Los Portland Timbers se llevaron este enfrentamiento de la Cascadia Cup, gracias a que supieron aprovecharse de los errores defensivos de su rival. La primera mitad tuvo minutos de control para ambos equipos, pero fueron los locales los que consiguieron adelantarse en el marcador, después de dos errores de los centrales rivales. La segunda mitad fue claramente de dominio visitante, pero los Timbers supieron aguantar en defensa y cerrar el partido en las pocas acciones que generaron.

Si fallas, lo pagas

Este partido de la Cascadia Cup no pudo tener mejor inicio para el conjunto local, ya que en apenas tres minutos consiguió adelantarse en el marcador. Kah cometió un error que le costó a su equipo la pena máxima en contra. Diego Valeri fue el encargado de transformarla y poner a su equipo en ventaja. Este gol lleno de moral a los Timbers, que mantuvieron durante los siguientes minutos a su rival en campo propio, sin apenas posibilidades de salir con el balón jugado.

LeyendaValeri anota de penalti (Imagen: usatoday.com)

El conjunto canadiense estaba consiguiendo salir poco a poco del dominio de su rival, con desplazamientos en largo, que además de tratar de sorprender a su rival, les daba la oportunidad de adelantar unos metros sus líneas.

No fue hasta mediada la primera parte que los Vancouver Whitecaps consiguieron imprimirle mayor velocidad a si juego, lo que les permitió poner en apuros a su rival en una par de ocasiones. La más clara fue una mano a mano de Kekuta Manneh con el portero, que no logró definir con éxito.

Pero el fútbol no es justo, nunca, y cuando peor momento estaba pasando el Portland Timbers, consiguieron ampliar su ventaja. Un fallo de Waston en el interior del área fue aprovechado por McInerney, que con un gran movimiento de delantero, superó al guardameta con un disparo cruzado.

McInerney consiguió un gran gol  (Imagen: usatoday.com)

A partir de ese momento y hasta la finalización de los primeros 45 minutos, los dos equipos igualaron sus fuerzas, y ninguno de ellos pareció ser superior a su rival. Tan sólo los saques  de esquina fueron las llegadas más peligrosas en estos minutos.

De ida y vuelta

Al inicio de la segunda mitad, los canadienses consiguieron aprovechar el primer acercamiento sobre la portería de los locales. Una jugada en el borde del área bastante embarullada, finalizó con un disparo de Manneh que golpeó en un defensor, lo que despistó al guardameta e introdujo el balón en el interior de la red. Este gol le dio alas a los canadienses que en los siguientes minutos asedió a su rival, con constantes ocasiones que la defensa no tuvo problemas para despejar.

Manneh recortó distancia (Imagen: usatoday.com)

La primera llegada de peligro real de los Portland Timbers no llegó hasta caso la hora de partido, en un balón que McInerney controló en el vértice del área grande y disparó a la escuadra más alejada, pero el portero realizó una espectacular atajada.

Mediada la segunda mitad, el dominio de los Whitecaps pasó a ser aplastante, lo que llevó al entrenador a introducir dos delanteros, que les permitiera gozar de mayor número de ocasiones o para estar más acertados de cara al gol. Esto hizo que los Timbers tuvieran que buscar los contraataques para acercarse a la meta de su rival.

Cuando apenas quedaban 15 minutos para la finalización del encuentro, el equipo local dio un paso casi definitivo para llevarse la victoria. Kah volvió a cometer un fallo en su propia área, al golpear el balón con el brazo. Dairon Asprilla fue el encargado de transformar la segunda pena máxima, colocando dos goles de ventaja en el marcador.

Minutos más tarde, los locales volvieron a aumentar la ventaja en el marcador con un gran tiro libre directo que se cobró Darlington Nagbe, desde el borde del área. Pero el partido no finalizó ahí y unos minutos después, el colegiado señalaría el tercer penalti del partido, por un dudoso derribo de Ridgewell. El encargado de recortar distancias en el marcador para los canadienses fue el chileno Morales.

Jugadores de Portland celebran la victoria (Imagen: usatoday.com)

El tiempo restante a la finalización del encuentro fueron llegadas constantes, a causa de que ambos equipos olvidaron las labores defensivas. En el tiempo de descuento, Waston vio la tarjeta roja por conducta antideportiva. Pero el marcador no se movió y los Timbers se llevaron los tres puntos.

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Sobre el autor
Manuel Vaquero Rodríguez
Apasionado del deporte rey. Disfruto con todo lo que tenga que ver con el fútbol, ver, escuchar, jugar, escribir. Entrenador de fútbol base, disfruto enseñando, pero más aprendiendo. Un buen entrenador es aquel que se hace así mismo, de campos de tierra a grandes estadios. Amante del fútbol internacional y poder descubrir jugadores desconocidos.