Desde el Barcelona hasta el Bayern de Munich, pasando por el Real Madrid o el Chelsea, al Benfica le esperaba un duro sorteo de octavos de final de Champions League. Su derrota en Lisboa frente al Atlético de Madrid le hacía perder el liderato tras cinco jornadas comandando su grupo. Un segundo puesto, el equipo a la sombra que tendría que vérselas con un cabeza de serie.

Fue por ello que desde el Estádio da Luz se cruzaron los dedos para esperar un sorteo propicio. Y la verdad es que, para los equipos que le podrían haber tocado a Benfica, se puede mirar este emparejamiento con bastante optimismo. El conjunto encarnado se las tendrá que ver con el Zenit de San Petersburgo, el buque insignia de la Russian League.

Como si de una embajada en Rusia se tratara, el Zenit tiene en sus filas a una multitud de jugadores o bien portugueses o que ya han despuntado en la Liga Portuguesa. Gran cantidad de futbolistas fabricados en el país luso e incluso del cuerpo técnico. Es por ello que este Zenit tiene mucho más peligro del que el aficionado se pueda imaginar. Salieron triunfantes de un grupo engañoso, donde se sobrepusieron al Valencia, Olympique de Lyon o Gante. Tan sólo una derrota en seis partidos en la fase de grupos, una menos de las dos que recibió (Fotografía: UEFA).

André Villas-Boas, viejo enemigo del Dragão

Estaba claro que Villas-Boas y Benfica estaban condenados a volver a encontrar tarde o temprano. El de Porto lleva desde 2013 entrenando en Rusia pero en la cabeza de muchos está el triplete de trofeos que se llevó de Portugal entrenando a los dragones. En las filas del Oporto, el actual técnico del Zenit cosechó una Liga Portuguesa, una Taça de Portugal y una Supertaça Cândido de Oliveira. Tan sólo le faltó la Taça da Liga, competición dominada precisamente por Benfica.

Lejos de los banquillos del Dragão (58 partidos entrenados al Porto), Villas-Boas también se hizo un nombre en los banquillos de Portugal en Coimbra, dirigiendo al Académica en una treintena de partidos. Antes, el técnico acompañó a José Mourinho como segundo entrenador en su etapa en el Inter de Milán, donde los italianos se hicieron con una Champions League.

Villas-Boas ya destacó en los banquillos del Dragão y Académica

Ahora, en las filas del Zenit, Villas-Boas ha dirigido 84 encuentros, donde ha ganado una Russian League y también una Supercopa rusa. El técnico portugués ha conseguido que el equipo sea el auténtico dominante en el país siberiano. Las inversiones multimillonarias que ha realizado su presidente, Aleksandr Dyukov, también han ayudado. Pero lo importante es saber que el Zenit tendrá el mismo estilo de juego que tuvo el Porto de Villas-Boas en la temporada 2010/11 (Fotografía: Daily Mail).

Ezequiel Garay, argentino y encarnado en la zaga

Pese a que la selección argentina de Gerardo Martino se caracteriza por su explosiva y letal delantera, lo que se le achaca a la Albiceleste es su desigualdad en la línea defensiva. En la zaga, no existen demasiados jugadores de talla mundial capaces de hacerse un hueco en el panorama internacional. Entre esa nube de defensas argentinos que se quedan en su mitad de proyección, pocos hombres son la excepción. Uno de esos centrales es Ezequiel Garay. A sus 29 años, el defensa rosarino puede presumir de haber jugado en el Real Madrid y también en Benfica, equipo con el que se volverá a ver las caras.

Garay se ha consolidado tanto en la selección como en el Zenit

Curiosamente, es el conjunto encarnado el equipo donde más partidos ha jugado en toda su carrera. 31 con el Real Madrid, 63 ahora con el Zenit, 97 en el Racing de Santander...y hasta 135 con el Benfica. Es sin duda uno de los jugadores que más huella ha dejado en el Estádio da Luz en los últimos años. Luisão, Jardel y ahora Lisandro López han logrado hacer olvidar al central argentino, pero será muy difícil ver en Lisboa a un central con sus características.

