El Olympique Marsella, que ha subido considerablemente su nivel en la recta final de la temporada, llegaba al Stade Chaban-Dalmas con la obligación de ganar, en el intento de lograr un boleto para la Europa League. Burdeos, que no se jugaba nada y que se rumorea será entrenado por Zinedine Zidane, solo aspiraba a entregar un buen espectáculo a sus fieles seguidores. La oportunidad enorme que significó la sorpresiva derrota del Lyon como local, fue completamente desaprovechada por el OM, quien ya no depende de sí mismo en el intento de acceder al segundo torneo en importancia del Viejo Continente.
Al comienzo del partido fue el Burdeos quien dominaba las acciones, movido por el empuje del brasileño Henrique, el mejor jugador del Girondins esta temporada y que dejará el equipo por problemas familiares para jugar en el Fluminense de Rio de Janeiro. Los locales intentaban crearse ocasiones mientras Marsella realizaba un fuerte pressing que volvía el juego un poco lento.
Con el correr de los primeros minutos el Burdeos empezó a bajar las revoluciones del juego, dejando al OM la iniciativa. La visita aprovechó el favor recibido y se fue en busca de la portería de Carrasso. Un disparo de balón detenido por parte de Thauvin, quien ha subido su nivel durante las últimas jornadas, fue el primer aviso de que Marsella estaba ahí para luchar por los puntos.
Y solo un minuto después, un rápido avance del lateral Djadjedje por la banda derecha terminó en un centro al corazón del área bordelesa, que encontró la cabeza del tanque Benoit Cheyrou quien anotó el 0-1 para su equipo y su segunda conquista personal en esta temporada.
La victoria parcial del Olympique Marsella lo dejaba muy bien perfilado en la busqueda de un lugar en la Europa League, ya que en ese instante el Lyon apenas empataba 0-0 contra Lorient en casa. El resto de la primera fracción continuó con la tónica: Un crecido OM superaba al Burdeos en el medioterreno y parecía estar más cerca de la segunda cifra.
La segunda etapa apagó la euforia visitante
El Burdeos quería despedirse de su público con un mejor resultado y saltaron con otra disposición al terreno del Chaban-Delmas. El lateral argentino Orban, de poca proyección durante la primera mitad, dejó su lugar a Poko, en una busqueda del técnico Gillot de darle más ataque al conjunto local. El Girondins sorprendió a la visita con este segundo aire y los hizo retroceder hasta su propia área.
Con el africano Cheick Diabaté liderando el ataque del Burdeos, los locales tuvieron buenas oportunidades de lograr el empate en los minutos 54 y 58, mientras que en el Stade de Gerland el Lorient le daba una mano enorme al adormecido Marsella, ya que Doukouré anotaba para la visita y encumbraba al OM hasta la 5ta plaza de la clasificación. Pero la ilusión se desvanecería rápidamente.
Viendo que el mediocampo del Burdeos dominaba el partido, José Anigo hizo salir a un intrascendente Payet y dispuso el ingreso de Valbuena, intentando aumentar la posesión del balón. Pero este cambio no impidió que los locales siguieran acercándose a la portería de les phocéens, hasta que por fin obtuvieron premio a su esfuerzo: Diabaté conectó de cabeza un centro desde la derecha y, aprovechando su 1.94 m de altura logró anotar el empate para el Burdeos.
Con el 1-1, la moral del Olympique de Marsella decayó y simplemente solo se dedicaron a defender. El equipo local, por su parte, dejó de asfixiar y no siguió presionando. Solo destaca un remate desde 25 metro del brasileño Mariano, que logró poner en dificultades al portero visitante Mandanda. Esto ocurrió al minuto 87 y fue la última ocasión de peligro del partido.
Con el empate 1-1 del Marseille y la derrota del Lyon en casa, el cuadro del sureste francés desperdició una gran oportunidad para quedar cerca de la clasificación a la Europa League. El equipo que será dirigido por Marcelo Bielsa la próxima temporada mantuvo su 6ta plaza con 57 puntos, uno abajo del Lyon, que depende de sí mismo en la última jornada de Ligue 1 para clasificarse a la competición internacional.