2016 ha dejado todo tipo de situaciones en la Serie B: tristezas, alegrías, decepciones... La hermana pequeña de la categoría de oro del calcio pudo ver al Hellas Verona volviendo a ella después de quedar colista en la Serie A. Además, el Carpi y Frosinone, que habían quedado primero y segundo en la temporada 2014-15, regresaban a la Serie B al no poder evitar sus descensos. Por otra parte, el Cagliari, el Pescara y el Crotone dejaban atrás la segunda división por, al menos, una temporada para disfrutar de la Serie A. Por último, a la Serie B llegaban el Cittadella, el SPAL, el Benevento y el Pisa procedentes de la Lega Pro.

Lucha interminable por el título de Serie B

El año arrancó prácticamente igual que como terminaría la temporada en el mes de junio. Crotone y Cagliari luchaban mano a mano por el liderato y, por ende, por el título de Serie B. El Pescara se encontraba en tercera posición y aguantó en los puestos de promoción durante la mayoría de las jornadas, aunque hubo un período de tiempo que incluso descendió hasta la décima posición. Sin embargo, con Gianluca Lapadula a la cabeza, el equipo abruzzese consiguió ascender en las eliminatorias de ascenso. Pero esa es otra historia.

El Cagliari fue el ganador de la Serie B 2015-16 | Foto: Lega B
El Cagliari fue el ganador de la Serie B 2015-16 | Foto: Lega B

Crotone y Cagliari se fueron intercambiando las dos primeras posiciones de la tabla desde principio de año hasta la penúltima jornada. Los rossoblù eran, sobre el papel, superiores al Crotone, pero el humilde club sureño luchó por ese título hasta el final. El ascenso a la Serie A ya estaba confirmado, así que los pitagorici no se lo pusieron nada fácil al equipo de Cerdeña. Finalmente, los sardos se llevaron el campeonato, pero el equipo que realmente había hecho historia era el Crotone.

Histórico Crotone

La región de Calabria solamente había tenido dos clubes en Serie A: Catanzaro y Reggina. El primero de ellos no pisa la categoría de oro desde la temporada 1982-83, pero los reggini habían estado en ella hace muy poco. La Reggina descendió a Serie B en 2009 y a partir de ahí empezaron sus problemas y tuvo que ser refundada el año pasado. Por tanto, Calabria estaba necesitada de éxitos, al menos, deportivos.

Crotone y Cagliari se fueron intercambiando las dos primeras posicionesCalabria es una de las menos desarrolladas de Italia, así que el espíritu de lucha del Crotone es solamente la muestra de la clase obrera del territorio. El Crotone luchaba contra la historia, pero detrás de él tenía a una horda de seguidores que necesitaban como el beber un empujón económico. Y los pitagorici lo consiguieron. Ascendieron finalmente a Serie A por primera vez en su historia e hicieron honor a su sobrenombre. Con 82 puntos en 42 jornadas, el equipo dirigido por Ivan Jurić finalizaba en segunda posición y lograba disputar por primera vez en su historia la Serie A. La ciudad de Crotona no era conocida en el mundo del fútbol, pero sí en el de la filosofía a causa de la escuela filosófica que creó allí Pitágoras cuando esta era una colonia griega. Sin embargo, ahora quería hacerse oír también en el universo del calcio.

El Pescara evita la hazaña del Trapani

Con los dos primeros puestos decididos a falta de dos jornadas para el término de la fase regular de la liga, las plazas para clasificarse a las eliminatorias para ascender se vendían muy caras. Además, el hecho de que incluso el octavo clasificado pudiera clasificarse a la primera ronda del play-off aumentaba la competencia entre muchos más equipos. Finalmente, el Trapani y el Pescara, tercero y cuatro respectivamente, esperaron a que Bari, Spezia, Cesena y Novara disputasen la primera ronda.

El Spezia vencía al Cesena en primera ronda, pero caía con el Trapani en las semifinales y no podía cerrar un curso excepcional después de llegar hasta los cuartos de final de la Coppa tras eliminar a equipos como la Roma o el Frosinone, ambos de Serie A. El Bari caía a manos del Novara, equipo que caía derrotado en semifinales ante el Pescara. Finalmente, los delfini eran los que conseguían el ascenso en detrimento del Trapani, equipo que se quedaba a las puertas de jugar por primera vez en su historia en la máxima categoría del fútbol italiano.

