La Premier League es esa liga del mundo que no da descanso en ningún momento, especialmente, en los últimos días de del año. A pocas horas que se termine el 2017, la máxima categoría del fútbol inglés, nos regalaba uno de los partidos más sorpresivos de la jornada. Sobre todo porque el que estaba involucrado era el líder que vistaba Selhurst Park, casa del Crystal Palace.
Este sorprendente Manchester City que se encuentra líder del fútbol inglés, que llevaba 18 partidos ganados de forma consecutiva, que está invicto en esta competición - solamente tenía un empate ante el Everton en las primeras fechas- y lleva 13 puntos de diferencia sobre su escolta, el Chelsea de Antonio Conte.
Por el lado de su rival, el Crystal Palace, cuando todo parecía indicar que sus días en la Premier League se terminaban, la llegada de Roy Hodgson llevó a que los “Eagles” comenzaron a escalar posiciones y se encontraran más arriba y relajados de esas posiciones tan temidas.
En la jornada anterior, el conjunto local le tocó recibir al Arsenal y cayó derrotado por 3-2, más allá que en los últimos minutos pudo conseguir una igualdad. Por el lado del Manchester City, no conocía otra cosa más que la victoria, venció al Newcastle por la mínima y, en esta oportunidad, estaba en busca del triunfo número 19.
Resignación
Desde el primer minuto, el pensamiento del entrenador del Crystal Palace fue simple. Si le tocaba perder ante un rival de tal importancia, que fuese atacando. Así es como quiere caracterizar a su equipo, en lugar de meterse atrás y tal vez no conseguir ningún punto ante un equipo que pareciera que nadie podría ganarle, Hodgson apostó por la alternativa de mayor caracter.Así fue como salieron los locales al campo de juego.
Mientras que por el otro lado, el Manchester City estaba a la espera de encontrar a un equipo que se metiera dentro de su área esperando a aguantar lo máximo posible, pero no fue así. Se encontró con la sorpresa de un equipo más decidido a buscar el arco rival.
La primera oportunidad la tendrían los visitantes y llegaría a través de un centro para Bernardo Silva, que remataría desviado, desaprovechando la primera chance clara para los dirigidos por Guardiola. Luego, llegó el momento de la respuesta de los locales que tuvieron una oportunidad muy clara en los pies de Patrick van Aanholt, quien remató desde fuera del área, y Ederson logró desviar al tiro de esquina.
Minutos más tarde, el que tendría la oportunidad, con un disparo débil, fue Gabriel Jesús, luego de combinar bien con Kevin De Bruyne, pero el brasilero no le dio la potencia necesaria y fue una pelota fácil para el portero de los Eagles. Nuevamente, Crystal Palace conseguió llegar al arco de Ederson, a través de Benteke, pero su cabezazo se fue apenas desviado.
Ya en los últimos minutos Agüero, quien habría ingresado por un lesionado Gabriel Jesúa, recibió un centro desde la derecha pero no pudo apuntar al arco. El buen partido del Crystal Palace le impedía al City ser el equipo superador que todos conocen, porque más allá de contar con la tenencia del balón, no era el dueño completo del juego. Por eso, cuando Moss marcó el círculo central indicando el final de los primeros 45 minutos, en Guardiola y todos sus dirigidos se pudo ver su absoluta cara de resignación.
Milivojevic, perdió una oportunidad histórica
El segundo tiempo, luego de los enojos del ex entrenador del Barcelona en el vestuario, el City salió más decido en busca de llevarse el triunfo número 19 de Selhurst Park. Pasarían varios minutos para encontrar la primera llegada peligrosa. El encargado fue İlkay Gündoğan, tras una buena combinación por derecha que terminaría con un disparo con pierna derecha que salió muy cerca del palo izquierdo.
Tres minutos más tarde, el delantero argentino probó con un disparo de cabeza, pero se topó con una buena respuesta del arquero Hennessey. Sané siguió los pasos de Agüero, pero volvió a encontrar una gran respuesta del portero del local. Tampoco podría Kevin De Bruyne, luego de rematar en busca del gol.
Luego de ello, los visitantes trataron de encontrar el gol que les diera el triunfo. Los defensores del Palace se mostraban firmes y contaban con un arquero que cada vez que lo llamaron respondió y eso llevó que los Eagles intentaran hacer daño al City.
Serían los locales quienes tendrían las últimas oportunidades, especialmente las más claras del encuentro. La primera llegaría con un centro de Zaha por el sector derecho para Townsend, que en soledad y con Ederson ya vencido, remató de zurda y vio como el balón se fue por arriba, generando el lamento de todos los que estaban en el estadio. Luego sería Tomkins de cabeza quién no podría anotar.
Llegó el momento de los minutos finales, que seía la parte más emocionante de todo el partido. En el minuto 89’, Zaha ingresó al área del Manchester City, Sterling intentó marcarlo y el árbitro del encuentro sancionó penalti para el Crystal Palace. Luka Milivojevic tuvo en sus pies la oportunidad de sacarle el invicto por completo al City. Sin embargo, Ederson, con los pies, logró desviar el flojo remate y salvó al equipo de Guardiola.
El City de Guardiola vio como Palace terminó con su invicto de 18 partidos ganados de forma consecutiva. Pero, más allá de ello y de llevarse un punto de Selhurst Park, la preocupación del entrenador pasará por los dos lesionados fundamentales, ya que al parecer no contará en los próximos partidos con Kevin De Bruyne, quien sufrió una dura entrada sobre el final del partido y dejó el estadio en camilla, y con Gabriel Jesús.
El martes el conjunto de Guardiola tendrá la chance de recuperarse y volver a sumar de a tres ante un Watford en caída. Mientras que el Crystal Palace visitará el St. Mary's Stadium para chocar ante Southampton.