Los partidos de la jornada 33 del fútbol de los Países Bajos se disputarán este domingo en simultáneo. Con múltiples cosas todavía en juego a falta de dos semanas para el fin de la temporada, es lógico que los focos de atención se centrarán en lo que pueda ocurrir en el Woudestein Stadion, cancha en donde el Feyenoord de cumplir con su tarea celebrará el título de liga número 15 en su haber. Todo parece indicar que no habrá inconveniente alguno para que los pupilos de Giovanni van Bronckhorst levanten la ensaladera este mismo domingo, pero más allá de la lucha por el título este encuentro tiene un encanto distinto, como muy pocos.

El regular ausentismo del Sparta Rotterdam en la división de honor holandesa ha hecho que los enfrentamientos ante el Excelsior se conviertan en el principal Derby de Róterdam que disputa temporada tras temporada el actual líder de la competencia. Una ciudad muy unida, pero que en el fútbol se divide en tres, volverá a tener una tarde especial en donde el fútbol se convierte en el principal protagonista, en donde cualquier cosa puede pasar y teniendo un escenario ideal para De Trots van Zuit: celebrar un título en casa de uno de los más acérrimos rivales. Pocas cosas podrían ser más placenteras que ello.

Remar contra corriente

Luchar para evitar el descenso se ha convertido en una rutina temporada tras temporada para el equipo Roodzwarten. A pesar de que toda rutina termina siendo nociva, no ha sido fácil para el Excelsior librarse de ella, no siendo una excepción esta temporada. Luego de 32 jornadas disputadas se encuentran en la posición número 13 de la clasificación general con 34 puntos. A pesar de estar más lejos y relativamente a salvo del infierno que en otras temporadas, una desafortunada combinación de resultados podría enviarlos a disputar el playoff por la permanencia, por lo cual dormirse en los laureles no es una opción siquiera considerable a estas alturas.

El momento de la escuadra dirigida por Mitchell van der Graag podría considerarse positivo desde todo punto de vista. Luego de perder el pasado 4 de abril ante el Utrecht el equipo sintió el vértigo que provoca mirar de tan cerca el abismo, obligándose a mejorar tanto su actitud como estrategia de juego con miras a los siguientes compromisos. Tres victorias consecutivas (ocho en total durante la temporada) han significado una inyección de adrenalina a un equipo que, sin estar completamente salvado, afronta el cierre de esta Eredivisie con mucha más calma.

Para el modesto equipo de Róterdam nada sería más placentero que arruinar la fiesta del equipo grande de la ciudad, aunque sea dejando todo en suspenso para la última fecha del campeonato. Para lograr este objetivo, no existe otro resultado posible que no sea el triunfo, ante los cuales presumen encontrarse más que preparados. Determinante y mucho más ha sido en el transcurso de toda la campaña Nigel Hasselbaink, el joven delantero que para su carrera como profesional ha elegido seguir los pasos de su tío; tres las últimas tres semanas han valido oro puro de cara a la misión primaria de este conjunto, por lo cual podría considerarse será el futbolista al que más cuidado deberán ponerle los rivales.

Volver a celebrar

Salvo dos obtenciones de la KNVB Beker, el siglo XXI no ha sido benevolente en cuanto a títulos con una de las instituciones más grandes de toda Holanda. El vivir una temporada tan bien llevada como la presente tras un fracaso mayúsculo en la campaña debut de Van Bronckhorst ha sido una verdadera satisfacción para toda Het Legioen, que confían ver a este equipo alzarse con su primer título de liga desde la temporada 1998/99. Con cuatro puntos de ventaja sobre el Ajax a falta de seis por disputarse un empate les bastaría para hacerse con la ensaladera luego de 18 años, pero siendo nada más y nada menos un derby el encuentro que tendrán enfrente, salir a especular con el resultado no es una opción realista.

Luego de la derrota en De Klassieker el pasado 2 de abril el Feyenoord sólo ha dejado escapar dos unidades de 12 posibles, incluyendo una victoria de 8-0 sobre el colista Go Ahead Eagles inmediatamente después del tropiezo ante el más acérrimo rival. La dinámica del equipo ha sido y está siendo muy positiva, el cual de a poco ha ido entendiendo la seriedad del momento, el cual sin mayores contratiempos confían seguir afrontando de correcta manera hasta finalmente poder conseguir el tan apreciado objetivo.

Una equilibrada mezcla de la juventud propia de toda la Eredivisie con veteranía de calidad han sido las claves del éxito para el club grande de Róterdam. El liderazgo de Dirk Kuyt, quien recientemente ha ido perdiendo poco protagonismo, conduce a un equipo repleto de jugadores laboriosos y con gran facilidad para el desarrollo de la idea que el entrenador les exige. Los goles de Jorgensen son importantes, sin embargo, lo que han venido realizando los extremos termina por ser la mayor fuente de goles para el equipo, principalmente por el sector derecho con un Steven Berghuis que prácticamente ha vuelto a renacer tras su regreso desde Inglaterra.

Bajas

Ambas escuadras presentan sus plantillas casi al completo. Las bajas que se manejan de cara a este compromiso se vienen manejando de vieja data. Hicham Faik ha sido una lesión sensible para el conjunto que será local en este duelo, pero que han sabido solventar en el transcurso del último mes. Por el lado del líder, el portero sueco Pal Hansson y el defensor Sven van de Beek siguen en el dique seco luego de muchos meses de ausencia; a pesar de ser el central holandés mucho más relevante para el equipo que el guardameta, el entrenador ha sabido mover sus fichas de forma cónsona con sus necesidades a lo largo del torneo.

Último enfrentamiento

En la jornada 4 de la presente temporada se dio este derby desde De Kuip, donde sin mayores sobresaltos el Feyenoord se impuso 4-1 sobre el Excelsior. A pesar de que Stanley Elbers adelantó al conjunto visitante en los minutos iniciales del partido, los locales reencaminaron el partido con dos goles de Dirk Kuyt, uno de Berghuis y otro de Jens Toornstra. El historial de enfrentamientos arroja una amplia disparidad de resultados, pero más allá de las estadísticas estos encuentros siempre terminan siendo disputados hasta el último aliento y ofrecen un gran espectáculo para el aficionado. El que está por vivirse será un grandioso Derby antes del éxtasis del triunfo.