El Everton se enfrenta a una de sus temporadas más complicadas en los últimos tiempos. Tras el tremendo chasco de la pasada campaña, uno de los clubes más históricos de la Premier League ha de intentar volver al lugar que venía ocupando en los pasados cursos, peleando ante los mejores e intentando incluír, de manera regular, su nombre en las altas cotas europeas.

Fundación y primeros años

El Everton, uno de los clubes más antiguos de Inglaterra, fue fundado en 1878 tras eliminar el viejo apelativo con el cual se conocía al club como “Saint Domingo F.C”. Aquel año, pocos días antes de Navidad, el Everton disputó contra el St. Peter’s el primer partido de su historia, ganando por 6-0. En 1884, el Everton ganó su primera copa, la Copa de Liverpool, en Priory Road, pero como su popularidad no dejaba de crecer, el club tuvo que trasladarse a un campo con mayor capacidad. El estadio se llamó Anfield, y fue allí donde el club se convirtió en miembro fundador de la liga de fútbol en 1888 y donde ganó su primer campeonato de liga en la temporada 1890/91.

En aquella campaña, se introdujeron los lanzamientos de penalti y las redes en las porterías, idea de un seguidor del Everton, el ingeniero del Ayuntamiento de Liverpool, J. A. Brodie. El alquiler de Anfield por parte del Everton provocó una decisión que terminaría por convertir Merseyside en el condado con más éxitos futbolísticos del país. La Junta Directiva se negó a satisfacer unas pretensiones ecónomicas, en su opinión, demasiado elevadas y el club se marchó a Goodison Park.

"Goodison Park" | Foto: Everton

En 1906, el Everton ganó su primera FA Cup tras imponerse al Newcastle United por 1-0. Tres años después se convirtió, junto al Tottenham Hotspur, en el primer club de fútbol que iniciaba una gira intercontinental. Unos años más tarde, en la temporada 1914-1915, el Everton logró su primer título de liga, aunque tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, la competición se detuvo durante cuatro años, por lo que este éxito no tuvo continuidad. El club no volvería a conseguir este trofeo hasta la temporada 1938/39. Igual que ocurriera la primera vez, estalló la Segunda Guerra Mundial, y la competición se volvió a detener.

Foto: ToffeeTalk

Comienzan a llegar los éxitos

En la campaña 1962/63, el Everton se hizo con un nuevo título de liga tras perder solo seis partidos en la temporada. Al año siguiente, en su primera participación en la Copa de Europa, perdió en primera ronda, viéndose sobrepasado por todo un Inter de Milán. En 1966, el equipo llegó a la final de la FA Cup tras eliminar a equipos de la talla de Manchester United y Manchester City. El Sheffield Wednesday, su rival en mencionada final, se adelantó 2-0, pero el Everton, con dos goles de Mike Trebilcock, y otro de Temple, lograría hacerse con el trofeo. Su participación en la Recopa de Europa no fue muy exitosa ya que el equipo quedó eliminado por el Real Zaragoza en la segunda ronda.

En 1968, el Everton volvió a llegar a la final de la FA Cup, pero el título finalmente fue a parar a las vitrinas del West Bromwich Albion gracias a un gol de Jeff Astle. A pesar de este fracaso, Harry Catterick sabía que aún tenía jugadores de gran calidad a su disposición. Howard Kendall, Colin Harvey, Alan Ball, Joe Royle, Labone, quienes realizaron un campeonato 1969-1970 glorioso. Joe Royle fue el máximo goleador con 23 goles y el Everton ganó la liga con un total de nueve puntos de ventaja sobre el Leeds United.

Los años 70 fueron un período desastroso para el club. La final de la Copa de la Liga de Inglaterra (Capital One Cup actual) disputada en la temporada 1976-1977 fue lo más cerca que el Everton estuvo de levantar un trofeo.

La década dorada, los '80

En la temporada 1983/84, el Everton llegó a la final de la FA Cup y de la Copa de la Liga. La final de Copa de la Liga fue un derbi de Merseyside que terminó con empate a cero. Sin embargo, el Liverpool ganó la repetición en Maine Road. La final de la FA Cup lo enfrentó al Watford en Wembley y el Everton se impuso gracias a los goles de Graeme Sharp y Andy Gray. La temporada 1984/85 fue una de las mejores en la historia del club. A pesar de tener un inicio poco convincente, el equipo logró reponerse e imponer su dominio en la competición doméstica. Durante esa temporada se ganó la octava liga a falta de cuatro partidos para el final de la competición. Como campeón de la FA Cup, el Everton también disputó la Recopa de Europa. El club avanzó hasta su primera final europea tras dejar en el camino a equipos como el Bayern Múnich, siendo considerado como uno de los partidos más memorables en la historia del club.

La final la disputó en De Kuip, Rotterdam, contra el Rapid de Viena. La ganó cómodamente por 3-1, consiguiendo así su primer título europeo. El escocés Andy Gray fue el máximo goleador de la competición, con cinco goles. Durante esta temporada, el club también logró llegar a la final, aspirando al triplete, pero el Manchester United se impuso ante un equipo que acusó demasiado el exceso de partidos. Posiblemente, el equipo de los '80 podría haber llegado a ganar más títulos europeos después de 1985, de no haber sido por la prohibición a todos los clubes ingleses de participar en las competiciones continentales de la UEFA tras el desastre del estadio de Heysel (que implica irónicamente a los aficionados del Liverpool), el otro equipo de la ciudad. Para la temporada 1986/87, el Everton perdió a, posiblemente, el mejor delantero de su historia, Gary Lineker, pero consiguió reconquistar la liga inglesa.

El palmarés de éxitos del Everton terminó en la temporada 95/96, cuando lograron vencer al Manchester United por 1-0 en la final de la FA Cup. Este Everton ya no es el mismo de hace un par de décadas, desde que la liga inglesa es conocida como Premier League, el club no ha logrado ningún título, cosa que tendrá el deber de cambiar Roberto Martínez en los próximos tiempos.