Luego de la victoria en Entre Ríos, el equipo de Guillermo Barros Schelotto tuvo una semana complicada. La lesión de Wilmer Barrios y su duda para este partido estuvo en la mente del entrenador durante los siete días. Las lesiones en el plantel no han sido complicada como en otros años, pero si fueron en jugadores claves. La rotura de ligamentos de Fernando Gago y el desgarro de Paolo Goltz fueron dolores de cabeza de cara a lo que se jugará el próximo domingo en el estadio Monumental. Sin embargo hoy el Xeneize tenía una parada dura, enfrentar a Belgrano de Córdoba. Se logró tener una cierta empatía entre ambos equipos por lo hecho en el año 2011 por el equipo cordobés pero cuando entraron ambos equipos, lo hecho quedó en el pasado. Con papelitos de color azul y amarillo y los gritos de los hinchas a más no poder, el fervor, el amor y la adrenalina se vivieron hoy en el estadio Alberto J. Armando.

El equipo local venía de ganar 0-2 ante Patronato en Paraná. Jugaba este partido siendo único puntero y con la posibilidad de sacarle 6 a San Lorenzo, y 9 a River. Del otro lado de la vereda, se encontraba el Belgrano de Lavallén. El equipo cordobés se encontraba en la mitad de la tabla y necesitaba sumar para pelear por los puestos de copa. Con la presencia de Silvio Trucco como árbitro principal y con una Bombonera encendida, Boca y Belgrano jugaban por la séptima jornada de la Superliga Argentina.

Eficacia y juego asociado

El comienzo del partido fue parejo durante los primeros 10’ minutos. Tanto Boca como Belgrano se estudiaban y generaba pocas situaciones de gol para ambos equipos. A los 15’, todo cambio. Linda jugada del uruguayo Nández que termina en Pavón, el extremo tiró un pase para la llegada de Pablo Pérez, y entre Lema y el arquero Acosta la metieron en contra y gol. 1-0 para el local y relajación para el DT. A partir de ese momento, los espacios para el conjunto de la rivera fueron más amplios, mucha circulación y posesión de la pelota. Mientras que del otro lado, pocas situaciones y muchas imprecisiones. A los 42’ de la primera parte, cambio de frente del colombiano Fabra para la bajada de Pavón, centro y gol de Edwin Cardona. 2-0 para Boca y toda la fiesta en la Bombonera con un equipo que jugaba lindo. Con este juego, se iba al descanso ganando cómodamente.

Gustar y golear

Con mucha tranquilidad salió Boca. Con poco juego por parte del equipo de Lavallén, el conjunto Xeneize se hizo dueño y señor de la pelota. Con la hinchada alentando a más no poder por lo que se jugará el domingo que viene. A los 17’ del segundo, un feo error del arquero Acosta para la aparición del Pipa Benedetto y a cobrar. 3-0 y otro gol para el delantero estrella. El estadio se caÍa a gritos y cánticos por el Superclásico y Boca continuaba jugando mejor. Una atajada del arquero Rossi fue la única aparición importante que tuvo durante la tarde-noche. Todo se terminó a los 32’, lindo jugada individual de Espinoza y con una asistencia, habilitaba otra vez al Pipa Benedetto para convertir el 4-0 y fiesta total. Noveno gol para el delantero y con la mirada atenta de Jorge Sampaoli, Boca goleaba al equipo cordobés en su estadio. Pitazo final del señor Trucco y con toque, juego, goles y celebración boquense, el equipo comandado por el mellizo goleó a Belgrano y es el único puntero de la Superliga Argentina.

Ahora se viene una parada más que difícil. La próxima fecha recibirá a River en el estadio Monumental. Tendrá toda una semana para preparar el equipo para ir a Núñez con las ganas de seguir aumentando su invicto en el torneo. En tanto Belgrano recibirá en condición de local al Independiente de Ariel Holan.