Livorno, Módena, Como y Virtus Lanciano descienden

Sin embargo, otros se vieron obligados a sufrir los sinsabores propios de la Serie B. De los tres equipos que descienden directamente a Lega Pro, solamente el Como se encontraba en esta tesitura nada más iniciarse el 2016. Los otros dos equipos que finalmente bajaron a la Lega Pro, Livorno y Módena, estaban en los puestos aledaños, pero tenían un mínimo colchón de puntos con respecto a sus contrincantes. No obstante, el Livorno ocupaba el decimoctavo puesto, que da a lugar a disputar una eliminatoria de descenso con el decimonoveno. El Módena, en cambio, estaba dos puestos más arriba a principios de año, algo que no le sirvió para evitar el descenso.

El Trapani estuvo a punto de hacer historia como el Crotone | Lega B
El Trapani estuvo a punto de hacer historia como el Crotone | Lega B

El Como no salió de los puestos de descenso directo en lo que restaba de temporada y el Módena y el Livorno se fueron viniendo abajo poco a poco. El Virtus Lanciano, que solamente iba por delante del Como a principio del año, resucitó y llegó a estar incluso fuera de las plazas para el play-out a falta de pocas jornadas para el final de la liga, pero no fue capaz de salvar la categoría. La Salernitana fue la que mejor reaccionó, puesto que consiguió evitar el descenso directo y se jugó la temporada contra el Virtus Lanciano en el play-out, y se mantuvo en la división.

Así pues, la temporada 2015-16 daba a su fin con el descenso de un histórico como el Livorno y la salvación de tres de los cuatro equipos que habían ascendido la pasada temporada procedentes de la Lega Pro: Novara, que consiguió clasificarse para la fase de promoción de ascenso a Serie A, Ascoli y Salernitana. Además, el Novara supo reponerse a la sanción federativa que sufrió por temas económicos, algo que le costó dos puntos menos con respecto a la puntuación final. En cambio, el Virtus Lanciano no logró salvar la categoría después de que la federación italiana le restase hasta cuatro puntos por motivos similares al del Novara. De hecho, esos cuatro puntos menos le hubieran servido al equipo lancianese para no caer descendido a la Lega Pro.

Verona y Frosinone, directos al ascenso

Si el final de la campaña 2015-16 la Serie B gozó de gran intensidad y dejó grandes historias como el ascenso del Crotone o el descenso del Livorno, el inicio de la actual temporada no se ha quedado a la zaga. La división de plata del fútbol italiano está viviendo la vuelta del Hellas Verona después de disputar tres campañas consecutivas en la Serie A. Los veroneses, sin embargo, están realizando un inicio de año espectacular, puesto que acaban el año 2016 como líderes con 38 puntos. Fabio Pecchia ha mantenido a jugadores tan importantes como Giampaolo Pazzini, Juanito Gómez o Michelangelo Albertazzi y ha conseguido fichar a otros como Enzo Maresca.

Al igual que el Hellas Verona, Carpi y Frosinone descendieron a la Serie B. Ambos debutaban en Serie A y no pudieron mantener la categoría más de un año, así que este año volvían a la segunda división italiana. El Frosinone ha conseguido seguir la estela de los veroneses y se encuentra en la segunda posición con sus mismos puntos. El Carpi también ha comenzado la campaña 2016-17 en un buen momento de forma y ha alcanzado la quinta posición hasta el momento.

Pazzini celebra un gol con la camiseta del Hellas Verona | Foto: Lega B
Pazzini celebra un gol con la camiseta del Hellas Verona | Foto: Lega B

Hellas Verona y Frosinone ocupan los puestos de ascenso directo y en los puestos de play-off están, junto al Carpi, el SPAL, Benevento, Cittadella, Perugia y Virtus Entella. A excepción de este último, que la temporada pasada acabó en novena posición, los otros tres clubes acaban de ascender a la Serie B esta temporada, todos como campeones de sus respectivos de la Lega Pro. Así pues, los equipos que ocupan las seis primeras posiciones de la tabla están formados por clubes que descendieron de Serie A la temporada pasada y clubes que ascendieron de la Lega Pro la campaña anterior.

Tres recién ascendidos sueñan con la gloria

El rendimiento de tres de los cuatro equipos ascendidos está siendo muy sorprendente, ya que se encuentran en posiciones de play-off de ascenso a Serie A, algo muy inusual. El Cittadella, por ejemplo, no alcanzó la Serie B hasta el año 2008 y no se ha movido de ella desde ese momento a excepción de la temporada anterior. El SPAL, en cambio, tiene mucha más historia detrás, puesto que se trata de un equipo ascensor en toda regla. Los ferraresi han pasado por todos los niveles del fútbol italiano, desde la Serie A hasta la Serie D, y esta campaña sueñan con volver a la máxima división del fútbol italiano después de 49 años. Por su parte, el Benevento participa por primera vez en su historia en la categoría de plata del calcio y conseguir dos ascensos consecutivos para debutar en la Serie A sería una hazaña abismal para el cuadro de la región de la Campania.

