Todo marchaba sobre ruedas para los intereses del Stoke City cuando se llegó al descanso en el Britannia Stadium. Los goles de Bojan Krkic y de Jonathan Walters habían colocado en una situación inmejorable a los rojiblancos para conseguir su primera victoria del curso, pero todo se torció tras el intervalo y los goles de Riyad Mahrez y Jamie Vardy pusieron las tablas para el Leicester City e hicieron que volaran dos puntos de Stoke-on-Trent.

Mark Hughes, visiblemente decepcionado, manifestó sentirse molesto después de ver la incapacidad de su equipo para salir airoso de lo que el describió como “una periodo clave de 15 minutos” al inicio de la segunda mitad.

“Hablamos en el descanso sobre la posible reacción del Leicester porque sabíamos que iban a salir a intentarlo, puesto que no tenían nada que perder en ese momento”, señaló el de Ruabon.

Teníamos que haber aguantado los primeros 10 o 15 minutos y no darles motivos para creer en la remontada. Si hubiéramos logrado eso, hubiéramos ganado el partido de forma cómoda”, añadió el exentrenador del Manchester City.

La jugada del penalti de Arnautovic fue, a todas luces, un factor decisivo en el resurgir de los foxes, que recortaron distancias y empezaron a creer en sacar algo positivo del condado de Staffordshire. “Desafortunadamente, Marko cometió un error, su par le ganó la partida y al final lo derribó cuando trató de corregir su fallo”, explicó Hughes sobre dicha acción.

“Con 2-1, necesitábamos aguantar un poco y mantener la distancia con el Leicester lo que, para ser perfectamente honestos, no fuimos capaces de hacer. Después, un balón largo permitió a uno de sus jugadores anotar de nuevo y antes de que nos diéramos cuenta todo estaba en tablas. Se lo pusimos demasiado fácil a Vardy”, afirmó.

“Es increíblemente frustrante porque pudimos y probablemente debimos haber sentenciado el encuentro en la primera parte y ahora estamos hablando de que acabó en empate”, sentenció con contundencia el mánager potter.

Además de analizar los fallos de sus pupilos, el míster rojiblanco también tuvo tiempo para destacar dos decisiones de los colegiados que pudieron interferir en el desarrollo y en el resultado final del encuentro: la jugada del penalti y la acción previa al empate.

Parece que Marko contacta con el talón de su jugador fuera del área, pero vista la actuación de los árbitros hoy nunca iban a ver eso y siempre íbamos a correr el riesgo de que pitaran penalti”, explicó a los medios.

“También estamos increíblemente decepcionados con la naturaleza del segundo gol, aunque teníamos que haber lidiado mejor con el balón largo. Estamos decepcionados porque el colegiado decidió que el juego continuase cuando Jon Walters había sido objeto de falta tres o cuatro veces antes de perder el balón. No tengo ni idea de en qué estaba pensando el árbitro cuando dio ahí la ley de la ventaja. Él –refiriéndose al árbitro– nos confirmó que la había aplicado, pero ciertamente eso no fue una ventaja para nosotros, así que creo que necesitará repasar su actuación”, concluyó Hughes.