Tanto Jonas como Raúl Jiménez y Kostas Mitroglou sufrirán a Garay sobre todo en el juego aéreo. El jugador aprovecha al máximo sus 1,88 metros de altura para llegar a cada balón colgado al área. Además, su buen juego con los pies le permite comenzarlas jugadas con enorme facilidad. Sin duda, uno de los regresos más esperados al Estádio da Luz (Fotografía: SL Benfica).

Luís Neto, central en la sombra

El caso de Luís Neto es bastante especial. Salió de Portugal sin haber pasado siquiera por ninguno de los cuatro grandes del país. Eterna promesa del Varzim, el central portugués destacó sobre todo en las filas del Nacional de Madeira. Con el equipo albingero, Neto se consolidó como uno de los centrales aspirantes a la seleçao. De hecho, el jugador ya sabe lo que es vestir los colores de la selección absoluta. Debutó en febrero de 2013, y de momento ya suma once internacionalidades.

Su última temporada en Varzim y el único año que estuvo en Funchal atrajo la atención ya no sólo de los grandes de Portugal, sino de bastantes equipos de fuera de la Península. Fue por ello que el jugador decidió dar el salto, y su destino fue Italia. En las filas del Siena, Neto tan sólo estaría una temporada, pero lo suficiente para seguir con la buena dinámica de rendimiento. Y del país translalpino al siberiano. Llegó a San Petersburgo en verano de 2012, y a partir de ahí no ha parado de crecer. 

Ha llegado hasta tal punto que a estas alturas de la temporada ha jugado veinte partidos, más que en toda su primera temporada en el Zenit. Se ha convertido en un pilar imprescindible para Villas-Boas. En Champions, ha jugado todos los partidos de la fase de grupos, siendo además titular en la mitad de ellos. Ya no es un novato, y la línea ofensiva de Benfica no lo tendrá nada fácil (Fotografía: UEFA).

Danny, el eterno capitán fabricado en el Alvalade

Venezolano de nacimiento pero luso de nacionalidad y corazón, Danny es alma de este Zenit. A sus 32 años, es el capitán y la cabeza visible en el vestuario. Se formó en Funchal, siendo uno de los mejores canteranos de la historia reciente del Marítimo. Muy joven se encontró con la tentativa oferta del Sporting de Portugal y naturalmente no la rechazó.

Velcocidad, regate, llegada, olfato goleador...y sobre todo polivalencia. Atributos que sin embargo no encontraron sitio en el Sporting. Turnó cesiones en el propio Marítimo y ante la falta de confianza, dio el salto a Rusia. Para llegar a San Petersburgo y hacerse un hueco en el Zenit, primero tuvo que hacerse un nombre en la Russian League. Moscú fue su destino, defendiendo los colores del Dinamo.

Y al fin, tras cuatro años, el Zenit le dio la oportunidad y a partir de ahí no ha hecho más que coger galones. Puede jugar tanto en la mediapunta como de extremo e incluso lateral, como ya lo hizo con Portugal. Además, Villas-Boas se ha atrevido a ponerlo como referencia goleadora. Algo que ahora se antoja poco probable, puesto que el 'nueve' del equipo está siendo Artyom Dzyuba. 35 encuentros ha disputado con Portugal, y no es ni mucho menos casualidad (Fotografía: AFP//Getty Images).

Javi García, de Lisboa a Rusia pasando por Manchester

Si hay algo que ha tenido la cantera del Real Madrid de principios de siglo, es la gran cantidad de buenos futbolistas que no han encontrado sitio en el primer equipo. Jugadores como Portillo, Álvaro Negredo o Roberto Soldado saben lo que es esta situación. También Javi García, que pese a destacar en las categorías inferiores del club blanco y habiendo debutado incluso en el primer equipo, no tuvo sitio en el Bernabéu y salió del club.

