La Fiorentina supo sufrir para llevarse los tres puntos de su propio estadio. Los de Paulo Sousa consiguieron ponerse 2-0 por delante en la primera parte, pero cuando más controlado tenían el partido Acerbi reducía diferencias y anotaba el 2-1. Finalmente los violas aguantaron el resultado hasta el final del partido y siguen sin perder en el Artemio Franchi, algo que no hace desde abril.
Paulo Sousa se vio obligado a realizar algunos cambios por las bajas de jugadores como Nenad Tomović o Borja Valero, aunque Gonzalo Rodríguez recuperaba la titularidad después de cumplir su partido de sanción. El centrocampista español se resentía de unas molestias y no era ni siquiera convocado para el encuentro ante el Sassuolo mientras que el defensa serbio no podía jugar por sanción. Además, Federico Chiesa volvía a ser titular después de marcar el gol de la victoria de los violas en el último encuentro de Europa League. Por su parte, el equipo de Reggio Emilia acudía al Artemio Franchi con numerosas bajas como las Domenico Berardi, Timo Letschert, Alfred Duncan, Matteo Politano o Davide Biondini. Eusebio Di Francesco salía con su habitual 4-3-3 con Defrel como delantero centro, acompañado de Ragusa y Ricci en las alas.
Kalinić adelanta a la Fiorentina
La primera parte se mostraría muy atractiva. Los dos equipos estaban dispuestos a presionar la salida del balón para que su rival no jugase con comodidad, lo que provocó numerosos errores. Además, ni la Fiorentina ni el Sassuolo especulaban y se iban al ataque cada vez que lo veían posible. De hecho, la primera ocasión de peligro no tardaría ni siquiera dos minutos en llegar. Josip Iličić tenía la oportunidad una libre directo desde una buena posición, pero su disparo se marchaba rozando la escuadra de la meta de Consigli.
Los de Eusebio Di Franceso no se amilanaron y aparecían en la siguiente jugada por las inmediaciones del área viola. El encuentro se convirtió en un ida y vuelta y era la Fiorentina quien finalmente encontraba el premio del gol a los diez minutos de juego. Iličić disparaba otra falta, pero esta vez el balón rebotaba en la barrera. Badelj rifaba la pelota al aire con la fortuna de que le caía a Nikola Kalinić, que de primeras disparaba de volea ante el desconcierto de la defensa del Sassuolo y de Consigli para anotar el primer tanto del encuentro.
El gol del ex del Dnipro no hizo más que espolear a los chicos de Eusebio Di Francesco. Muy pocos minutos después Gonzalo Rodríguez perdía el balón al intentar sacarlo jugado y Defrel se hacía con él. El delantero francés conducía hasta la frontal del área y disparaba, pero la pelota se iba rozando el poste. El Sassuolo reaccionaba de manera fulgurante al 1-0 y avisaba de que había ido al Artemio Franchi para sacar algo.
Los neroverdi no se achantan ante el gol de los violas
De hecho, cinco minutos después, los neroverdi volvían a tener una oportunidad de oro para poner el empate en el marcador. Tătărușanu fallaba en su salida en un saque de esquina y el balón finalmente volaba hacia la cabeza de Acerbi, pero el guardameta rumano se resarcía de su error y llegaba a tiempo para evitar que el cabezazo picado del defensa italiano acabase en gol.
A partir de ese momento, el encuentro no perdió intensidad, pero las oportunidades comenzaron a escasear para ambos equipos. Chiesa seguía siendo un puñal por la banda derecha del ataque viola y Defrel creaba peligro cada vez que se hacía con la pelota en los aledaños del área de la Fiorentina. El ida y vuelta continuó, pero la precisión de los primeros minutos fue desapareciendo poco a poco.
Conexión eslavo-italiana en el Artemio Franchi
El Sassuolo estaba poniendo en aprietos a la Fiorentina, pero los violas estaban aguantando muy bien la presión de los neroverdi. No obstante, cuando los futbolistas del ataque viola se juntaban (Chiesa, Bernardeschi, Iličić y Kalinić), daba la sensación de que era más probable el segundo tanto de los toscanos que el ansiado gol del empate del Sassuolo.
