No ha sido una semana fácil en Southampton. El equipo atraviesa un irregular sector de la temporada, combinando grandes triunfos con derrotas inexplicables, lo que tienen al equipo en un puesto por debajo de los esperado en liga, aunque sin mostrar un mal juego, y con vida en Europa League, donde se juega el pase a la siguiente ronda en el duelo ante el Hapoel Be’er Sheva, cuya previa ya se palpita en el sur de Inglaterra.

Uno de los que mira este encuentro de forma especial es el adiestrador francés Claude Puel. El estratego del Southampton sabe que su equipo ha fallado durante los últimos partdios, y espera que en este duelo ante el equipo israelí, puedan mostrar de lo que son capaces verdaderamente.

“Debemos corregir todo aquello que sea posible, analizar el último partido y prepararse de la mejor forma para este jueves, porque es un partido imporante”, señaló.

De esta forma, el entrenador de los saints busca motivar a sus pupilos, que seguramente tomaron como un gran golpe el resultado poco decoroso del fin de semana. Sin embargo, los ánimos son altos y la idea de asegurarse la clasificación mantiene las esperanzas en varias de las figuras del equipo.

Durante los últimos días, tanto Oriol Romeu como Virgil van Dijk han saltado en defensa del proyecto de Puel y han apuntado al duelo contra el Hapoel en St. Mary’s como la instancia ideal para generar nuevamente un buen momento de forma, más acorde con el nivel de juego que el equipo ha desplegado sobre el campo de juego.

“Debemos jugar para ganar”, fueron las palabras del dominante central holandés, mientras que Romeu apuntó que “ya hemos demostrado que nos podemos volver a poner de pie con antrerioridad”.

Así se viven en Staplewood los momentos previos a un duelo trascendental en la historia de este equipo, que logró completar la misión de llegar al fútbol europeo, y ahora no quieren despertar de un largo sueño. Al frente, estará la revelación del campeonato y uno de los buenos equipos que tiene esta competencia, por lo que la misión no será fácil, pero tanto el entrenador como los jugadores se han mostrado comprometidos con la causa, y buscarán mantener al Southampton en Europa.