Llegó al Estádio da Luz en 2009, y a partir de ahí se hizo con la titularidad hasta su marcha a Manchester. Superó la treintena de partidos en las tres temporadas que estuvo en las filas del Benfica. Hizo del doble pivote suyo, y junto a Nemanja Matic fue el motor de los encarnados en varios partidos. También coincidió con el belga Axel Witsel, compañero ahora en el Zenit.

Esta temporada lleva ya 22 partidos jugados, anotando un único gol. Es un jugador corpulento, ideal para comenzar las jugadas y también para cortar las de rival. Su estilo de juego se puede equiparar al de Andreas Samaris o el de Lubjomir Fejsa, dos de los pivotes que tiene el Benfica en esta temporada (Fotografía: AFP//Getty Images).

Axel Witsel, la magia belga forjada en Lisboa

Y cuando los millones llegaron al Estádio da Luz, Witsel no lo dudó. Antes de llegar la jugosa oferta del Zenit, el jugador belga destacó en Portugal en las filas del Benfica. Poco hay que decir de un jugador con sus cualidades. Intocable para Marc Wilmots en el selección belga, Witsel puede jugar tanto en el doble pivote como de mediapunta y también de centrocampista creativa.

Todo un todocampista con ya 60 partidos como internacional a sus espaldas y con una dilatada experiencia en Portugal pese a tener solo 26 años. En el Estádio da Luz participó en poco más de 50 partidos, pero suficientes para enamorar a la afición encarnada. Benfica se trajo al jugador por apenas nueve millones del Standar de Lieja y cuando el Zenit llamó la puerta, los lisboetas exigieron mínimo 40. Parece ser que esa cantidad era asequible para el equipo ruso, pues no se lo pensaron dos veces.

De los cinco partidos en los que ha participado en esta fase de grupo de la Champions, Witsel lo ha jugado todo. Se perdió la última jornada ante el Gante por acumulación de tarjetas y el equipo lo notó. De hecho, fue en ese partido donde el Zenit sumó su única derrota hasta la fecha (2-1). Otro viejo conocido que volverá a la que fue su casa (Fotografía: Sport Witness).

Hulk, la bestia negra de los encarnados

Siempre fiel a su cita con el fútbol del máximo nivel, Hulk es el jugador estrella del Zenit. No sólo su máximo goleador, sino la referencia ofensiva del conjunto ruso y por donde pasan todas las jugadas ofensivas del equipo pasan por el brasileño. No es de extrañar, la cantidad de millones que el equipo depositó en las arcas del Estádio do Dragão fueron increíbles e inimaginables para los expertos en el fútbol.

El rendimiento de Hulk solo se puede equiparar al de los mejores del planeta

Por 55 millones de euros, Hulk dejó Porto para poner rumbo a Rusia. En el conjunto del Dragão, Hulk jugó la friolera de 169 partidos, donde marcó 78 goles y repartió 60 asistencias. Unos números completamente abismales que despertaron el interés de medio mundo. Lo que muy pocos saben es que para llegar hasta shí, Hulk incluso tuvo que jugar en la muy poco conocidad Liga Japonesa. En las filas del Tokyo Verdi y también en las del Kawasaki Frontale, Hulk ya demostraba sus cualidades.

Una velocidad envidiable que combine con una potencia increíble. Un físico que muy pocos poseen combinado con los dos obuses que tiene en las piernas. Tampoco escatima en regatear, tiene un muy buen juego con las piernas y destaca sobre todo por su disparo desde fuera del área. Las opciones de clasificación de Benfica pasan sin duda por parar a Hulk. Ya causó estragos a los encarnados con la camiseta del eterno rival, así que habrá estar muy atentos (Fotografía: AFP//Getty Images).

Así es. Dentro de la suerte de enfrentarse al Zenit, Benfica tendrá que tener mucho, muchísimo cuidado con el conjunto ruso. Ya ha demostrado todo su potencial y aún está por ver lo que puede hacer a la hora de la verdad. La clave estará en la experiencia de Benfica en este tipo de competiciones. El Porto fue capaz de llegar con opciones de clasificación para semifinales de Champions, el tiempo dirá si los de Rui Vitória pueden repetirlo.