El partido comenzó con dominio del Bayer Leverkusen que estaba jugando con un 4-2-2-2 con Mehmedi y Chicharito, y empezó presionando arriba a un Schalke que se mantenía replegado con un 4-4-2 con Chupo-Moting escorado en banda izquierda, y que no conseguía mantener la pelota controlada. El ritmo de intensidad estaba siendo muy bajo, y el cuadro local trataba de crear peligro lanzando balones largos a la espalda de los centrales, mientras que el conjunto minero estaba saliendo al ataque con las líneas muy juntas.

Controlar el partido sin descuidar la defensa

Después del primer cuarto de hora, el equipo de Roger Schmidt siguió dominando la pelota y atacando por la banda derecha en la que no encontraba fluidez, pues el Schalke estaba acumulando muchos jugadores, y estaba volcando las dos líneas de cuatro sobre su banda izquierda. Además de la banda derecha, el centro también estaba siendo un blanco de ataque para conjunto de la aspirina, que no estaba consiguiendo meterse en el área rival combinando, ante un conjunto azul que esperaba una recuperación de balón para salir al contraataque. 

En el último tramo de la primera parte, el Leverkusen siguió dominando la pelota, aunque perdió bastante continuidad a la hora de atacar, mientras que el Schalke empezó a abrirse más cuando los extremos se separaron del doble pivote, aunque en defensa estaban faltos de contundencia, pues los atacantes locales conseguían incrustarse entre los centrales rivales con mucha facilidad. Los delanteros del conjunto visitante, estaban teniendo trascendencia en el partido, ya que no conseguían entrar en contacto con la pelota ante unos defensores locales bastante seguros que apenas habían cometido errores. En los últimos instantes, la escuadra visitante se posicionó en algunos momentos con un 5-3-2.

A hacer frente a las adversidades

El segundo tiempo comenzó con dominio de balón del Schalke en los primeros minutos ante un Bayer Leverkusen que se mantenía replegado en su campo y que estaba siendo agresivo. El 0-1 del Schalke llegó por medio de Chupo-Moting que definió de primeras ante Leno después de recibir un pase al espacio de Leon Goretzka. Después del gol, el ritmo de intensidad subió en el partido, y el cuadro local trató de imponerse en el partido ante un rival “rebelde” que tenía la situación controlada y que estaba acercándose al área rival. En ese momento, el gran peligro del conjunto de Roger Schmidt estaba siendo las diagonales de Bellarabi que estaba jugando en punta, y estaba recibiendo de Mehmedi que estaba realizando conducciones por dentro, mientras que los visitantes estaban encontrando espacios para salir a la contra por la bandas.

En el segundo tramo de la segunda parte, el cuadro rojinegro trataba de recuperar el control de la situación, con Kramer que estaba bajando a recibir, para sacar la pelota jugada ante un rival que estaba teniendo la pelota en campo rival, y que estaba neutralizando al Bayer Leverkusen que no conseguía salir con la pelota jugada fluidamente de su campo. El conjunto de Roger Schmidt estaba intentando salir a la contra, frente a un Schalke que en alguna jugada estaba realizando las transiciones defensivas con mucha lentitud. En ese tramo de dominio “pitufo”, el equipo local estaba formando con un 4-2-3-1 con Chicharito de único delantero centro, aunque ni con esas estaba consiguiendo crear ocasiones.

En el último tramo de partido, el dominio de la pelota fue del Bayer Leverkusen que se estaba acercando al área con cierta claridad, aunque el Schalke se mantenía tranquilo y seguro en defensa, pues estaba consiguiendo alejar la pelota de su área sin dificultades. El empate a 1 llegó por medio Riether que marcó en propia meta tras un centro desde la derecha. Después del gol, el conjunto local siguió dominando, ante un cuadro minero que se resistía a empatar un partido que ha ido ganando durante 35 minutos.

Justo empate en el Bay Arena, en un partido que el Schalke controló en la segunda parte.