Curiosamente, el Arsenal fue el equipo que abrió esta edición de Premier League y será, junto al West Bromwich Albion, el que dispute el último partido de 2017. Un partido que es de gran importancia para ambos conjuntos, pues los Baggies deben volver a la senda de la victoria tras no conseguir un triunfo desde agosto, y los Gunners tienen que sumar los tres puntos para continuar con su buena racha de resultados y perseguir así los puestos de UEFA Champions League. Sin embargo, el encuentro tendrá otros tintes muy distintos de los que tienen que ver meramente con el fútbol. Arsène Wenger, leyenda viviente del conjunto londinense, superará a Sir Alex Ferguson como entrenador con más partidos en la Premier League, sumando su encuentro 811 en la competición inglesa.

"No sabía cómo iba a ser aceptado por los jugadores"

Como no podía ser de otra manera, toda la previa del encuentro en lo que al Arsenal se refiere ha ido encaminada hacia este hito. Un récord especial y único al que solo el francés estaba encaminado. En una entrevista a la web del conjunto Gunner, Wenger reconoce que se mostró “emocionado” por llegar a una liga como la inglesa pero también algo angustiado por saber cómo iba a ser recibido por los jugadores: “Estaba muy emocionado, por supuesto. Regresé de Japón y estaba feliz de tener una oportunidad en Inglaterra porque siempre había querido entrenar aquí. No sabía cómo iba a ser aceptado por los jugadores. Eso era algo complicado porque hay que tener en cuenta que muchos de ellos tenían en torno a treinta años”.

Precisamente, lo que nunca ha sido un problema para él, la edad, sí lo fue en sus primeros momentos al frente del equipo londinense, pues tenía cierto reparo al enfrentarse a jugadores que superaban la treintena: “Nueve de los jugadores que tenía en aquel momento tenían más de 30 años. Dennis Bergkamp y Paul Merson tenían 29, pero todos los demás tenían entre 30, 31 ó 32. Eran hombres fuertes, que tenían un espíritu inglés y muchos con una personalidad muy fuerte. Nunca se sabe qué tipo de resistencia al cambio puedes llegar a encontrar”. Acomodándose en la capital británica de la mejor forma posible, Wenger fue escribiendo una historia que se cruza, 21 años después, con la de otro mito de los banquillos de la Premier League, Sir Alex Ferguson.

"Ya no competimos pero siempre hubo una gran rivalidad"

Admitiendo que no han mantenido contacto en estos días especiales para el alsaciano porque “había cosas más importantes que hacer”, sí tiene tiempo para hablar de su mítica rivalidad: “Ya no competimos pero siempre hubo una gran rivalidad. En general, creo que intentamos mantener una actitud positiva de cara al juego y hacer que nuestros equipos jugaran positivamente”. Respetando y admirando al exentrenador de los Red Devils, Wenger resalta del escocés “lo que ha hecho y su gran deseo de ganar”. Con esas dos premisas, el entrenador del Arsenal encarará el encuentro ante el West Bromwich Albion en el que espera conseguir los tres puntos para tener una celebración completa de tan gran hito.

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