Pese a sus continuos esfuerzos, Ryan Shawcross no podrá evitar pasar por el quirófano. El defensor inglés, que se lesionó en la espalda el pasado 31 de enero en un encuentro de Premier League frente al Queens Park Rangers, ha estado batallando sin descanso para eludir la cirugía a la que finalmente tendrá que ser sometido.

El capitán, debido a estas molestias en la espalda, no ha podido tener una pretemporada al uso y, de hecho, sólo dispuso de minutos en el amistoso frente al Brentford. El aguerrido central lo ha intentado todo durante el parón veraniego pero, cuanto más se forzaba, más dolores sufría en la zona afectada.  

Ahora, club y jugador, viendo que el tratamiento conservador no ha dado los frutos deseados, han decidido que la decisión más apropiada es someterse al siempre inoportuno bisturí, una operación que le mantendrá en el dique seco durante, al menos, los próximos dos meses.

Por suerte para Mark Hughes, el eje de la zaga de los potters parece ser una de las posiciones con mayor fondo de armario de la plantilla. La ausencia del carismático central, capitán para más inri, es un contratiempo importante, pero la cantidad y calidad de posibles relevos debería ser suficiente para que no se desmorone el equipo.

El técnico galés, para elegir a su pareja de centrales titulares, podrá elegir entre Philipp Wollscheid, Marc Wilson, Marc Muniesa, Geoff Cameron y Dionatan Teixeira. Distintos perfiles para una misma función, esto es lo que le ofrece este abanico de posibilidades al técnico de Wrexham.

Ahora es cuando estos jugadores tienen que dar un paso al frente. A nadie le gusta entrar por la lesión de un compañero, pero deben aprovechar al máximo el hueco dejado por Shawcross para tratar de impresionar a su entrenador. Quién sabe si de sus actuaciones durante estos dos meses, y siempre asumiendo la vuelta del capitán al once tras su recuperación, saldrá una futura titularidad en el eje de la defensa formando pareja con el de Chester.