Antonio Conte salvó anoche uno de sus momentos más complicados al frente del banquillo del Chelsea. Por los rumores acerca de su salida, e incluso de una posible sustitución con candidatos a reemplazarle ya encima de la mesa, el partido frente al West Bromwich era de vital importancia para su futuro en el banquillo de Stanford Bridge.

No sin sufrimiento, pero el partido les salió redondo a los blues. Giroud se estrenó como titular y dio su primera asistencia de gol para que Hazard abriera el marcador. Tuvo también alguna ocasión para marcar pero Foster lo impidió con dos buenas atajadas. Por su parte, Hazard volvió a dar un recital de juego asociativo, tirando paredes con sus compañeros e incluso con las piernas de los rivales que no podían pararle. Hizo dos goles.

El culmen de buenas noticias fueron los 30´ que pudieron ver los aficionados a Álvaro Morata. El delantero español, inmerso en una fuerte polémica por su misteriosa lesión, llevaba 4 partidos sin entrar en la lista de convocados, quizás los 4 peores de la era Conte en el banquillo. Las derrotas frente a Bournemouth y Watford no solo han sido muy duras por el resultado, también lo eran por el juego.

Por ese motivo se mostraba Conte tan satisfecho de poder disponer de 2 delanteros. “Hoy ninguno de los dos estaba al 100%. Forzamos a Giroud a jugar porque teníamos a Morata lesionado, y era importante tener un punto de referencia como él en el campo. Tener dos delanteros en la pelea por un puesto es muy importante. Esta victoria cambiará nuestra dinámica”, explicaba Conte.

En los minutos finales gran parte de la afición de Stanford Bridge felicitaba a Conte al grito de ¡Antonio, Antonio!, algo que el mánager blue quiso agradecer con estas palabras. “Doy las gracias a los aficionados del Chelsea por su apoyo hacia mí esta noche. Después de un año y medio como entrenador, entienden completamente mi pasión por el club y por el escudo”, comentó.