Así de caprichoso es el fútbol, así de caprichosos son los calendarios y los sorteos. No han transcurrido ni dos semanas desde que Jack Butland le detuviera el penalti decisivo de la tanda a Eden Hazard, en Cuarta Ronda de la Capital One Cup, y Stoke City y Chelsea se volverán a ver las caras en el Britannia Stadium.

Lo que, en realidad, no fue un mal encuentro de los de la capital, acabó siendo un clavo más en el ataúd del preparador portugués, que ve cómo se le agota el crédito a pesar del apoyo incondicional de su hinchada. En su segunda visita de la temporada a The Potteries tendrá la oportunidad de retomar el vuelo. En su segunda visita de la campaña a Stoke-on-Trent puede quedar sentenciado.

A retomar la fortaleza de Staffordshire

Visitar el Britannia Stadium nunca se ha considerado un desplazamiento sencillo o cómodo. El aura que desprende el coliseo situado en Stanley Matthews Way desde la época de Tony Pulis augura al contrincante un ambiente hostil, un partido duro y, por qué no decirlo, habitualmente una meteorología para valientes.

La visita del Bournemouth, último triunfo rojiblanco en su estadio. Foto: @eduarroyolopez

En cambio, si se miran las estadísticas se puede observar que el Stoke City tan sólo ha sido capaz de hacerse con los tres puntos en una de las últimas cinco ocasiones en que actuado como local en Premier League. Y es que, en la temporada 2015-2016, los rojiblancos únicamente han sumado cuatro puntos en el Britannia –nueve fuera de casa–, lo que les impide despegar de manera definitiva hacia su objetivo real: dar el salto definitivo, asentarse en el top 10 y aspirar a complicar la vida a los equipos punteros. Actualmente vagan por la mitad baja de la clasificación, en un decimocuarto puesto que sabe a poco viendo la calidad de la plantilla stokie.

Para cambiar la mala racha en casa, los pupilos de Mark Hughes sin duda se podrán inspirar en el partido de Capital One Cup en que eliminaron al Chelsea en la tanda de penaltis. Eso sí, tendrán que mejorar su bagaje ofensivo si no quieren que la cosa vuelva a acabar con 0-0. En esta ocasión no habrá oportunidad para que Jack Butland emerja como héroe en los lanzamientos desde los 11 metros.

Con la soga al cuello

Los visitantes, por su parte, llegan en decimoquinta posición, un puesto inmediatamente por detrás de los rojiblancos y con dos unidades menos en su casillero de puntos (11). Unos números, transcurridas ya 11 jornadas, que convierten al de José Mourinho en el peor defensor del título a estar alturas de toda la historia de la Premier League. Los blues arrebatan este dudoso honor al Blackburn Rovers de la temporada 1994-1995, que tras 11 fechas sumaba 14 puntos.

Entre otros males, la falta de contundencia en una línea defensiva irreconocible ha provocado que los de Stamford Bridge hayan concedido ya más goles en liga esta temporada (22), que en la temporada 2004-2005 entera y los mismos que en toda la 2005-2006. Están haciendo aguas y José Mourinho no está consiguiendo tapar las fugas que lo llevan a la deriva. Su afición confía en el técnico luso ciegamente, pero habrá que ver qué ocurre si vuelven del condado de Staffordshire con otra derrota bajo el brazo. Quizá Roman Abramovich no sea tan paciente como la grada blue.

El Chelsea viene de ganar en Champions al Dinamo de Kiev. Foto: standard.co.uk

Hay datos para creer en los de la capital, como aquel que señala que, antes de la derrota en los penaltis del pasado día 27 de octubre, el Chelsea había ganado 14 de los 17 choques previos ante los potters en todas las competiciones, perdiendo sólo uno. Quizá otro rayo de luz lo pueda aportar un Loic Remy que ha anotado tres goles en tres enfrentamientos ante los rojiblancos. Que sea de la partida o no ya es otra cosa.

En cambio, hay otra estadística que no se muestra tan halagüeña con los londinenses: los blues sólo han ganado dos de sus últimos 10 partidos como visitantes en todas las competiciones. Han empatado tres y han perdido cinco y hay que tener en cuenta que uno de los choques que acabó en tablas fue el que finalmente terminó con la derrota en la tanda de penaltis ante los potters.

Veremos si la victoria, por la mínima y sufrida, ante el Dinamo de Kiev de este miércoles en Champions League sirve para dar oxígeno a un equipo que parece ir con las fuerzas justas y el estado anímico algo tocado.

Dominio blue en los números

Aunque sólo están como referencia, los antecedentes más recientes entre Stoke City y Chelsea denotan una superioridad contundente de los segundos. De los últimos 10 partidos disputados en Premier League entre ambos, siete han caído del lado londinense –cinco de cinco en Stamford Bridge y dos en Stoke-on-Trent–, con tan sólo una victoria stokie y dos empates en el Britannia Stadium.

Fàbregas fue el verdugo del Stoke City la temporada pasada. Foto: Daily Mail / Graham Chadwick

En el último partido liguero entre ambos que se disputó en el feudo potter, el pasado lunes 22 de diciembre de 2014, los de José Mourinho se impusieron por 0-2 con tantos del capitán John Terry y de Cesc Fàbregas, si bien el cuadro dirigido por Mark Hughes, como es habitual, impuso una resistencia que sólo el tempranero tanto del central pareció hacer más llevadera.

Cuentas pendientes, reencuentros y prisas. El sábado, a las 18:30 –hora peninsular española– en el Britannia Stadium.

Posibles alineaciones

En el Stoke City causarán baja por lesión Geoff Cameron, Marc Muniesa y Shay Given, mientras que Marco van Ginkel no estará disponible al no poder enfrentarse con el club que posee sus derechos.

En el Chelsea, José Mourinho no podrá contar con Thibaut Courtois ni con Radamel Falcao por lesión. Por otro lado, Branislav Ivanovic es duda hasta última hora.