En enero se oficializó el fichaje de Robert Lewandowski por el Bayern de Múnich. Tras cuatro años, el polaco y el Borussia Dortmund decidieron poner fin a una relación beneficiosa durante todo este tiempo para ambos. Más de 60 goles y 120 partidos juntos, cuatro temporadas en que el club y el jugador han crecido y se han lanzado a la fama, uno cogido de la mano del otro. Durante este tiempo, Lewandowski y el Dortmund han llegado a conquistar dos títulos de Liga, una Copa y una Supercopa, entre otros.
2010, la llegada a Dortmund
El 1 de julio de 2010 el Borussia se hizo con el joven polaco, de 22 años, tras pagar 4,8 millones de euros al Lech Poznan, el conjunto de la ciudad de Robert Lewandowski. En la primera temporada, el jugador tuvo que aclimatarse a la Bundesliga y empezó la mitad de partidos desde el banquillo. Finalmente, el polaco acabó anotando 8 goles en un total de 33 partidos.
Lewandowski, que venía de ganar la liga polaca, se proclamó campeón de la Bundesliga junto al Borussia Dortmund. Aquello le permitió disputar, la siguiente temporada, la Supercopa alemana y la UEFA Champions League.
Estallido y doblete en la temporada 2011-2012
Lewandowski empezó su segunda campaña en el Borussia Dortmund conociendo el club y la liga y ganándose minutos y la confianza de Klopp. Aquella temporada disputó 34 partidos, todos apareciendo como titular, y consiguió anotar 22 goles.
En su segunda temporada, Lewandowski consiguió sumar su segunda Bundesliga consecutiva con el conjunto aurinegro, a pesar de que empezó el curso dejando escapar la Supercopa y se despidió de la Champions en la fase de grupos. Además, club y jugador consiguieron el doblete tras ganar la DFB-Pokal con un tremendo 5-2 al Bayern de Múnich en el que el polaco contribuyó con un hat-trick.
2012-2013, reconocimiento y brillo en Europa
La temporada volvió a empezar con el Borussia Dortmund dejando escapar la Supercopa alemana. Esto no arrugó a Lewandowski que hizo su mejor temporada en el conjunto aurinegro, anotando la friolera cifra de 24 goles en 31 partidos. Aquella temporada, el Dortmund no consiguió ganar la Bundesliga pero brilló, de la mano del polaco, en Europa.
Tras dos temporadas con un paso corto por la UEFA Champions League, en la temporada 2012-2013, el polaco se cargó al equipo a la espalda para triunfar en la máxima competición europea. El Borussia Dortmund consiguió llegar a la final de Wembley en la que el Bayern de Múnich se llevó la orejuda en los últimos compases del partido. Lewandowski fue el mejor de los suyos, teniendo grandes actuaciones como el partido de ida de semifinales en el que le endosó cuatro goles al Real Madrid.
Gran temporada y fin de una bella historia
Desde el final del curso anterior empezaron a aparecer rumores que vinculaban a Lewandowski con varios equipos europeos. El polaco y el Dortmund empezaron la temporada consiguiendo la supercopa, título que se les resistía a ambos desde las dos anteriores temporadas.
En enero se acallaron todos los rumores cuando se hizo oficial el traspaso del polaco al Bayern de Múnich. A pesar de la noticia, Lewandowski siguió demostrando su amor y pasión por el conjunto aurinegro, cerrando una de sus mejores temporadas. En 33 partidos anotó 20 goles que le han servido para alzarse con el trofeo de máximo goleador de la Bundesliga.
Con 20 goles se ha convertido en el máximo goleador de la temporada 2013-2014
Los dos últimos partidos sirvieron a jugador y club para despedirse de la mejor manera y poner fin a una bella historia que ha durado cuatro temporadas. Tras el homenaje que recibió en el Westfalenstadion en el penúltimo partido de la temporada, cerró el curso con un doblete ante el Hertha de Berlín, anotando un golazo de falta.
Lewandowski y el Borussia Dortmund no han podido ganar ningún título en la última temporada de la relación entre el ariete y su club. A pesar de esto, han cerrado la temporada siendo subcampeones de la Bundesliga y de la DFB-Pokal. Lewandowski ha podido despedirse del club que lo ha lanzado a la fama y que han conseguido conquistar los corazones de muchos aficionados al fútbol en Europa. Tras más de 120 partidos y 60 goles, el polaco se despide de la que ha sido su casa estando ambas partes agradecidas eternamente la una de la otra.