El Shakhtar fue el primero, el primero en superar al todopoderoso Manchester City esta temporada. Eso sí, Guardiola alineó un once que muy probablemente no volverá a jugar de inicio. El partido era un trámite para los ingleses y una final para los ucranianos, y ahí se vio la diferencia. La segunda unidad del City no dio el nivel que se esperaba, y los atacantes brasileños del Shakhtar hicieron daño a la contra. El City solo supo reaccionar tras el descanso y con las entradas de Agüero y Brahim Díaz, que fue un revulsivo total. Guardiola, aún así, vio cosas positivas y valoró la derrota para bien. También clamó por levantarse todos juntos y luchar el domingo, aunque "no se acaba el mundo el domingo".

Con la cabeza alta

El técnico ve buena esta derrota para el equipo y todo su entorno. "Hoy ha sido la primera, necesitábamos perder un partido, será bueno para el club, para nosotros y la prensa", decía. Para explicarlo, el catalán dijo que la gente dice muchas cosas cuando ganas mucho, y que eso lo pueden olvidar ahora.

En cuanto a las posibles quejas del Nápoles, Pep fue tajante. "Hemos perdido a pesar de nuestro profesionalismo, llevamos tiempo diciendo que no podemos ganar siempre, vamos a perder partidos", aclaraba. Aún y todo, el catalán no escondió que le dolió la derrota. "Duele, nunca es agradable perder. Hemos jugado para ganar hasta el final. Hemos hecho cosas bien y también errores que mejoraremos, el fútbol trata en levantarse cuando pierdes", comentaba.

El domingo se juega el partidazo de la liga, y el City tiene que ponerse a pensar en ello cuanto antes. "Tenemos que levantarnos, es otra competición, la Premier, nos prepararemos para el domingo, y después pensaremos en el Swansea y en el Tottenham, no se acaba el mundo el domingo, no importa lo que pase", explicaba.