El vigente campeón de la FA Cup, el Arsenal, se enfrentaba al Middlesbrough de Aitor Karanka por un puesto en los cuartos de final de la copa inglesa. Los gunners, claros favoritos, han dominado el partido de principio a fin y no han dado ni una oportunidad a los hombres de Karanka. El Middlesbrough se plantaba en el Emirates tras la sorprendente victoria en la anterior ronda ante el City, pero los gunners no se han dejado sorprender.

Cazorla juega y Giroud transforma

El Arsenal empezó el encuentro dominando la posesión del balón y pronto empezó a entrelazar unas buenas combinaciones que ponían en aprietos a la zaga del Middlesbrough. Santi Cazorla, hoy capitán gunner, comandó el juego de los suyos junto a Mesut Özil, que hoy estuvo sensacional. Con las asociaciones con Giroud y los desmarques de ruptura de Alexis y Welbeck, la zaga del Boro no daba al abasto. Aún así, al Arsenal siempre le fallaba ese último pase para generar la ocasión clara de gol. 

Aún así, era cuestión de tiempo que Cazorla o Özil filtraran un buen balón para que acabara en gol. Y así fue en el minuto 26. Tras una gran jugada colectiva del Arsenal, sacando el balón des de atrás y realizando unas cuantas paredes, Cazorla recibió el balón en la media luna y asisitó a Gibbs, que entraba solo por el costado. El lateral inglés simplemente puso el balón atrás para que Giroud batiera a Mejías a bocajarro. Golazo del Arsenal marca de la casa. 

Y con el Middlesbrough grogui, Giroud aprovechó para doblar la ventaja y sentenciar el partido tan solo dos minutos después. Özil sirvió un córner des del costado derecho que Giroud remató al primer palo con una volea impecable. El gol contó con la inestimable ayuda de toda la defensa del Boro, que dejó un boquete enorme alrededor de su portería que Giroud no desaprovechó. 

Un serio Arsenal que mereció más

En la segunda mitad, el Arsenal siguió aplicando el mismo guión que durante los primeros 45 minutos, con alguna pequeña modificación. Los gunners eran técnicamente infinitamente superiores a su rival, pero además estaban mucho más concentrados. El Arsenal continuó dominando la posesión, pero durante pequeños tramos de partido cedió la pelota al Middlesbrough para intentar sentenciar el partido a la contra. Con Welbeck y Alexis en los flancos y Özil y Cazorla como peloteros, el peligro del Arsenal a la contra era inmenso. 

Y tanto llegando con la posesión a la portería rival como con zarpazos a la contra, el Arsenal generó multitud de ocasiones y mereció algún gol más. Giroud estuvo en más de una ocasión cerca de completar su primer hat-trick como gunner, y Gibbs pudo poner la guinda a su partidazo con un gol. 

En el minuto 72, entraron Walcott y Rosicky en el campo, y ellos fueron los protagonistas de la oportunidad más clara de la segunda mitad. Thomas Rosicky filtró un gran balón al veloz Walcott, que con un excelente control se plantó solo ante Mejías pero no lo pudo batir. Ya en el tiempo de descuento, Kike tuvo la oportunidad de hacer el gol del honor para su equipo, pero su remate de cabeza se estrelló en el poste. 

Finalmente, el campeón sigue vivo en la FA Cup y ya se encuentra en cuartos de final mostrando un rendimiento muy fiable. Habrá que ver si los gunners son capaces de repetir el éxito de la pasada campaña.