Flojo Manchester City que no es capaz de jugar a su nivel fuera de casa, esta jornada ha salvado un punto en uno de los campos más complicados: Upton Park. El West Ham de Slaven Bilic salió ante los citizens con todas sus armas, un equipo con mucho músculo en el centro del campo y velocidad en ataque, buscando siempre las transiciones rápidas.

A pesar de las bajas de dos de sus jugadores más importantes, Andy Carroll y Lanzini, los Hummers han conseguido crear varias ocasiones de gol a una defensa que desde la baja de Kompany hace aguas.

Parecía imposible, pero, por fin, Manuel Pellegrini sentaba a Sterling, que está realizando una temporada muy por debajo de su nivel, siendo incapaz de demostrar que vale los 80 millones de libras que el Manchester City pagó al Liverpool por él.

En lugar del inglés, jugaba Jesús Navas. El sevillano se situaba en la banda derecha y desplazaba a Kevin de Bruyne a su lado natural, el izquierdo, pese a esta variación táctica, tanto Navas como el belga fueron incapaces de provocar ningún peligro a la defensa del West Ham.

A su vez, el entrenador chileno optó por Fabian Delph en vez de Fernandinho, buscando un centro del campo con un corte más defensivo para poder frenar los contraataques del West Ham. El inglés aparte de un disparo al palo a los diez minutos de comenzar la segunda parte, no apareció en el partido.

10 primeros minutos de puro espectáculo

A los 50 segundos de que el árbitro pitara el inicio del partido, Kouyate lograba con su poderoso arranque meterse dentro del área ponía un pase que golpeaba en la espalda de  un defensa y dejaba una ocasión clara de gol a Enner Valencia que ejecutaba brillantemente.

El City no se vino abajo y comenzó atacar, creando en muy pocos minutos varias jugadas de gol. Entre ellas, una vaselina del Kun Agüero que se estrellaba contra el larguero.

Al minuto siguiente, el delantero argentino lograba bajar un balón dentro del área, el lateral de los Hummers llegaba tarde y hacía una zancadilla a la estrella del City. El árbitro señaló penalti y Agüero anotaba un tanto que devolvía el empate al marcador.

Baja el ritmo desaparecen las ocasiones

Tras lograr el empate, el City, ya más relajado, comenzaba a tocar buscando posesiones más largas. Los pases no venían acompañados de ocasiones y el West Ham cada vez estaba más a gusto en el campo.

Los minutos pasaban y el partido se desarrollaba más en el centro del campo que en las áreas de ambos equipos. Los 3 de arriba de los Hummers buscaban aprovecharse de la blandengue defensa citizen, principalmente de Demichelis, que a sus 35 años se encuentra muy lejos de su mejor nivel.

Y era en el minuto 33 cuando en una contra del West Ham, el central argentino se jugaba la expulsión con una entrada muy dura a Dimitri Payet, que finalmente se quedaba en tarjeta amarilla.

La segunda parte comenzaba como la primera, tras un disparo al palo de Delph, el West Ham salía rápida al contrataque, el balón salió fuera de banda, Antonio sacaba rápidamente y dejaba a Valencia solo contra Hart, que se escabullía sin problemas de una defensa dormida. El equipo londinense volvía a ponerse por delante.

Mientras, el Manchester City no conseguía llegar a la portería de Adrián y los jugadores con más talento no aparecían en el partido.

Acoso citizen

Con 2-1 en el marcador y ante la falta de ocasiones de su equipo, Manuel Pellegrini sacaba al campo todas sus armas, en el minuto 66 entraba Raheem Sterling por Jesús Navas, también en el 75 se iba el medio centro Fabian Delph y entraba el delantero nigeriano, Iheanacho.

Con tantos atacantes en el campo, el City comenzaba a llegar con más facilidades a la portería rival. En el minuto 80, tras un par de pases entre Agüero y el Iheanacho, y una pizca de suerte con un rechace, el delantero argentino volvía a marcar y empatar el partido.

Con 2-2 y el West Ham cada vez más atrás, Pellegrini quitaba a David Silva y metía en su lugar a Fernando, un cambio defensivo buscando asegurar el empate y no ir a por la victoria pese a que eran los mejores minutos del City en la segunda.

Con este cambio terminaba el partido, el West Ham demostrando una vez más que su objetivo este año debe ser acabar en puestos europeos y un Manchester City que cada vez se aleja más del campeonato.