El domingo el Chelsea tendrá que vencer a su rival para seguir imponiendo su hegemonía en la Premier League. A priori se antoja para los blues un partido cómodo, con un rival medio noqueado, además de por los resultados también por la pérdida de su buque insignia Livermore.

Aún así, está competición es la más igualada y competitiva del mundo por ello el conjunto de Conte no se puede confiar ya que, a pesar de recibir a un rival de menor altura, éstos son capaces de aguarle la fiesta. 

De nuevo a la normalidad 

Tras recibir un 2-0 por parte de los vecinos del Tottenham, el conjunto de la capital supo reaccionar ante esta derrota y consiguió una trabaja y cómoda victoria ante el actual campeón de Premier League, el Leicester City. Partido en el cual destacó una figra sobre el resto, un protagonista inpensado, Marcos Alonso, el cual realizó su primer doblete en lo que va de carerra deportiva. 

Además de los resultados, el equipo vuelve a la normalidad tras el posible rifirrafe entre Diego Costa y Antonio Conte, en el cual Costa incumplió una orden del preparador físico del club. Ante esto Conte salió a rueda de prensa y comunicó que el jugador había sufrido unas molestias en la espalda, por lo que sería baja para el partido ante el Leicester. Ya de nuevo esta semana, el jugador español se ha entrenado con normalidad y como ha afirmado su entrenador, está listo para ser de nuevo alineado, además de asegurar que el delantero continuará en el club. Esta puede ser una oportunidad clave para Diego Costa, y mostrar que su único deseo es eguir anotando goles en el Chelsea. Ya que muchos medios apuntan que el jugador ha reaccionado así porque quiere aumentar notablemente su salario para renovar con los blues. 

Continua el calvario 

A pesar de haber conseguido una victoria importante en casa ante el Bournemouth, el equipo se encuentra en la penúltima posición de la Premier League, y sus sensaciones son muy pobres.  Ya que ha conseguido una victoria tras más de dos meses, por lo que deberán buscar soluciones rápidas. 

Ante la mala situación del club, se le suma la pérdida de un jugador clave para los esquemas del equipo, esa pérdida es la de Livermore que se ha marchado al West Brom a cambio de unos 10 millones de libras. Con dicha cifra, intentarán invertirla en un par de jugadores, pero, con esa cantidad de dinero no podrán incorporar gran cosa tal y como está el mercado. Aún así el equipo debe enfocarse en estar todos unidos y mantener una misma idea, ya que a nivel individual el Hull cuenta con grandes jugadores en sus filas como Snodgrass, Mason y Hernández. Jugadores que si no salen en este mercado invernal pueden hacer historia, salvando del descenso a un equipo que desde el primer momento se intuía que estaba descendido. 

Sondeo del partido  

El Chelsea saldrá a realizar su fútbol, pero esta vez tendrá que enfocar su juego en otra faceta, la del movimiento de balón, ya que su rival no saldrá a jurársela de tú a tú ante el líder de la competición. Con dicho juego, los blues tendrán que tener cuidado con las pérdidas de balón ya que ahí estará la ofensiva del Hull para poder dar una sorpresa en el Bridge. Debido al juego, seguramente Cesc Fábregas esté en el once titular junto a Kanté, ya que a día de hoy es el jugador que hace jugar al líder de la liga. Sin duda, puede ser un partido engañoso para Chelsea, o tal vez, sea un paseo para el conjunto local. 

Posibles onces