Al hablar de Liverpool, viene a la mente un par de cosas: los Beatles y el Liverpool FC, un club ya mítico que fue creado el 15 de marzo de 1892. Cuya fundación, en parte, se debe a sus vecinos, y que no ha parado de conquistar títulos desde finales del siglo XIX.

Como bien se ha mencionado anteriormente, el club fue fundado en el año 1892, y al año siguiente, ganando la Lancashire League, conseguía el ascenso a la First Division, liga que terminaría por ganar en la temporada 1900/01. Cinco años más tarde, los aficionados podían ver cómo el club volvía a alzarse con el título liguero y así, consolidarse como club top. Todo y con eso, a partir de ahí, empezó un calvario en el cual hasta la temporada 1946/47 el club había conquistado tan sólo un par de ligas allá por los inicios de los años '20.

Entrados ya en los años 50, el club alcanzó una final de FA Cup, la cual perdió contra el Arsenal, y más tarde, en la 1953/54, descendió y se vio deambulando por la Second Division hasta que, un buen día, Bill Shankly cogió las riendas del equipo y lo profesionalizó. Con Shankly al mando, el club volvió a ser grande. Ganó una liga que se llevaba esperando 17 años, conquistó la primera FA Cup en la historia de la entidad y alcanzó una final europea.

Bill Shankly. (Foto: The Hard Tackle)

Ya en los inicios de los 70, iba a empezar la época dorada red. Con el entrenador, bajo el ya famoso lema He made the people happy (Hizo a la gente feliz), el club terminó de conquistar en su etapa el doblete de liga y Copa de la UEFA, sumado a la posterior FA Cup en 1974. Pese a los títulos, Shankly dimitió y con él, se iba el mejor entrenador en la historia del club. Lo iba a sustituir su segundo entrenador, Bob Paisley.

¿Qué se podía esperar uno de un segundo entrenador? Bien, pues en sus nueve campañas dirigiendo al conjunto de Anfield, conquistó nada menos que 21 títulos. Algunos como tres Copas de Europa o seis Ligas. Ya en el año 1983, el entrenador más laureado de la historia del Liverpool decidía retirarse y lo iba a sustituir su ayudante, Joe Fagan, con quien el club consiguió el triplete con Liga, Copa de Europa y Copa de la Liga, siendo el primer equipo inglés en conseguir tal hito. Aunque con el desastre de Heysel, decidió irse, y quien le sustituiría no iba ser nada menos que Kenny Dalglish, con el rol de entrenador-jugador.

Kenny Dalglish. (Foto: Mirror)

Con el siete red a los mandos, se conquistaron tres Ligas y dos FA Cup, sumadas al doblete de 1985/86. Pero, otra vez, el Liverpool FC aparecía en las portadas y, esta vez, no por conquistar títulos. Era la tragedia de Hillsborough, donde 96 aficionados reds perdieron la vida y, desde entonces, el club entró en una etapa negra de la que costó mucho recuperarse. Graeme Souness, otro ex jugador, se convirtió en entrenador, conquistando una FA Cup pero quedando sexto en liga en sus dos años al cargo. Estas malas clasificaciones le acabarían costando el trabajo y sería sustituido por Roy Evans, quien ganó una Copa de la Liga y consiguió colocar al equipo tercero en la competición doméstica. Ya en la temporada 1998/99, le impusieron a Gérard Houllier como co-entrenador, y dos años más tarde, el francés conseguía ser el único al cargo.

Conquistó en 2001 otro triplete con FA Cup, Copa de la Liga y Copa de la UEFA, pero debido a distintos problemas de corazón e internos, el club decidió cesarle y fue sustituido por el español Rafa Benítez. Con Benítez, el club recuperó la gloria europea: en su primera campaña, la 2003/04, quedó quinto, y el club veía como el año siguiente se conquistaba la Champions League. La quinta en su palmarés. Esa final será recordada siempre después de que los de Benítez se las arreglarán para remontar un 0-3 al descanso contra el AC Milan de Maldini, Shevchenko y compañía.

Con ello, el equipo liverpudlian se convertía en el tercer conjunto con más Copas de Europa, sólo por detrás de Real Madrid y AC Milan. Si le sumamos el hecho de tener tres Copas de la UEFA, la última de ellas conquistada en 2001 con Gérard Houllier como técnico, hablamos del equipo inglés con más títulos europeos y el segundo de Europa que más tiene en total. Sin olvidarnos de las 15 Community Shield y las tres Supercopas de Europa.

Después de unos años, en la ya temporada 2009/10, Benítez fue despedido de mutuo acuerdo después de finalizar séptimo. Roy Hodgson era su sustituto, pero tan sólo estuvo al cargo hasta diciembre y le sustituyó el ex jugador y ex entrenador Kenny Dalglish, un ídolo para la afición, en lo que iba a ser su segunda etapa en el banquillo del Liverpool. Con él no se consiguió un gran nivel de juego, pero el club volvió a ganar un título. Fue la Copa de la Liga en la campaña 2011/12, pero terminó octavo en Premier, un puesto que no se repetía desde hacía ya 18 años y que le terminaría por costar el puesto.

Brendan Rodgers, actual entrenador, fue su reemplazo. Venía de una excelente campaña con el Swansea City y prometía volver al passing game. Sin embargo, desde su llegada en 2012, el equipo sigue sin ganar nada, aunque sí ha dado muestras de mejora, como el subcampeonato de la 2013/14.

Por el club han pasado míticos personajes de la historia del fútbol. Algunos como Ian Rush (máximo goleador del club con 348 goles), Ian Callaghan (máximo asistente y con 857 partidos a su espalda), Kenny Dalglish, John Barnes o el aún jugador -de Los Angeles Galaxy- Steven Gerrard. También como entrenadores cabe destacar a Bill Shankly, el cual resurgió al equipo de la Second Division, o Bob Paisley, con quien se conquistaron cuatro Copas de Europa.

Steven George Gerrard. (Foto: IBTimes)

Eso sí, atrás quedan ya esos maravillosos años con Bill Shankly que más adelante serían prolongados por Bob Paisley. Y, todo y siendo actualmente el club inglés más laureado con 18 títulos de Liga y cinco Champions League entre otros premios, bien es cierto que por el momento no atraviesa su mejor etapa puesto que, a excepción de la Copa de la Liga conquistada en 2012 con Kenny Dalglish como entrenador, el club llevaba siete años sin ganar nada.

En la actualidad, si un aficionado red es preguntado por estos años te dirá que son de transición. Una transición debido a la etapa de Hicks y Gillet como antiguos propietarios, los cuales dejaron al club en una situación económica preocupante. Ahora mismo, con las inversiones de FSG con John W. Henry como máximo representante, el club va en la correcta dirección y la estabilidad económica ya es actualidad en Anfield. Sumado al retorno a la Champions League en la pasada campaña y al segundo puesto, hay razones para ser optimistas.