Ha llegado el momento que todo seguidor de la Major League Soccer llevaba esperando desde el pasado mes de marzo, cuando arrancase el curso futbolístico 2017. ¡Ya está aquí la final de la MLS Cup! Tras muchos meses de pura competición, risas, llantos, alegrías y durísimas decepciones, por fin se decidirá quién reina en la liga norteamericana. ¿Será el Toronto FC de Giovinco, Michael Bradley, Jozy Altidore y compañía quien levante el tan ansiado trofeo por primera vez en su historia o, por el contrario, lograrán los Seattle Sounders encabezados por Nico Lodeiro llevarse la copa a casa por segundo año consecutivo? La respuesta, en apenas unos días. Llama a tus amigos, acercaos al supermercado más cercano, comprad una buena cantidad de cerveza y fast food,  desempolvad la bandera de las barras y las estrellas y acomodaos en el sofá para disfrutar del espectáculo. La ocasión lo merece. El partido del año está a la vuelta de la esquina.

Todo al rojo (Fer Rodríguez)

Todo el mundo se pregunta quién va a ganar la MLS Cup. No es para menos. El soccer ha crecido una auténtica barbaridad en las últimas temporadas y, por ende, el nivel de las plantillas es también mucho mayor. De ahí la expectación que este choque, un calco de la final de 2016, levanta en Estados Unidos, Canadá y el resto del globo. No obstante, la respuesta es aún una incógnita por resolver. Los hinchas, guiados por el amor a sus colores, te responderán sin titubeos que el vencedor será, finalmente, su equipo.

Lo único que se sabe a ciencia cierta es que Toronto FC, además de ser el mejor equipo en fase regular, llegará con un plus de motivación tras perder la última final, precisamente ante Seattle Sounders, en los penaltis. ¿Puede haber algo más cruel? Si tienes que apostar tu dinero a cara o cruz entre estos dos colosos del fútbol norteamericano, no lo dudes, ¡todo al rojo!

Un año casi perfecto

El tremendo batacazo que supuso perder la final de la MLS Cup 2016 en el último instante, lejos de hundir a la franquicia canadiense, la hizo más fuerte. El grueso de la plantilla optó por permanecer en Toronto para conquistar la copa este curso y los fichajes, sobre todo el del canterano culé Víctor Vázquez, han aportado aún más empaque a una plantilla con mimbres de campeón desde hace ya algunas campañas.

torontofc.ca

Con la confianza que solamente un técnico top como Greg Vanney puede transmitir a su vestuario y liderados por la figura de Sebastian Giovinco, Toronto pronto se convirtió en el rival a batir. Casi ocho meses después, con un balance de 20 victorias, nueve empates y solo cinco derrotas en una fase regular prácticamente perfecta, continúa siéndolo. Por si esto fuera poco, la exigencia máxima de los PlayOff´s le ha hecho curtirse desde las trincheras, convirtiéndose así en una armada invencible. Fiabilidad, compromiso y talento. Las claves del éxito de cualquier deportista y, como es lógico, de cualquier equipo de fútbol. Este es, sin duda, el año de Toronto FC. Nadie puede con los 'reds'.

Jugar contra la historia

Desde que se disputase la primera edición de la Major League Soccer, allá por 1996, solamente tres franquicias han logrado salir campeón dos veces seguidas: DC United en 1996 y 1997, Houston Dynamo en 2006 y 2007 y, más recientemente, LA Galaxy en 2011 y 2012. Un dato más a tener en cuenta en favor de los pupilos de Greg Vanney. Este hecho habla muy bien de la igualdad que rige el campeonato. A priori, parece poco probable que el cuadro 'esmeralda' se una próximamente a este selecto club, sobre todo, por el rival que tendrá en frente.  

La historia se repite (Pablo Fernández)

Una vez más la historia se repite, como decía Camilo Sesto en su canción, y es que Toronto y Seattle vuelven a verse las caras por segundo año consecutivo en la final de la copa MLS. Fue un palo gordo para el vestuario canadiense la dura derrota que sufrieron en los momentos finales del partido el año pasado. Pero lejos de que supusiera un bajón tanto anímico como de rendimiento en la temporada siguiente, los de Toronto han sido uno de los mejores equipos de la liga durante todo el año y por méritos propios vuelven a estar en la final.

No han sido menores los esfuerzos de la Seattle de Dempsey y Lodeiro, quienes han quedado segundos de su conferencia empatados a puntos con los Portland Timbers, primer clasificado. Tanto seguidores como futbolistas llegan a esta final con las ganas y los ánimos por los aires. No es otra final más contra Toronto, es volver a ganarlos, proclamar su soberanía y entrar en el club selecto o salón de la fama como la cuarta franquicia junto con DC United, Houston Dynamo y LA Galaxy, los cuales hasta ahora han sido los únicos equipos en ganar la copa MLS por dos años consecutivos. El eterno capitán estadounidense Dempsey lo dejó claro en su entrevista: “Queremos más, hemos hecho un buen año y no nos conformamos con eso. Será una final dura ante un buen rival, pero ya pudimos con ellos el año pasado ¿Qué tiene de diferente este?”. Palabras de un capitán que ve a su equipo motivado para el partido, y que por supuesto no dejó a un lado la actuación de su afición la cual es una de las claves principales de que la franquicia haya ido a más en estos últimos años.

Acabar bien, lo que bien empieza

Por segundo año consecutivo, Seattle Sounders han sido uno de los mejores equipos de su conferencia, lo que te hace saltarte una ronda en los PlayOff´s pero para nada te da ventaja en las eliminatorias. Todo este trabajo lleva la marca de un mítico jugador de la franquicia de Washington, que no solo jugó durante varias temporadas en el equipo, sino que es su tercer año consecutivo en el banquillo de Seattle, y ese es Brian Schmetzer. Como jugador ya conocía la manera de funcionar, y como entrenador únicamente ha tenido que encajar algunas piezas durante su primer año al frente del equipo para lograr los resultados de los dos siguientes.

soundersfc.com

Por nombres, los de Washington quizás estén en desventaja. Giovinco, Bradley, Altidore, jugadores de Toronto con una carrera futbolística más que envidiable. Pero esto es fútbol señores, esto es la Major League Soccer y con los nombres no se ganan partidos, menos aún finales. Ya el año pasado Seattle se coronó campeón ante un Toronto con los mismos jugadores que la disputan este año. ¿Qué ha cambiado?, a la vista todo parece igual, pero los jugadores saben que nada es lo mismo. Unos quieren revancha, y la quieren ya. Otros sin embargo buscan dejar su huella y entrar en la historia de la liga estadounidense de soccer.

Sprint final

Pocos días quedan para el partido, en el que se quiera o no, te juegas lo que has estado trabajando durante toda la campaña. Son los últimos días que el equipo de Seattle pasará junto. Los últimos días con tu otra familia, con la que compartes lágrimas y sonrisas, alegrías y penas. Últimos días con gente a la que ves a diario y con la que tus emociones y sentimientos se llegan a sincronizar. Últimos días antes de una final, sí una final que les puede hacer entrar en la historia. Últimos días en los que sólo recibes apoyos y ánimos de amigos, familiares y aficionados, que te hacen más fuerte, pero a la vez sientes que tienes una deuda con ellos que solo ganando podrás saldar. Últimos días antes de la final de la copa de la Major League Soccer. Acomódense porque el espectáculo esta por empezar.