Y en una de esas jugadas en las que la Fiorentina tocó, tocó y tocó hasta que encontró a uno de esos jugadores de ataque -en este caso, Federico Chiesa-, llegaba el segundo gol del partido para la Fiorentina. Después de una gran jugada de elaboración, Chiesa recibía en la esquina derecha del área. El joven futbolista italiano intentaba regatear a su defensor, pero finalmente decidía hacer un centro raso hacia el corazón del área para que Nikola Kalinić, con un movimiento fantástico, se adelantase a su marcador y marcase el 2-0 con un soberbio taconazo.
Al igual que con el 1-0, el Sassuolo supo reaccionar casi de inmediato, pero esta vez era Tătărușanu quien evitaba que Ricci acortase distancias tras hacerse con un rebote de un tiro de Gazzola. Con la victoria momentánea de la Fiorentina se llegaba al descanso, aunque el Sassuolo quizá no se había merecido ir perdiendo por una diferencia de dos goles al descanso por el buen juego mostrando durante la primera mitad.
La Fiorentina controla; mala fortuna para el Sassuolo
El segundo tiempo tendría un guion totalmente diferente al del primero. El Sassuolo, que, pese al resultado, había acabado la primera parte agobiando a los violas, no aguantó, se vino abajo y fue de más a menos. La Fiorentina se hizo con el control del balón y consiguió aminorar casi en su totalidad la presión de los neroverdi.
El partido parecía más cerca de la sentencia, con un posible tercer gol de los chicos de Paulo Sousa, ya que el Sassuolo no era capaz de despertar del letargo con el que había entrado a la segunda mitad. Además, las malas noticias llegaban en cascada para Eusebio Di Francesco, ya que en una diferencia de apenas diez minutos, el técnico del Sassuolo se veía obligado a hacer dos cambios por sendas lesiones: primero Mazzola y más adelante Magnanelli eran sustituidos por Lirola y Mazzitelli respectivamente.
La Fiorentina vio una oportunidad en la distracción del Sassuolo por la lesión de su capitán y a punto estuvo de marcar el 3-0 y sentenciar el encuentro. El balón rebotaba tras una gran presión de Vecino en el centro del campo y Tello, que había entrado cinco minutos antes por Iličić, aceleraba a por él hasta recogerlo y conducir hasta dentro del área. El ex del Oporto se plantaba solo ante Consigli, pero su disparo se marchaba demasiado cruzado y perdía una oportunidad única para marcar el tercer gol de los violas.
Acerbi marca el 2-1 y reduce diferencias
Los de Eusebio Di Francesco no eran capaces de rehacerse y los violas parecían amos y dueños del partido. La victoria parecía cerrada para los de Paulo Sousa, pero todo cambiaría pocos minutos después de la gran ocasión desperdiciada por Cristian Tello. Como no podía ser de otra forma, el Sassuolo consiguió encerrar a la Fiorentina en un saque de esquina, y así anotar el gol de la esperanza. Tătărușanu volvía a fallar en su salidad y tras una serie de rebotes, el balón le caía a Acerbi, que remataba de primeras y el balón se colaba por debajo de las piernas de Milan Badelj para meterse en la portería.
El gol del defensor del Sassuolo azuzó a los jugadores neroverdi y en los últimos quince minutos los de Eusebio Di Francesco lograron meter miedo a la Fiorentina. El equipo de Reggio Emilia no dejó de apretar en los minutos finales, pero en realidad lo que estaría más cerca sería el tercer tanto de los violas, ya que el Sassuolo se había ido arriba con todo y dejaba muchos espacios atrás. Primero Tello con una gran jugada individual y luego Chiesa con un potente disparo pudieron resolver para la Fiorentina, pero los dos se encontraban en ambas ocasiones con un gran Consigli.
Finalmente los de Paulo Sousa vencieron 2-1, como ya hicieran ante el Palermo la semana pasada, y suben hasta la séptima posición. Por su parte, el Sassuolo se mantiene en los puestos de abajo, aunque aún se encuentra ocho puntos por encima del descenso, que ahora mismo lo marca el Crotone.