Saltó la sorpresa en el TCF Bank Stadium. Minnesota United, noveno clasificado de la Conferencia Oeste, se ha impuesto por tres goles a dos a Portland Timbers en un encuentro con sello Major League Soccer. Errores defensivos, apenas control en el centro del campo y los jugadores de más calidad frotándose las manos a la espera de anotar su golito. Una auténtica locura que solamente el soccer puede ofrecer. Al término de los noventa minutos se llevó la victoria el equipo que mejor supo aprovechar la fragilidad de la zaga rival.

¡A divertirse!

Desde los primeros compases quedó claro que este iba a ser un encuentro abierto, sin un dominador claro y con ocasiones de gol para los dos equipos. Lo que nadie se podía imaginar era la cantidad de errores defensivos que ambos iban a cometer, y es que así va a ser complicado que ganen partidos cuando tengan que enfrentarse a rivales serios y bien plantados sobre el terreno de juego.

A los seis minutos, Amobi Okugo iba a abrir el marcador. Sin embargo, lo iba a hacer batiendo a su propio guardameta al tratar de despejar el "pase de la muerte" filtrado por Sam Cronin desde la frontal del área chica. Una buena triangulación por parte de los Loons había bastando para dejar en evidencia a la defensa leñadora…

Los Loons celebran el primer gol del choque // Imagen: Minnesota United FC
Los Loons celebran el primer gol del choque // Imagen: Minnesota United FC

No obstante, la calidad de los hombres más talentosos de los Timbers permitió igualar el encuentro en la recta final de la primera mitad. Sebastián Blanco vio a la perfección el desmarque de Diego Valeri y cuando este se disponía a finalizar la jugada fue arrollado por Bobby Shuttleworth, el meta local. Penalti de manual que el propio Valeri se encargó de transformar, firmando así su noveno tanto en la presente campaña.

Más de lo mismo

Si la primera mitad había sido un auténtico correcalles, la segunda no sería diferente. En la primera acción Christian Ramírez adelantó de nuevo a los suyos aprovechando un despiste en la marca de Roy Miller. Otro error y otro gol en contra. No sería el último.

Poco le duró la alegría a la hinchada local. Dos minutos más tarde, en una acción calcada al primer tanto de Minnesota United, llegaría el empate visitante. Tras una buena triangulación, Vytas pone un centro al corazón del área que Francisco Calvo introduce en su propia portería al tratar de despejar. 2-2 y continuaba el calvario…

Visto lo visto no era difícil predecir algún gol más. Lo cierto es que la victoria podría haber caído para cualquiera de los dos lados, pero en este juego de errores fue Abu Danladi quien acabó por darle la victoria a su equipo al aprovechar un mal despeje de Jeff Attinella. Desde luego los porteros tampoco habían tenido su día. En general, nadie había tenido su día…

Abu Danladi celebra el gol de la victoria // Imagen: Minnesota United FC
Abu Danladi celebra el gol de la victoria // Imagen: Minnesota United FC

La cara B

El  marcador no volvería a moverse, lo que no quita para que la tensión se mantuviese a flor de piel hasta el pitido final. En un encontronazo entre Blanco y Danladi, Ted Unkel, el árbitro del encuentro, optó por una sanción salomónica y envío a ambos a la ducha antes de tiempo. En esta ocasión la expulsión por roja directa estaba completamente justificada. ¡Por fin un arbitraje en la MLS que está a la altura del espectáculo ofrecido por los futbolistas!

Lo que viene

El calendario no da tregua. En los próximos días tanto Minnesota United como Portland Timbers deberán a hacer frente a nuevos compromisos ligueros. Los Loons recibirán a Vancouver Whitecaps en la madrugada del domingo mientras que los leñadores harán lo propio con Seattle Sounders en la madrugada del lunes