jesús, en cierto modo sorprendió a la hora de decidir el once al dar entrada a André Almeida en el lateral derecho, a Fejsa  en el centro del campo y a Djuricic en la zona de ataque. Precisamente fueron tres de los jugadores más importantes del juego y quizás haya encontrado Benfica la manera de ser más fuerte en el centro del campo y no depender únicamente de Matic, uno de sus puntos débiles.
 
Cardozo ha sido uno de los protagonistas del partido, ya que ha buscado sin tregua su primer gol de la temporada. Ha tenido innumerables oportunidades y quizás ha acusado la inactividad durante la pretemporada.
 
En la primera mitad el dominio de Benfica fue arrollador, siendo favorecidos por el gol de Djuricic a los 4 minutos. Fue vital la coordinación de Fejsa y Matic en el centro del campo y la velocidad de un Markovic que crece juego a juego, pero que todavía debe ser capaz de saber cuando debe darle pausa al juego.
 
Si en la pasada jornada de liga, Garay asumió el rol de goleador, en el estreno en la Champions, ha sido Luisão quien ha recogido el testigo, haciendo el 2-0 tras el saque de una falta. 
 
Cardozo, trabajo sin suerte.
 
La segunda mitad trajo una mayor ambición de los belgas, una vez que los benfiquistas no fueron tan intensos como en el arranque. Por fin comenzaron a mostrarse los mejores hombres del equipo visitante, Mitrovic y Suárez.
 
Artur llegó a tener cierto protagonismo en la segunda mitad y que aunque Anderlecht dio un paso adelante, éste no fue suficiente. Su mayor opción llegó en el minuto 88, cuando Kouyaté marcó en fuera de juego tras el saque de una falta.
 
Cardozo, cerró un partido increíble, y  siguió intentándolo sin el éxito que todo Da Luz espera, hasta que fue sustituido por Lima.
 
En definitiva, Benfica ha obtenido una victoria fácil que lo sitúa en la cabeza del grupo junto a un PSV que goleó a Olympiakos en Grecia.