El técnico austriaco inició con un 4-3-3 en el Olympiastadion para hacer frente al Hertha Berlín. Un 4-3-3 que tendría ciertos matices en la ofensiva. La no convocatoria de Aubameyang por problemas extra deportivos, le otorgarían a Andre Schurrle comandar el frente de ataque como falso nueve. Mientras que el nuevo fichaje Manuel Akanji, proveniente del Basel (Suiza) estaría en el banquillo. Pál Dárdai comenzaría  con el ya caracterizado dibujo de 4-2-3-1, con el internacional alemán sub 21, Davie Selke en la punta de lanza.

Tras la derrota el pasado sábado ante el Stuttgart, el técnico húngaro apostaría, como ya es costumbre, a un repliegue y a una salida rápida tomando en cuenta la capacidad técnica y cualitativa de los intérpretes visitantes con el balón.

El Hertha aplicado, maniató al Dortmund

Atrás quedó la elaboración en fase embrionaria y el sometimiento a través de la posesión del cuero con el otrora entrenador del Mainz. El plan de Stöger ya visto en la consecución de sus encuentros, es saltar la línea de presión del rival usando a Sokratis como actor principal, es decir tratar de imprimir vértigo y frenetismo para el posible destino de los extremos de sorprender y llegar a la portería siendo lo más práctico posible.

Dárdai por su parte, predispuso un bloque sólido y aplicado en defensa, que consistía en presionar desde ¾ en la zona visitante, lo que permitía ser una rueda de auxilio a los defensores para nunca quedar mano a mano y en riesgo, tras una pérdida del esférico. El comportamiento coral de la estructura capitalina, tenía dos vías de escape, una, la del eléctrico extremo Valentino Lázaro, que con la colaboración de su compañero Mitchell Weiser por la banda derecha, pusieron en momentos de apremio a los defensores aurinegros y fueron donde se generaron las situaciones más claras del compromiso.

La segunda fue (aunque fue cobrando sentido con el correr de los minutos) la del lateral izquierdo Plattenhardt por dicho carril. Si bien, en el dibujo en ofensivo, Kalou aparecía de externo por izquierda, el marfileño interiorizaba mucho sus conducciones dejando la cal libre para el nativo alemán, provocando con el correr de los minutos, un caldo de cultivo para que el Hertha dominara el encuentro desde lo posicional y también obteniendo las mejores  situaciones de gol.

El Borussia Dortmund se visualizó espeso y previsible en la circulación, con lo que el plan de saltar líneas a punta de balonazo a largos, hicieron sencillo el trabajo a la zaga del Hertha.

El gol del vestuario que golpeó al Dortmund

El Hertha sacaba del medio y en una gran acción colectiva por derecha, el activo Valentino Lázaro tomó la conducción de la pelota, construyendo una pared con el eslovaco Ondrej Duda, quién con una devolución sútil, permitió el acceso libre por el callejón, para que con un centro rasante encontrara al joven Davie Selke, y este con un toque educado adelantara al Hertha en el tablero.

El gol llegó en el 45’:45” y la rúbrica en la red, sedujo al Hertha de seguir ejecutando el plan inicial a golpe de estatuto. El lógico desgaste que provoca una presión alta y cubrir el campo de manera exigida, lleva a un declive del rendimiento natural en cualquier equipo del mundo. Dicho factor derivaría que las coberturas diseñadas por Pál Dárdai empezaba a necesitar oxígeno. Plattenhardt por izquierda otorgaba cierta maniobra de salida, pero con pocas posibilidades de peligro real. 

Pese al leve cansancio de los locales, la poca creatividad del Dortmund lo hacían ver en el campo un equipo plano en el segundo tiempo.

Pulisic, Schurrle y Jadon Sancho, cobraron importancia vital

Pulisic, Schurrle y Jadon Sancho, cobraron importancia vital para el desarrollo del resto del partido. El norteamericano tomó  el bastión del ataque por derecha, y consiguió inquietar con remates a puertas a Kraft.

Mas tarde, lo que en principios parecería una modificación  estilo de la “vieja escuela alemana”, por parte de Peter Stöger, es decir sacar un volante de juego (Götze) y agregar un nueve fijo (Alexander Isak) parecería que se quisiera aglutinar gente en el área a la espera de la lluvia de centros.

Pero no, el cambio tenía el fin de darle a Isak la posición de 9 fijo y a Schurrle retrasarlo, para que así el ex Chelsea abasteciera por el centro a la ofensiva. Andre no aparecía en el catálogo de marca de los locales, y al moverse por zonas interiores del campo, produjo desajustes en el almanaque del estratega húngaro.

El impacto de Jadon Sancho por izquierda fue más determinante aún. El inglés con su exquisito regate mas la desatención de los sagueros berlineses, derivaron en un centro para que Kagawa apareciera libre y con un testaso empatara el partido.

Con casi 20 minutos por jugar del complemento, la posibilidad del Dortmund de ganar fue real. Con el Hertha renunciando al ataque, las triangulaciones del Dortmund y la fluidez del juego se hizo más frecuente. Pero el premio por buscarlo en el final, no llegó.

El Dortmund podrá tener la mala noticia de que Aubameyang abandone el club, pero las figuras de Pulisic, Sancho e Isak, mantienen intacta la posibilidad de mantener un proyecto que en su momento sedujo a toda Europa.