La temporada 2015-16 daba a su fin con el descenso de un histórico como el LivornoSin embargo, si algunos equipos están en lo más alto de la Serie B actualmente, otros no pueden estarlo. Si en el mes de junio clubes como el Trapani, el Spezia, el Bari, el Cesena o el Novara terminaban en una gran posición, no están consiguiéndolo en este inicio de esta temporada. El Trapani ahora es el colista de la Serie B con tan solo doce puntos obtenidos en veinte jornadas; además, ya se encuentra a nueve puntos tanto de la salvación como de los puestos de play-out. Ninguno de los otros tres conjuntos ocupa ahora ni siquiera plaza para las eliminatorias de ascenso, pero no tampoco se encuentran demasiado lejos. El Bari y el Spezia, en novena y décima posición respectivamente, son los que más cerca están mientras que Novara y Cesena deambulan por la zona media de la tabla.

Los otros cuatro equipos que deben mejorar sus prestaciones considerablemente para no verse en apuros son Avellino, Ternana, Pro Vercelli y Pisa. Los dos primeros ocupan los puestos de descenso directo junto con el Trapani mientras que los dos segundos ahora mismo se jugarían entre ellos mismos la eliminatoria de descenso a la Lega Pro. El Pro Vercelli ya estuvo a punto de disputar la temporada pasada el play-out y fue capaz de salvarse totalmente en detriment de Salernitana y Virtus Lanciano. El Pisa acaba de ascender de Lega Pro y su adaptación a la segunda división italiana está siendo algo complicada. Avellino y Ternana acabaron la pasada campaña en la mitad de la clasificación, pero en este comienzo de temporada no están mostrando su mejor nivel, lo que provoca que estén penúltimo y antepenúltimo respectivamente.

Lapadula y Pazzini, los protagonistas

Al margen de los logros de los clubes a nivel general, los ascensos, los descensos, las hazañas colectivas o las decepciones, la Serie B tuvo como gran protagonista en este año 2016 a un hombre llamado Gianluca Lapadula. El delantero italiano de ascendencia peruana fue el máximo goleador de la liga en la última temporada y ayudó de manera vital al Pescara a conseguir el tan ansiado ascenso. El atacante anotó un total de 30 goles y se coronó como el máximo goleador de la categoría por delante de futbolistas como Daniele Cacia o Ante Budimir. Su gran rendimiento le valió el fichaje por uno de los mejores clubes italianos de la historia, el Milan, que desembolsó cerca de diez millones de euros por el ex del Cesena.

Sin embargo, si los focos se centraron principalmente en Lapadula la pasada campaña, el principio de esta lleva otra firma. En este caso se trata de Giampaolo Pazzini, el delantero del Hellas Verona. La calidad del ex del Milan es de sobra conocida, pero su rendimiento en Serie B era una incógnita. A pesar de haber pasado por clubes como el Inter, la Sampdoria o la Fiorentina, el delantero transalpino está ante uno de sus mayores retos de su trayectoria: devolver al Hellas Verona a la Serie A. Y no lo está haciendo nada mal. Pazzini ha sido capaz de marcar quince tantos en las veinte jornadas disputadas, aunque él solamente ha jugado en dieciséis partidos. Los números son impresionantes y recuerdan mucho a los que realizó la temporada pasada Lapadula con la zamarra del Pescara.

En resumen, la Serie B no ha dejado indiferente a nadie durante los 366 días que ha durado el año 2016. La categoría de plata del calcio tuvo de todo: llantos, alegrías, pasión, decepción, goles, paradas... Pocos equipos son los que se llevan la gloria en una división tan sumamente ajustada, con poca diferencia de puntos entre la última plaza para el play-off de ascenso y la primera para el play-off de descenso, así que los errores se pagan muy caros. Lapadula nos hizo disfrutar con su magnífica capacidad goleadora y ahora Pazzini está demostrando que no le importa bajarse al barro para sacar adelante al equipo por el que lucha. La Serie B es, como el fútbol, sinónimo de vida; unas veces se gana y otras se aprende.