La temporada pasada, partenopeos y capitalinos se vieron en el San Paolo en el último partido de la temporada, en juego estaba la Champions, el objetivo por el que ambos equipos habían peleado durante toda la temporada. En aquella ocasión la fortuna sonrió al equipo romano que se llevo el partido por 4-2 y obteniendo la tercera posición en liga, que daba plaza para la previa de la máxima competición europea, de la que quedaron apeados al igual que el Nápoles hace una temporada contra el Athletic Club de Bilbao.

Hoy, la historia era distinta. El Nápoles llegaba con la necesidad, y la urgencia, de sumar la primera victoria de la temporada en liga, ya que había sumado dos empates y una derrota en los tres primeros partidos de liga, por lo que en los aficionados napolitanos había cierta angustia en conseguir los tres puntos. La victoria contundente el pasado jueves frente al Brujas, con la buena actuación de Callejón y Mertens provocaba que antes del partido hubiera mejor ambiente en San Paolo.

Por su parte, la Lazio llegaba con seis puntos al encuentro, dos victorias y una derrota era el balance del equipo entrenado por Steano Pioli antes del partido. El empate en Europa League frente al subcampeón del año pasado, el Dnipro conllevaba que la victoria tuviera una mayor importancia para los capitalinos.

Higuaín abría el marcador

Sarri salía con todo al césped, partido vital, más que tres puntos en juego. La principal novedad fue la titularidad de Insigne en lugar de Mertens en banda izquierda. Hamsik, tras su gran partido ante el Brujas, le volvía a ganar la titularidad a Gabbiadini, mientras que en la línea defensiva, Hysaj le ganaba el puesto a Maggio, y Koulibaly y Albiol formaban la pareja de centrales en detrimento de Chiriches. La Lazio saltaba al terreno con juego con una novedad notable, la ausencia de Felipe Anderson en el once titular.

Desde el primer minuto el Nápoles llevó la iniciativa del partido buscando la portería de Marchetti. Avisó primero Insigne y nuevo Allan, aunque fue Higuaín el que a los catorce minutos anotó el primer gol del partido, en el que tras una buena acción individual batía al portero visitante con un buen tiro raso cruzado.

Tras el gol del delantero argentino, el Nápoles no reculó, si no que buscó el segundo gol, aquel que diera la tranquilidad y acercara a los de Sarri a la primera victoria en liga. A los veintidós minutos fue Higuaín el que tras una buena acción de Hysaj estuvo a punto de marcar el segundo, y justo un minuto después, el capitán Marek Hamsik el que buscó el gol, aunque su tiro fue bloqueado por Marchetti.

A los veintiséis minutos fue Lorenzo Insigne el que buscó batir por segunda vez al cancerbero capitalino, pero fue Allan el que anotó engañando en su definición al portero italiano, dando el gol de la tranquilidad al Nápoles, que cada vez veía la victoria más cerca.

En la segunda parte llegó la sentencia

Con 2-0 a favor del Nápoles, se llegaba al descanso. La segunda parte comenzaba como acabó la primera, con un Nápoles buscando constantemente la portería rival. A los tres minutos de la segunda parte, Higuaín tras otra buena conducción disparaba y Marchetti rechazaba la pelota, que fue a parar a los pies de Insigne el que a placer marcó el tercero, dejando el partido casi sentenciado para el Nápoles.

A la hora de partido Higuaín dejaba el partido visto para la sentencia, tras una buena conducción desde el perfil derecho del ataque del Nápoles anotaba por segunda vez en el partido con un gran tiro cruzado.

Tras el gol de Higuaín, Sarri dio el partido por ganado y comenzó a hacer rotaciones, Hamsik se retiraba y dejaba su lugar en el campo al español David López, mientras que Higuaín se quedó sin el hat trick, debido a que los sesenta y cinco minutos Gabbiadini lo sustituyó en el San Paolo, el italiano a los pocos minutos de entrar, tras una buena jugada con Insigne pudo hacer el quinto. La última sustitución azurra llegaba con la entrada de El Kaddouri y la salida de Insgine.Gabbiadini aprovechaba su oportunidad, y a los ochenta minutos de partido anotaba el quinto gol para el Nápoles. Victoria contundente del Nápoles, que marcará un punto de inflexión en la temporada del equipo de Sarri.

Mala imagen de la Lazio que en los dos partidos que ha jugado fuera de casa los ha perdido de forma abultada, ya que en Verona frente al Chievo cayeron por cuatro goles a cero. Los de Piolo nunca llegaron a entrar en el partido, y se vieron superados en todo momento por los locales.

Con esta victoria el Nápoles cierra la jornada con cinco puntos y jugarán el próximo miércoles contra el ascendido Carpi, partido asequible a priori para los jugadores partenopeos, que el próximo sábado reciben en San Paolo a la Juventus en el partido de la jornada en Italia. La Lazio, por su parte, con esta derrota acaba la jornada con seis puntos, y reciben en la jornada próxima al Genoa.