El empate sellado minutos antes entre Monaco y Guingamp (1-1) le dio el campeonato de manera automática al PSG, quien entró al campo del Parc des Princes con la expectativa de vivir una fiesta y festejar ante su público el bicampeonato obtenido. Además, se anunciaba el regreso de Zlatan Ibrahimovic, figura y genio del equipo, quien volvía después de semanas de inactividad a reclamar su merecida corona de rey del campeonato francés.

El invitado de piedra a esta celebración era el Rennes, cuadro que días antes perdió la final de Coupe de France y que se encontraba muy aproblemado luchando por escapar de las últimas posiciones de la clasificación. Como se puede apreciar, dos estados de espíritu diferentes que no hacían pensar lo que se vería en los 90' de juego.

Lavezzi celebra (Imagen: L'Equipe)
Lavezzi celebra su gol (Imagen: L'Equipe)

El partido comenzó con un PSG atacando con todas sus armas mientras el Rennes, paralizado, simplemente era un espectador más. Los parisinos aprovecharon que los visitantes dormían para poner la primera cifra apenas a los 3' de juego: Un error de Armand, capitán del Stade Rennais, permitió que Cavani tomara el balón y lo sirviera al Pocho Lavezzi, quien se encontraba en el centro del área listo para marcar el 1-0. Los siguientes 10' fueron de un amplio dominio parisino, pero una acción pareció cambiar el curso del encuentro: Nelson Oliveira aprovechó una descoordinación en la defensa del PSG y con la esférica en sus pies avanzó solo hacia la portería de Sirigu. Lamentablemente para las pretensiones del Rennes, el portugués falló su disparo. Pero ese sería el primer aviso de lo que vendría después.

La sorpresa se instala en París

Con el campeonato en el bolsillo y la ventaja en el marcador, el PSG perdió la brújula del encuentro y permitió que el Rennes comenzara a crearse situaciones de gol. Luego del aviso de Oliveira, en el minuto 23 llegó el empate para el conjunto de Philippe Montanier. El delantero Kadir logró capturar un centro venido desde la izquierda y su tiro, desviado por Jallet, se coló en la portería del PSG. Pero vendría más...

Kadir anota el empate (Imagen: Eurosport)
El empate de Kadir para Rennes (Imagen: Eurosport)

Solo 4 minutos después de la igualdad, el desafortunado Jallet cometió una falta que fue servida por el internacional juvenil francés Ntep. Su tiro hacia el área no fue interceptado por nadie y terminó entrando en la portería de Sirigu. Increíblemente, y luego de un comienzo arrollador, el PSG caía 1-2 en el encuentro que se suponía sería una fiesta.

Luego vino la confusión. Jallet, quien participó en los 2 goles recibidos por el PSG, solicitó el cambio, dejando su lugar a Marquinhos. Otro signo que demostraba los problemas del Paris Saint-Germain sobre el terreno era el juego mostrado por Thiago Motta, quien robaba muchos balones en la mitad del campo pero no era capaz de habilitar a sus compañeros.

Zlatan y un segundo tiempo estéril

El segundo tiempo no fue diferente a los primeros 45 minutos: el PSG dominaba el juego, pero no tenía ideas para perforar la fuerte defensa del Rennes, que ya no sufría los problemas del inicio.

La última luz de esperanza para los bicampeones era Zlatan Ibrahimovic, quien llevaba más de un mes sin ver acción, producto de una lesión sufrida en el partido de ida en la nefasta llave de Champions League frente al Chelsea. Cuando el sueco entró al campo, al minuto 57 por Lavezzi, el estadio explotó. Era el regreso del mesías prometido a tierra sagrada.

Con Zlatan comandando el ataque del PSG, el equipo subió su nivel y comenzó a asfixiar la defensa del Rennes, que empezaba a mostrar signos de cansancio. Aunque, en honor a la verdad, los parisinos seguían siendo poco claros en la puntada final. Luego, los visitantes realizaron un doble cambio e hicieron ingresar a Danzé y Tovoinen, lo cual le dio nuevos aires al conjunto rouge et noir.

Los últimos minutos de la lucha vieron cómo el PSG bajaba la intensidad ante un rival que se volvió inexpugnable. La acción de peligro final fue un cabezazo de Alex, que terminó estrellándose en el travesaño. Pitido final y los abrazos fueron para todos: el PSG celebrando su indiscutible nuevo título de Ligue 1, el cuarto de su historia y el Rennes, quien obtuvo una victoria inesperada pero merecida por el orden mostrado sobre el campo y que lo aleja casi definitivamente del descenso.

Jugadores en el vestuario
Celebración en el vestuario (Imagen: @PSG_Inside)

La fiesta fue poco bulliciosa en el Parc des Princes: La derrota y la aún latente eliminación frente al Chelsea en Champions League calmaron los ánimos de hinchas y jugadores. De todas maneras Matuidi, Thiago Silva y el juvenil delantero Ogenda pusieron la nota de alegría en una celebración tranquila en el estadio, que luego continuaron los fanáticos en la Avenida des Champs-Elysées.

Hinchas del PSG en Champs-Elysées
Hinchas en los Champs-Elysées (Imagen: Le Parisien)