Hablar de fútbol es hablar de Milán, y con ello de los dos equipos más importantes de la ciudad del norte de Italia. AC Milan e Internazionale Milano son dos de las arterias más importantes del deporte milanés y lo demuestran ambas aficiones en cada partido de ambos equipos. Comparten casa pero ya sean milanistas o nerazzurri no dejan de lado a uno de sus amores más importantes en la vida, su equipo de fútbol.
El Derby della Madonnina
Como todo derbi este tiene su origen años atrás. En el caso del enfrentamiento entre los equipos de Milán, viene de principios del siglo XX. Ya desde 1899 con la fundación del club rossonero, por aquel entonces un equipo de fútbol y de cricket hasta su primer enfrentamiento directo en 1908 en suelo americano. Pero la rivalidad vuelve a venir dada por la diferenciación de las clases sociales de la época, aunque eso ahora ya ha evolucionado.
El conjunto milanista en la primera mitad del siglo estaba estrechamente ligado con la clase proletaria, mientras que los hinchas del Inter con la burguesía. No obstante todo ello ya ha quedado atrás, y es que desde la llegada de Berlusconi al equipo rossonero y la de Moratti al Inter, las tornas están mezcladas. El primero de ellos muy ligado al partido conservador mientras que Massimo siempre ha estado relacionado con la ideología de centro – izquierda. Sea como fuere ya quedan pocas diferenciaciones de clases en ambos conjuntos, que poseen masas sociales muy integradas.
Ciudad de éxitos
Como no podía ser de otra manera, Milán tiene en estos dos equipos un ramillete de títulos. 50 de la mano del AC Milan, en los que destacan 18 títulos de Serie A, cinco Coppas de Italia y siete de Supercoppa en la escala nacional. Por su parte el Inter tiene los mismos campeonatos regulares, 18, siete Coppas de Italia y 5 Supercoppas de Italia, prácticamente los mismo números en ambos conjuntos.
En el panorama europeo cierto es que el equipo rossonero tiene un factor diferencial. Siete Copas de Europa. El segundo tras el Real Madrid con más títulos de la máxima competición de clubes del mundo. No son pocas las Ligas de Campeones que posee el Inter. Tres entorchados europeos en la única ciudad del mundo que puede presumir de que dos de sus equipos hayan levantado la Copa de Europa. Un factor diferencial para Milán.
En cuanto a títulos a nivel mundial, cuatro son los conseguidos por el AC Milan. Tres copas intercontinentales y un Mundial de Clubes. Dos intercontinentales posee el Inter y un Mundial de Clubes en la única ciudad de Europa junto a Madrid que tiene en más de un equipo títulos intercontinentales. Pese a la superioridad en títulos continentales hay algo que no tiene en sus vitrinas el conjunto rossonero. Un triplete. Algo que el Inter consiguió de la mano de José Mourinho en 2010, logrando la Uefa Champions League, la Serie A y la Coppa de Italia.
Trescientos partidos de rivalidad
218 enfrentamientos en partidos oficiales y 87 amistosos más de un total de 305 partidos. En cuanto a los choques oficiales, son 77 las victorias del Inter de Milán por 75 las del AC Milan, además de 66 empates. De manera idéntica que en los títulos, son superiores los triunfos de los nerazzurri, 70, por 63 del equipo milanista en Serie A. No obstante, vuelve a no haber color en los enfrentamientos entre los dos equipos en Europa, con dos victorias del AC Milan, dos empates y ninguna de los interistas.
También en enfrentamientos directos para conseguir títulos ha salido victorioso el conjunto rossonero. En 1977 con el triunfo en Coppa de Italia por 2-0 celebrado en Stadio de San Siro. 2-1 en 2011 fue el resultado de la Supercoppa de Italia celebrada en Pekín. Mucha igualdad pero con la sospecha de que en los partidos trascendentes y decisivos sigue siendo superior el AC Milan.
El encuentro se celebra a las 20:45 el próximo domingo y se espera un ambiente de gala. El Inter juega de local y aunque la mayoría del Giuseppe Meazza será nerazzurri, el sentimiento de ambas aficiones se podrá palpar en un partido que puede ser un punto de inflexión en la temporada de dos escuadras que quieren regresar a la élite del fútbol italiano, europeo y mundial.