En el último par de años, una generación entera ha visto cÓmo jugadores con los que empezó a ver fútbol, sus primeros ídolos, los que anotaron golazos que recuerdan, se están retirando, dejando 'huérfanos' a esta generación, ya sea por su retirada a nivel de clubes o, en este caso, de la selección. Esta vez es el turno de un jugador al que el público se acostumbró a ver en las grandes citas internacionales, siempre cumpliendo un buen papel tanto en conjunto con la temida selección alemana como en el terreno personal, teniendo siempre un papel importante en su selección. Hablamos de Lukas Podolski, quien tras 130 partidos (contando el que disputara mañana frente a Inglaterra) dará un salto a un lado de la selección a la que tanto le dio, Alemania.

Joven debutante

La historia de Podolski empezó un cuatro de junio, en el ya lejano año de 1985. Pero no inició en el país de sus amores, Alemania, sino en la vecina Polonia, país al que Lukas pudo haber representado, así que quién sabe si así hubiera cambiado la historia de dos selecciones con una histórica rivalidad más allá del fútbol. Sin embargo, el joven Podolski se trasladó a Alemania junto a su familia, donde empezaría desde muy joven una historia de amor con el Köln y con todo un país. Solo una temporada en la primera división con las 'cabras montesas' le bastó a Podolski para ser tomado en cuenta por el entonces entrenador Rudi Völler para un amistoso previo a la Euro 2004 frente a Hungría, debutando el seis de junio de 2004. En ese momento aun tenía ficha para el filial del equipo, convirtiéndose en el primer jugador desde 1975 que debutaba con Alemania teniendo ficha en un equipo de la segunda división.

Justamente sería la Euro de 2004 su primer gran torneo con la selección. Podolski no contó con demasiada participación, entrando como sustituto en un partido de la fase de grupos, en donde Alemania quedaría fuera. Tras el torneo, Völler fue despedido, siendo sustituido por Jürgen Klinsmann, entrenador con el que el jugador empezaría a tener mayor participación.

Decepciones consecutivas

En el Mundial de 2006, donde Alemania fue el país organizador, llegaría la primera gran participación de Lukas en un gran torneo y su primera gran decepción. Alemania llegó hasta las semifinales, con Lukas titular y apoyando al equipo con tres tantos, incluyendo un doblete en el 2-0 a Suecia en octavos, siendo el segundo máximo goleador del equipo (detrás de Klose) y mejor jugador joven del torneo. La derrota frente a Italia en semifinales privó al joven Podolski de disputar la final del mundial en su casa.

Podolski en la copa del mundo de 2006. Foto: DFB
Podolski en la copa del mundo de 2006. Foto: DFB

El siguiente gran torneo llegaría dos años después, en la Euro de 2008. Los teutones eran favoritos para llevarse la copa de Austria y Suiza y se esperaba un gran papel de Podolski. El jugador no decepcionó y anotó tres tantos en este torneo (todos por fase de grupos), solo uno por detrás del máximo goleador, llevando a su equipo hasta la final. Sin embargo, un gran portero y un delantero con cara de niño frenaron las aspiraciones de Alemania, que se quedo de nuevo a las puertas de un título, el cual tendría que esperar, tras el triunfo de la selección española.

Cuatro años después de la debacle frente a Italia, Alemania volvía a partir como favorito para el Mundial, esta vez en Sudáfrica. Pero de nuevo el mismo portero de la final en Austria y un defensor al que se le metió el espíritu de 9 frenó a Podolski, quien esta vez anotó par de goles. Historia parecida ocurrió par de años después en su país de nacimiento, Polonia, cuando un sorprendente Balotelli y de nuevo Italia volvían a frenar a Alemania. Ya en este torneo se empezaron a notar los años para Lukas, quien en cuatro partidos anotó un tanto.

Final feliz

En 2014 llegaba la que sería la última oportunidad de Podolski de llevarse un mundial a casa con Alemania. Ya no era el mismo de hacía ocho años cuando rompía redes a diestra y siniestra, pero se había convertido en un referente en el vestuario y un gran recambio. En Brasil, tan solo disputó dos partidos y no logró anotar, pero logró celebrar lo que llevaba buscando hacía 10 años con su selección, un título. La cuarta estrella para su selección.

En total, Podolski lleva disputados 129 partidos con la selección alemana, siendo el tercer jugador con más presencias en su selección tras Matthäus y Klose, así como el tercer máximo goleador tras el mismo Klose y el "Torpedo" Müller. Sin duda, Podolski es un jugador histórico para Alemania, al cual los aficionados extrañaran ver en los grandes torneos. Se retira una leyenda.

Podolski con la selección alemana | Foto: DFB
Podolski con la selección alemana | Foto: DFB