La Fiorentina tendrá que salir con todo en su viaje a Basilea si quiere seguir vivo en la Europa League. Sin embargo, el partido ante el equipo suizo no tiene nada de sencillo. El equipo de Urs Fischer se encuentra ahora mismo primero de grupo, justo por delante del club viola, pero no puede perder si no quiere complicarse la clasificación. Por su parte, los de Paulo Sousa se encuentran con seis puntos, dos por delante de Lech Poznań y Os Belenenses, que se enfrentan entre sí en el otro partido de la jornada.

Ganar en St. Jakob Park como obligación

El club italiano no puede dejar pasar esta oportunidad, ya que si los polacos o el equipo portugués vencen y la Fiorentina no gana, se la tendrá que jugar en el último partido ante el equipo que dirige Ricardo Sá Pinto. Para ello Paulo Sousa realizó rotaciones en el último partido de liga, ya que dio lugar a jugadores menos habituales como Mario Suárez o Babacar para dar descanso a otros como Kalinić o Iličić, piezas claves en el juego de la Fiorentina. El plan no le salió como esperaba al técnico portugués, ya que en el descanso tuvo que dar entrada al delantero croata para dar la vuelta al 0-2 para el Empoli que imperaba en el marcador en una bochornosa primera parte de la Fiorentina. De hecho, Paulo Sousa incluso cambió su habitual sistema táctico para hacer estas rotaciones y se vio que no funcionó. En tan solo cinco minutos Nikola Kalinić igualó el partido y minutos después mandó el balón al larguero, en lo que podía haber sido el hat-trick y el 3-2 definitivo.

Los violas llegan muy enchufados

La Fiorentina llega al partido de St. Jakob Park en uno de sus mejores momentos de la temporada. Después de la minicrisis que sufrió con tres derrotas seguidas ante el Nápoles, el Lech Poznań y la Roma, parece que los violas han vuelto por sus fueros con cuatro victorias y un empate en los últimos cinco partidos. De hecho, hasta este pasado fin de semana había conseguido cuatro victorias en los últimos cuatro partidos, pero el empate en el derbi toscano le ha frenado la buena racha de victorias. En cambio, los de Urs Fischer llegan al partido ante la Fiorentina después de perder sus dos últimos partidos de liga ante el Grasshopper en casa (2-3) y el St. Gallen fuera (2-1). En cuanto a la Europa League, los suizos han ganado todos los partidos excepto uno, en el que el Os Belenenses asaltó el feudo del Basilea ganando 1-2.

El 1-2 de la ida, el único precedente

En el último enfrentamiento entre ambos equipos los de Fischer consiguieron ganar 1-2 en el estadio Artemio Franchi en el primer partido que ambos jugaban esta temporada en Europa League. Los violas se adelantaron en el marcador gracias a un gol de Kalinić, pero la expulsión por roja directa de Gonzalo Rodríguez cambió totalmente el guion del partido y en tan solo ocho minutos el Basilea remontó un partido que la Fiorentina iba ganando desde el minuto 4 gracias a los goles de Bjarnason y Elneny. Antes de este partido, ninguno de los dos equipos se habían enfrentado entre ellos, así que el partido en el St. Jakob Park será el segundo enfrentamiento de la historia entre ambos conjuntos.

El partido, además, tiene el aliciente de la vuelta de Paulo Sousa a la que fue su casa durante la última temporada después de llegar del Maccabi Tel Aviv. En el club suizo el entrenador portugués solamente consiguió la liga suiza y al terminar fichó por el club viola después de la extraña salida del actual entrenador de la Sampdoria, Vincenzo Montella. Así pues, el partido tiene todo lo necesario para ser un encuentro atractivo y no dejar indiferente a nadie.

Posibles alineaciones