El Liverpool terminó victorioso en su viaje a Stoke para el primer juego de la semifinal de la Capital One Cup. Un gol de Jordon Ibe en la primera mitad fue suficiente para separar a ambas escuadras y darle a los de Merseyside la mínima ventaja de cara a la revancha. El mediocampista, que sustituyó a Philippe Coutinho cuando el brasileño sufrió una lesión, definió el partido en el minuto 37 de la primera parte, dominada por los visitantes.
Los potters mejoraron para el complemento pero no lograron causar verdadero peligro en el arco defendido por Simon Mignolet y una decidida zaga red, que debió valerse de Lucas Leiva jugando como central en lugar de Dejan Lovren, quien también dejó el campo por lesión.
Aún así, los locales pudieron igualar los cartones en la última jugada del encuentro, cuando Peter Crouch bajo un balón aéreo en dirección de Jon Walters, el ariete disparó cruzado pero envió el balón muy desviado del arco scouse justo antes del silbatazo final de Anthony Taylor.
No obstante, la moneda está en el aire y esta eliminatoria podría ser para cualquiera. Los potters viajan a Anfield Road el 25 de enero para intentar robar el boleto a la final de las manos reds en el segundo partido de la eliminatoria.
Dominio visitante
Los locales saltaron al terreno de juego con la misma alineación que ha disputado los últimos cuatro partidos, mientras que la visita hizo tres cambios respecto al once que cayó ante el West Ham, con Christian Benteke relegado al banquillo y Adam Lallana, Kolo Touré y Joe Allen en la oncena titular.
Los reds salieron a robarse la noche desde el principio con un juego ofensivo e intenso en el último tercio del terreno de juego y causaron problemas a la zaga del Stoke desde el primer minuto. Roberto Firmino fue el primero en probar al meta local con un disparo potente que Jack Butland pudo contener. Inmediatamente después, Lallana puso a trabajar al portero de nueva cuenta con un intentó que el cancerbero debió rechazar a una mano.
Parecía, sin embargo, que la suerte daba la espalda al Liverpool temprano en el partido. Con menos de 20 minutos disputados, Jürgen Klopp debió sustituir a Philippe Coutinho por una lesión. El elegido para tomar su lugar: Jordon Ibe. Sin saberlo, el estratega alemán había decidido el juego.
Pese a la baja de su principal creador, el Liverpool siguió dominando a placer. El tridente ofensivo del Stoke: Bojan Krkic, Xherdan Shaqiri y Marco Arnautovic batalló para generar ocasiones en terreno scouser y cuando al fin lo lograron, Bojan dejó ir una ocasión tras un tiro de esquina raso.
La visita sufrió otro golpe inesperado cuando Lovren también dejó el terreno de juego por lesión al minuto 35, pero finalmente la suerte le sonrió a los reds un par de minutos más tarde. Lallana envió un servicio desde la derecha, Allen no logró rematar y la esférica llegó hasta Ibe en el segundo poste. Ibe disparó cruzado para dejar sin oportunidad a Butland y abrir el marcador.
El Stoke estuvo cerca de igualar cerca del descanso a través de un cabezazo de Arnautovic que se fue desviado y un intento de Glen Johnson que fue contenido por Simon Mignolet.
Poco que contar
Para la segunda parte, Mark Hughes decidió enviar a la cancha a Jon Walters, héroe en la eliminatoria ante el Chelsea, en lugar de Geoff Cameron y los locales lucieron más peligrosos al frente.
Sin embargo, los potters no pudieron generar ocasiones de peligro constantes, mientras el Liverpool estuvo cerca de duplicar su ventaja. Primero con un balón rechazado por Butland que rebotó en Firmino y fue a parar a las manos del cancerbero y después con un un disparo de James Milner que fue rechazado sobre la línea de meta.
La última oportunidad del juego fue para los locales que, en su desesperación, recurrieron a pelotazos largos. Uno de esos envíos fue peinado por Crouch, Walters encontró la esférica y disparó desviado del arco de Mignolet. Taylor dio por terminado el encuentro con victoria para el Liverpool pero la eliminatoria todavía está abierta y podría ser para cualquiera. Aunque el Stoke deberá presentar una mejor versión el próximo 26 de enero en Anfield.