Luego de finalizada la jornada de eliminatorias en Asia y en Europa, los ojos del mundo se centraron en lo que se veía venir al otro lado del Atlántico. La fiebre de las eliminatorias sudamericanas envolvió al continente y en Colombia, la cosa no fue diferente. Como era de esperar, en el estadio Metropolitano de Barranquilla no cabía ni un alfiler. Abundaban las banderas, los cantitos, la pasión y, más que nada, la emoción. Sucede que ocho equipos sudamericanos competían por los 3 cupos directos (y un repechaje intercontinental) restantes para entrar a la Copa del Mundo y Colombia y Paraguay, eran dos de ellos. Por lo que el partido prometía, y mucho.

La selección colombiana llegaba con la chance de reservar su boleto para Rusia si ganaba el partido, todo dependía de ellos. Enfrente de ellos, los ‘guaraníes’ visitaban Barranquilla necesitando obligatoriamente sumar de a 3 para seguir en la pelea y retornar a un mundial luego de casi ocho años. El sol se ocultaba tímidamente mientras los dos equipos salían a la cancha. El estadio vibraba de expectación. Era Colombia vs Paraguay, Paraguay vs Colombia. Dos naciones con un solo objetivo: Rusia 2018. Luego de la entonación de ambos himnos nacionales, el árbitro brasilero Ricardo Ribeiro decidió que todo estaba en orden, hizo sonar su silbato y el partido se puso en marcha.

Primer tiempo

El partido comenzó llano y sin mucha acción. Tanto Colombia como Paraguay probaron poco y nada en el primer cuarto de hora. Los jugadores colombianos se mostraban nerviosos, con poca precisión en los pases y en las salidas ofensivas. La primera jugada de peligro llegó en el minuto 19’, cuando el paraguayo Gónzalez eludió a su marcador y disparo a portería, pero el balón fue a estrellarse con el palo del arco defendido por Ospina.

Luego de esa jugada, creció la ansiedad en el conjunto colombiano pero también su determinación. Luego de reiteradas faltas en la mitad de la cancha que bloquearon el normal desarrollo del partido, la selección ‘cafetera’ logró romper las defensas paraguayas y atacar al arco en dos ocasiones seguidas en el minuto 30 (Cardona sólo frente al portero) y el 31’ (Dávinson no pudo conectar un centro que se fue cerca del poste). Para lamento de los paraguayos, Cáceres sufrió una lesión en el minuto 37 y tuvo que ser sustituido por Piris. El primer tiempo finalizó sin más acción y los jugadores de ambos equipos marcharon nuevamente a los vestuarios a esperar la charla de los respectivos entrenadores.

Segundo tiempo

El complemento del partido fue una historia distinta. Colombia, animado por la localía, fue a buscar el gol desde el pitazo del árbitro brasilero. Varios ataques de Falcao y James pusieron a prueba al portero paraguayo. Eso sí, la salida de Cuadrado redujo el ataque colombiano, lo que generó que los guaraníes redoblen sus esfuerzos. El verdadero momento clave del partido llegó en el minuto 78, casi entrando en la recta final, cuando el tigre Falcao tras un gran pase de Chará, puso el 1 a 0 e hizo estallar de alegría a toda Colombia.

Sin embargo, la alegría no dura para siempre. La selección cafetera, relajada tras el gol y con un pie en Rusia, empezó a tener más y más problemas defensivos. Cuando parecía que la historia estaba escrita, cuando el referí miraba su reloj para terminar el partido de una vez por todas, llegó lo inesperado. Óscar Cardozo, que había ingresado tan sólo ocho minutos antes, aprovechó un error de Ospina y puso el empate. El Metropolitano se quedó mudo.

Colombia fue a lograr su propio milagro: primero Chara, luego Arias. Dos chances inmejorables, y ninguna de las dos terminó en el fondo de la red. Cuando se jugaba el descuento, minuto 92, casi último balón del encuentro, Antonio Sanabria, tras varios rebotes en el área, impactó el balón y cerró el telón de un gran encuentro. 2 a 1 para Paraguay, que sigue con vida en las eliminatorias.

Ahora, Colombia se define el todo o nada visitando a Perú, que viene de empatar sin goles ante Argentina. Paraguay, en Asunción, debe ganar o ganar contra Venezuela y esperar otros resultados para que el milagro de Barranquilla lleve a los guaraníes al frío clima ruso.