New York Red Bulls logró una importantísima victoria en el derbi de la ciudad estadounidense tras unos resultados muy negativos. Los locales lograron adelantarse en el marcador gracias a unos 30 primeros minutos muy buenos. En la segunda parte los visitantes fueron muy superiores en todos los ámbitos del partido, y lograron remontar con tres goles, el resultado de la primera parte.

Grandes primeros 20 minutos

El partido comenzó como era de prever, con una gran intensidad, y con mucho juego de uno y otro equipo. En estos primeros minutos se puedo ver a los equipos con las líneas muy adelantadas, y esto provocó que los New York City FC se pudieran adelantar en el marcador. A la salida de un córner, McNamara recibió el balón en segunda jugada y tras un gran control, conectó un disparo a bote pronto, que hizo imposible la estirada de Robles.

McNamara celebra el primer gol (Imagen: skyscraperblues.com)

Tras este gol los locales tuvieron otra clara ocasión con un disparo de Ballouchy, pero el balón se marchó cerca de la portería ‘taurina’. Los visitantes fueron poco a poco volviendo a entrar en el partido, pero sus acercamientos a la portería de Sounders no llevaban demasiado peligro. Pero los del Bronx no se daban por satisfechos y dispusieron de otra clara ocasión de marcar el segundo en otro córner, pero Robles sacó el balón en la línea de gol.

Mediada la primera mitad los Red Bulls comenzaron a tener mayor presencia en el partido, todo gracias a que Felipe y McCarty consiguieron hacerse dueños del balón en el centro del campo. Esto ayudaba a que las llegadas sobre la portería rival cada vez fueran más constantes y peligrosas, estando muy cerca el inglés Wright-Phillips de empatar el encuentro.

Los locales trataban de volver a llegar a la portería de Robles, pero la defensa de los ‘taurinos’ estaba más atenta, y desbarataba todos los acercamientos de los rivales.

Villa disputa un balón con Miazga (Imagen: mirror.co.uk)

Cuando el partido se acercaba a los minutos finales, cada vez se estaba convirtiendo en más bronco, y ese juego veloz, de área a área desapareció. Y sólo algún acercamiento sobre la portería de New York City, cambiaba la tónica que había tomado el encuentro. Con esto y con todo, el partido llegó al descanso con el resultado a favor de los locales por 1-0.

Kljestan dirige a la ganadería

La segunda mitad tuvo un inicio completamente diferente al de la primera, ya que los visitantes salieron un una intensidad desmesurada. Y gracias a ello, a los dos minutos del inicio de la segunda mitad, Kljestan recuperó un balón en el borde del área, se dirigió hacía el córner y le colocó un centro al punto de penalti a Wright-Phillips, que apareció solo y sin dejar botar el balón, puso las tablas en el marcador.

Wright-Phillips celebra su gol (Imagen: wsj.com)

Pero esto no quedo ahí, y los ‘Taurinos’ continuaron su asedio sobre la portería de Saunders, y 5 minutos después logró el gol que les adelantaba en el marcador. Una falta lateral sacada por Kljestan continuó en segunda jugada, hasta que Abang dejó de cabeza un balón en el área pequeña y Duvall apareció por el espacio creado para perforar la portería de Saunders.

Y en la siguiente jugada tras el gol, los Red Bulls se fabricaron un contraataque que acabo con una gran jugada individual de Wright-Phillips que finalizó con un disparo que golpeó en el palo.

Tras este inicio tan fulgurante, la intensidad del encuentro disminuyó y el balón volvió a ser disputado por ambos equipos, pero en este caso, las acciones peligrosas eran las de los visitantes. Y con el paso de los minutos, los dos entrenadores realizaron algunas sustituciones para buscar dar mayor ritmo al encuentro.

Pero pese a esto los jugadores más peligrosos seguían siendo los visitantes, sobre todo gracias a un Klljestan que estaba realizando un encuentro completísimo. Y en una de estas acciones los visitantes consiguieron lograr el tercer tanto. Kljestan volvía a aparecer colocando una falta lateral en el segundo palo, en donde apareció Maizga, que hizo valer sus 191 centímetros para elevarse y colocar el 3-1 en el marcador. Señalar que el central estadounidense estaba completando un gran encuentro, ya que gracias a él, Villa estaba desapareciendo en el encuentro.

Este tercer gol descentró completamente a los locales, que no conseguían volver a tener ese arrojo, ni sobre todo, precisión en el pase, para conseguir llevar peligro sobre la portería de Robles.

Miazga celebra su gol (Imagen: empireofsoccer.com)

En los últimos minutos del encuentro, los locales trataron de lograr a la desesperada un gol que les acercara en el marcador, pero la defensa de Red Bulls estuvo muy sobria. Los visitantes se dedicaron a tener el balón en su posesión, para buscar que el paso de los minutos les acercara a la victoria. Pero pese a esto lograron tener una ocasión clara para conseguir el cuarto tanto por parte de Lawrence, pero el palo volvió a toparse en el camino de los Red Bulls.

Pero el resultado ya no se movería más y los New York Red Bulls lograron una gran victoria frente a un rival que comenzó muy bien, pero el físico se impuso finalmente.